Ella es el chico

Según afirman en la revistilla de la Renfe –sí, sí, esta también la he visto en un tren– la película es una versión juvenil de ''Noche de Reyes'' de Shakespeare, válgame el Cielo. Pues menos mal que lo dicen, porque nadie lo sospecharía, no se nota en absoluto, vamos. Con el mismo rigor podrían asegurar que es una versión juvenil de "La Divina Comedia", del discurso de nochebuena del rey, de la misa del gallo o de lo que les dé la gana. Lo que sí es, y de qué manera, es juvenil, repugnante, pedorra y recalcitrantemente juvenil, entendido este adjetivo de la peor manera posible y como caracterizador de un producto comercial que adula babosamente a un público adolescente, bienpensante y, en este caso, femenino. Y por si fuera poco, el tren llegó con retraso.

De estas películas no esperas mucho, pero por lo menos que no de pena. (Esta no lo logra).

1- Hay que ser realmente cegato o tener un problema grave en el cerebro para pensar que es un tío, y menos que se parezca a su hermano.

2- Se podría pasar por alto lo absurdo de la historia sin sentido aun con dificultad, si por lo menos te rieras con las bromas, cosa que en mi caso no consigue.

3- Encima es un remake de "Just One of the Guys" que a mi parecer le da mil vueltas.

En fin, puedes pasar de ella sin remordimientos.

Probablemente, si Shakespeare levantara la cabeza quedaría sorprendido y satisfecho de la vigencia y universalidad que posee toda su producción literaria. Con Ella Es el Chico asistimos, una vez más, a la capacidad de mutación y versatilidad del legado shakesperiano, y es que dicha película no es más que una versión libre y moderna de “Noche de Reyes”, comedia ligera sobre suplantaciones, embrollos y amoríos obra del dramaturgo inglés. En esta adaptación Amanda Bynes da vida a Viola, una joven jugadora de fútbol que decidirá hacerse pasar por su hermano gemelo para poder participar en el campeonato escolar de soccer. En su aventura, Viola se enamorará de un compañero de equipo, Duke, con el consiguiente entuerto que ello supone, dado que todo el mundo cree que ella es un chico. Lo que ha hecho el cineasta Andy Fickman ha sido trasladar las andanzas y malos entendidos cortesanos de la pieza cómica de Shakespeare a un contexto preuniversitario yankee, y añadirle unas gotas (bastantes) de humor para adolescentes, ese humor algo cafre que busca la comicidad que se desprende de las situaciones gobernadas por la efervescencia sexual de los jovenzuelos. Al final de esta comedia para teenagers subyacerá un mensaje igualitarista, el único problema es que para llegar a él los más susceptibles deberán soportar algún gag poco afortunado rayano a la homofobia.

La película te podrá gustar más o menos, pero estoy seguro que si alguna vez levanta el vuelo es por su espléndida protagonistsa. No la conocía e informándome me he dado cuenta que tiene un par de comedietas más y hasta una serie de televisión. Tiene una comicidad innata que bien podría hacer sombra a la mismísima Sandra Bullock o Reese Witherspoon. Es uns clown con unas posibilidades que el futuro dirá. Por cierto, para los más observadores. Al verla, no le ha venido a la mente de inmediato a Jennifer Aniston? Es su hija adoptiva!! Incluso con algunos de sus tics!!

Lo mejor: Amanda Bynes
Lo peor: el resto de la película

Es tal cual su género lo indica: una comedia romántica para ver quizá en familia, pero te deja ese gusto extraño y esa sensación de que pudo ser mucho mejor, debido a que los elementos que formaban la cinta pudieron ser mejor utilizados. Es recomendable verla, pero señores, no en el cine.