Rose Red (Miniserie de TV)

Rose Red es una novela de Stephen King llevada al celuloide de manera aceptable. Una psicóloga experta en parapsicología y obsesionada con la casa de Rose Red contrata con su dinero a un grupo de personas con habilidades paranormales para pasar un fin de semana en la casa y desentrañar el misterio que encierra. Demasiado casual que el novio de la psicología sea descendiente de los antiguos moradores de la casa y el actual propietario de la misma.

A los amantes del género de terror de casas encantadas la película les entretendrá durante 4 horas, que no es poco. Eso sí, pese a rodarse en el 2002 parece que se rodó a finales de los setenta; los efectos especiales de los fantasmas son bastante mejorables, se nota que es una película de serie B de poco presupuesto. La actuación de la niña con superpoderes también es bastante mejorable.

Más que de terror, estamos ante una pelicula de suspense. Pese a todo, pasable

Es una más de las muchas miniseries sobre adaptaciones, o directamente un guion original en este caso, del prolífico Stephen King. Aquí dirige el mismo que hizo también la posterior y extrañísima “Hospital Kingdom”. Como suele suceder, tiene la esencia del rey del terror, pero también una carencia de medios que da un resultado que a duras penas alcanza la mediocridad, y que por supuesto no da miedo ninguno.
Esta vez no hay libro con el que comparar. King escribe directamente un guion para la pequeña pantalla, al igual que en “La tormenta del siglo”.
Los temas son recurrentes: una niña con poderes, una casa encantada y una investigación científica que, como nos podemos imaginar, no va a demostrar nada y va a hacérselo pasar muy mal a los participantes.
El diseño de “Rose Red” está muy bien, tanto por fuera como por dentro. Pero no es una mansión al uso, y estamos más cerca de las paranoias de “The haunting (1999)”, que del terror clásico.
No hay grandes actores. Encabeza el reparto Nancy Travis, una actriz habitual (que no importante) en los 80 y 90. Hace de científica de mente abierta, y es el personaje más interesante.
Los demás son el típico grupo de frikies paridos por la mente de King. Especialmente cargante es Emery y la relación con su madre. Un personaje (con un actor realmente malo) tan odioso como Jar Jar Binks de “Star wars”.
Hay que ser muy seguidor del autor (como yo) para valorarla positivamente, una vez vemos a estos fantasmas tan cutres y las cosas que pasan en la mansión. Los momentos más ridículos son las flores emitiendo música, el perro volando con el golpe de telequinesia, o las caras que pone la criada negra. Si tuviera los ojos más saltones se le saldrían de las cuencas.
Al menos es bastante entretenida y corta. Eso sí, la que es mala a rabiar e imposible de salvar, es esa precuela que hicieron que se titula “El diario de Ellen Rimbauer”.

Peripecias de un director cutre.
Día 1: Decide hacer una película original, corta y que se haga amena debido al entretenimiento que consigue en cada una de sus escenas.
Día 2: Sólo consigue un peñazo de 4 horas con la historia más cutre, asquerosa, sinsentido, vomitiva, mal grabada y mil cosas más.
Fin de las peripecias.
Vayamos a la realidad, esta película es...esto...espera que me lo piense....MALA...DE COJONES...HORRIBLE.
Eso sí, hace mucha risa, pero que mucha risa, yo me descojonaba. El director seguro que sería el payaso en su clase, que risas me eché con esta telenovela de sólo cuatro horitas. Bah, se ve en un nada.
En fin, que paro de ironías y vayamos a lo serio.
Rose Red en diez palabras.
1- Larga
2- Aburrida
3- Cutre
4- Asquerosa
5- Mala
6- Lo contrario de original
7- Fea
8- Graciosísima
9- No sé, a ver, mala otra vez.
10- Pésima.
No le pongo un 1 porque una vez me hizo reír mucho, y tiene su mérito.