Calles de fuego
8.724
Acción. Thriller. Drama. Romance. Musical
En medio de un panorama de desenfreno y rocanrol, la banda de los Moteros terroristas, capitaneada por el vicioso Raven Shaddock (Willem Dafoe), secuestra a la diva de la canción Ellen Aim (Diane Lane). Su única esperanza es ser rescatada por unos héroes atípicos: el cazafortunas Tom Cody (Michael Paré) y su ayudante McCoy (Amy Madigan). Ambos, ayudados por el mánager de Ellen (Rick Moranis), se adentran en un mundo de coches calientes ... [+]
17 de enero de 2017
8 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Calles de Fuego es una versión atornadora, sin demasiado sentido, del argumento de Casablanca filtrada por el enfebrecido homenaje al rock&roll de la cultura de masas de la industria musical californiana e interpretada por Michael Paré y Diane Lane en clave kinética.
Nada tiene sentido, pero todo está lleno de epifánicas canciones ochenteras y transcurre en un mundo enfebrecido conocido como "los 80" por las revistas de tendencias al que, de vez en cuando, los miopes van a descansar.
Willem Dafoe es un villano sacado de cualquier película juvenil de los 50 y Rick Moranis es un Andrew Lazslo para la década post-Woody Allen.
Nada tiene sentido, pero todo está lleno de epifánicas canciones ochenteras y transcurre en un mundo enfebrecido conocido como "los 80" por las revistas de tendencias al que, de vez en cuando, los miopes van a descansar.
Willem Dafoe es un villano sacado de cualquier película juvenil de los 50 y Rick Moranis es un Andrew Lazslo para la década post-Woody Allen.
16 de febrero de 2015
8 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Porque todos hemos querido perdernos entre las luces de neón de esas Calles de Fuego.
Porque todos nos hemos sentido alguna vez tan solos como Cody.
Porque todos nos hemos tenido que enfrentar a algún Raven Shaddock a lo largo de nuestra vida.
Porque todos sabemos por qué Cody regresa a enfrentarse con su destino.
Porque a todos nos acecha esa sombra que es Fish, alguien que pudo dar lo que nosotros no pudimos a esa persona especial.
Porque todos hemos admirado embelesados a nuestra amada cuando era la mejor en lo que hacía.
Y porque todos querríamos besarla de esa manera bajo la lluvia. Brillante.
Porque todos nos hemos sentido alguna vez tan solos como Cody.
Porque todos nos hemos tenido que enfrentar a algún Raven Shaddock a lo largo de nuestra vida.
Porque todos sabemos por qué Cody regresa a enfrentarse con su destino.
Porque a todos nos acecha esa sombra que es Fish, alguien que pudo dar lo que nosotros no pudimos a esa persona especial.
Porque todos hemos admirado embelesados a nuestra amada cuando era la mejor en lo que hacía.
Y porque todos querríamos besarla de esa manera bajo la lluvia. Brillante.
28 de noviembre de 2016
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuando pasan muchos años y vuelves al barrio donde creciste siempre ocurre lo mismo. Tantos recuerdos, tantos detalles a destacar por seguir igual y otros recordados con nostalgia porque ya no volverán. Pues lo mismo ocurre con esta película al verla de nuevo.
A muchos les parecerá una del montón e incluso mala, pero la nostalgia en estos tiempos donde todo está inventado y en donde parece que tengamos que ver siempre lo mismo en cine, videojuegos o televisión hace que veas más allá.
La historia es simple y previsible pero contada con un ritmo y acompañada de algo que ya no se suele ver. Y eso es personajes con carisma. Carisma, ese algo que se tiene o no, que no se puede entrenar y que se ha intentado copiar miles de veces.
Cody (físicamente y mismo nombre que el personaje del juego "Final fight") se muestra como el amo. El que reparte leña, el chulo pero con buen fondo que todos queremos ser y sin ser una mole musculosa. ¿Suena como Bruce Willis? pues mira la fecha y sorpréndete quien vino primero.
Dafoe haciendo de malo mostraba el talento que tenía por explotar y una Diana Lane que llena la pantalla con una sensualidad inigualable (y sin enseñar carnaza, que locura).
La banda sonora excepcional aunque abunda tanto que roza ser un musical.
Y un final perfecto e impropio para la época en la que se realizó.
Una vuelta a esa ciudad llena de acero que para los que pasamos la treintena nos hará volver a recordar las genialidades que vivimos.
A muchos les parecerá una del montón e incluso mala, pero la nostalgia en estos tiempos donde todo está inventado y en donde parece que tengamos que ver siempre lo mismo en cine, videojuegos o televisión hace que veas más allá.
La historia es simple y previsible pero contada con un ritmo y acompañada de algo que ya no se suele ver. Y eso es personajes con carisma. Carisma, ese algo que se tiene o no, que no se puede entrenar y que se ha intentado copiar miles de veces.
Cody (físicamente y mismo nombre que el personaje del juego "Final fight") se muestra como el amo. El que reparte leña, el chulo pero con buen fondo que todos queremos ser y sin ser una mole musculosa. ¿Suena como Bruce Willis? pues mira la fecha y sorpréndete quien vino primero.
Dafoe haciendo de malo mostraba el talento que tenía por explotar y una Diana Lane que llena la pantalla con una sensualidad inigualable (y sin enseñar carnaza, que locura).
La banda sonora excepcional aunque abunda tanto que roza ser un musical.
Y un final perfecto e impropio para la época en la que se realizó.
Una vuelta a esa ciudad llena de acero que para los que pasamos la treintena nos hará volver a recordar las genialidades que vivimos.
15 de febrero de 2013
6 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Considerada hoy de culto, Calles de Fuego es una película que en el momento de su estreno allá por 1984 no fue aceptada por crítica y público. De hecho, estos últimos la ignoraron en taquilla -entró en la posición 5 del Box Office para desaparecer poco después-. Como pasa con otros muchos largometrajes -Blade Runner, Mad Max, La Cosa- con el tiempo se fue ganando una legión de fieles seguidores que la reivindican como el gran film que a decir verdad no es. La dirigió Walter Hill, especialista en cine de acción de carrera poco apreciada pero llena de buenos títulos -La Presa, The Warriors, Límite: 48 Horas, El Último Hombre-.
El reparto, conjunción de muchos nombres que posteriormente hicieron carrera, y muchos otros que no: Michael Paré (El Experimento Philadelphia), Diane Lane (Infiel), Willem Dafoe (Platoon), Rick Moranis (Cazafantasmas), Amy Madigan (La Mitad Oscura), Bill Paxton (Titanic) y Deborah Van Valkenburgh (The Warriors).
La famosa cantante Ellen Aim (Lane) es secuestrada por una banda de peligrosos moteros llamados Bombers (liderados por Willem Dafoe). Poco después aparece en la ciudad Tom Cody (Paré), mercenario que resulta ser el ex-novio de Ellen y que por supuesto irá a rescatarla, con ayuda de su manager (Moranis) y una ex-soldado (Madigan).
Calles de Fuego es una rara avis del cine de los ochenta. Es como si metiéramos en una coctelera a The Warriors (1979) y Grease (1978). De la primera -la cual Walter Hill es director- es típico cine de lucha de bandas callejeras, la segunda como todo el mundo sabe a estas alturas es un musical. La combinación de ambas podría ser esta Calles de Fuego, en la que en una escena el protagonista puede estar empuñando un arma contra un motero, y en la siguiente asistir a un concierto de Ellen Aim & The Attackers o The Sorels. Hay que decir por otro lado que si bien Calles de Fuego es un musical, no es uno en el que los personajes canten sin venir a cuento, las actuaciones están integradas en el argumento aunque ello quiera decir que en un flashback nos cuelen un videoclip de tres minutazos con Diane Lane cantando en playback.
Por si esta suma no fuera poco, Calles de Fuego es un popurrí de otras influencias, todas ellas anacrónicas. El tratamiento de la película es un Western, con un trabajado look de los años 50's y música de los 80´s.
Al grano, ¿Es buena Calles de Fuego? Como cinta western/acción tiene la solvencia y el buen hacer de un Walter Hill siempre dedicado a esos géneros. Como musical puede haber diversidad de opiniones dependiendo del gusto musical del espectador. Para mí este último apartado es fifty/fifty pues en la banda sonora hay un par de temas pop/rock de radiofórmula estimables -los que abren y cierran Calles de Fuego- y una banda sonora portentosa del guitarrista Ry Cooder. Sin embargo también hay unos cuantos temas que dejan bastante que desear, en especial alguna balada hortera que seguro encajaría en la discografía de Bonnie Tyler.
El reparto, conjunción de muchos nombres que posteriormente hicieron carrera, y muchos otros que no: Michael Paré (El Experimento Philadelphia), Diane Lane (Infiel), Willem Dafoe (Platoon), Rick Moranis (Cazafantasmas), Amy Madigan (La Mitad Oscura), Bill Paxton (Titanic) y Deborah Van Valkenburgh (The Warriors).
La famosa cantante Ellen Aim (Lane) es secuestrada por una banda de peligrosos moteros llamados Bombers (liderados por Willem Dafoe). Poco después aparece en la ciudad Tom Cody (Paré), mercenario que resulta ser el ex-novio de Ellen y que por supuesto irá a rescatarla, con ayuda de su manager (Moranis) y una ex-soldado (Madigan).
Calles de Fuego es una rara avis del cine de los ochenta. Es como si metiéramos en una coctelera a The Warriors (1979) y Grease (1978). De la primera -la cual Walter Hill es director- es típico cine de lucha de bandas callejeras, la segunda como todo el mundo sabe a estas alturas es un musical. La combinación de ambas podría ser esta Calles de Fuego, en la que en una escena el protagonista puede estar empuñando un arma contra un motero, y en la siguiente asistir a un concierto de Ellen Aim & The Attackers o The Sorels. Hay que decir por otro lado que si bien Calles de Fuego es un musical, no es uno en el que los personajes canten sin venir a cuento, las actuaciones están integradas en el argumento aunque ello quiera decir que en un flashback nos cuelen un videoclip de tres minutazos con Diane Lane cantando en playback.
Por si esta suma no fuera poco, Calles de Fuego es un popurrí de otras influencias, todas ellas anacrónicas. El tratamiento de la película es un Western, con un trabajado look de los años 50's y música de los 80´s.
Al grano, ¿Es buena Calles de Fuego? Como cinta western/acción tiene la solvencia y el buen hacer de un Walter Hill siempre dedicado a esos géneros. Como musical puede haber diversidad de opiniones dependiendo del gusto musical del espectador. Para mí este último apartado es fifty/fifty pues en la banda sonora hay un par de temas pop/rock de radiofórmula estimables -los que abren y cierran Calles de Fuego- y una banda sonora portentosa del guitarrista Ry Cooder. Sin embargo también hay unos cuantos temas que dejan bastante que desear, en especial alguna balada hortera que seguro encajaría en la discografía de Bonnie Tyler.
6 de mayo de 2010
10 de 15 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sudando las calles de un fugitivo sueño americano
Atravesando mansiones de gloria en coches suicidas
Caminando con ángeles desplazados
Dame la mano, sube atrás, hay magia en la noche
En donde queremos llegar podremos caminar bajo el sol
Pero hasta entonces seremos vagabundos
Nacidos para correr
Necesito saber si el amor es salvaje
Por eso quiero morir contigo en las calles de fuego
Y entonces la tierra prometida será nuestra
Atravesando mansiones de gloria en coches suicidas
Caminando con ángeles desplazados
Dame la mano, sube atrás, hay magia en la noche
En donde queremos llegar podremos caminar bajo el sol
Pero hasta entonces seremos vagabundos
Nacidos para correr
Necesito saber si el amor es salvaje
Por eso quiero morir contigo en las calles de fuego
Y entonces la tierra prometida será nuestra
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama.
Ver todo
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here