¡Vaya vacaciones!

Robin Williams siempre ha sido un actor que me ha transmitido mucho buen rollo y felicidad, ha sabido hacerme reír, mantener en tensión y llorar. Varias películas en su filmografía ya son consideradas clásicos o grandes películas. En esta ocasión la primera cinta que pillé fue Vaya vacaciones, infravalorada comedia aventurera a modo de Road Movie con un Robin Williams demostrando el valor de la familia por encima de todo. Tras su triste e impactante muerte de hace unos días me dispuse a revisionar esta cinta y la verdad es que aunque no la recordaba muy bien me lo he vuelto a pasar estupendamente.
Resulta extraño que siendo una cinta de Barry Sonnenfeld, creador de Men in Black, la familia Adams y Wild wild west no sea conocida y mas siendo una comedia familiar de 2006 pero curiosamente la descubrí, me gustó y en este revisionado lo he vuelto a pasar bien. No tiene un guión para impresionar, ni tiene sorpresas pero su mensaje familiar está claro y la dirección de Sonnenfeld es curiosa y personal, prácticamente su estilo está presente, solo ver la escena del atasco del baño de la autocaravana para saber que estamos ante el humor absurdo, desagradable y asqueroso de las tres entregas de MIB. La banda sonora de James Newton Howard encaja a la perfección con un tono yankee e incluso hippie que se podría considerar la hermana mayor y menos adulta en sentido cómico de Somos los Miller que tan buen rato pasé con ella.
Jeff Daniels resulta un secundario más junto a su familia pero a medida que avanzan los minutos te das cuenta de que no son un simple relleno o que no aporten nada.
En definitiva, una comedia de aventuras, muy entretenida con algunos gags destacables que sin ser una joya logra ser un pasatiempo agradable liderado por un siempre efectivo y agradable Robin Williams.

Casi quince años han pasado ya desde el estreno de "¡Vaya vacaciones!", alguno menos desde que yo la vi por primera vez, pero no muchos menos, y la verdad sea dicha, me sigue funcionando igual. Excelente baremo que uso, y quizás debierais usar también, a la hora de medir este tipo de trabajos, y no tanto si los personajes son más o menos estereotipados o si la trama es más o menos esquemática.
Di que gran parte de que "¡Vaya vacaciones!" siga funcionando la tiene ese tsunami al que nunca dejaré de echar de menos llamado Robin Williams. En esta comedia familiar a modo de road movie de Barry Sonnenfeld el actor se afilia al humor físico, para acabar entregando un buen puñado de estupendos gags que van desde lo escatológico hasta lo absurdo.
"¡Vaya vacaciones!" fue un producto para lucimiento de un Robin Williams que no atravesó una década de los dosmiles demasiado brillante en lo que a comedia se refiere. De hecho, esta obra de Sonnenfeld es lo mejor que entregó el actor en esos años a tal respecto. Lo anterior resalta viendo como el paso de los años ha hecho casi de ácido sulfúrico sobre gran parte de los actores secundarios de la cinta. Will Arnett y Jeff Daniels acudieron en calidad de miembros de la banda, pero sin robarle demasiado protagonismo al cantante Williams, y Josh Hutcherson como telonero que al final mereció conciertos propios. No demasiado relevantes, pero los tuvo.

¡Vaya vacaciones! no es un completo desastre, porque se puede decir que es entretenida, sin duda. Además, los actores hacen lo que pueden, con un Robin Williams al frente que, si bien ya no era el de los 90, seguía siendo único para sacar una sonrisa al espectador y ser enormemente simpático. A su alrededor, Kristin Chenowetz, Jeff Daniels, un jovencísimo Josh Hutcherson, Hunter Parrish o la cantante JoJo, a modo de simpático conjunto para complementar el trabajo de la estrella, que es Williams.
El problema es que la película es bastante sosa, la hemos visto mil veces y no es ni demasiado graciosa ni demasiado nada. Es ni chicha ni limoná. Y es una pena ver que Barry Sonnefeld ha terminado así, o haciendo comedias bobas en el cine francés (por raro que pueda parecer), cuando fue lo más de lo más del entretenimiento gracias a sagas como Men in Black o La familia Addams.
Pasa sin pena ni gloria. Sólo para ratos aburridos que llenar con algo ligero.

Para pasar el rato no está mal. Al menos la película no tiene pretensiones y esto se agradece. Hay ciertos gags que pueden resultar cómicos y el resto del reparto es aceptable, sobre todo en lo que se refiere a Jeff Daniels y Cheryl Hines.
Lo peor es la típica moralina que desprenden estas películas americanas.

Se trata de una comedia disparatada que no es la mejor ni la peor de las dirigidas por Barry Sonnenfeld. La verdad es que la película está llena de tonteríasy situaciones caóticas y delirantes, muy de humor americano, pero visualmente, algunas tienen su gracia, hasta el punto de que la película no se hace larga, y en conjunto, resulta pasable y hasta simpática.
Robin Williams alcanza sus dos extremos, y alterna buenos momentos con otros en los que se hace insoportable. Aún así, el verdadero protagonista es la caravana, a la que incluso se la podía haber sacado mayor partido.