Lluvia de albóndigas

Una crítica rápida.

La película sigue el guión estándar de toda pelicula de animación 3D. Salvando un detalle: Es delirantemente absurda, y con un punto de carisma solo al alcance de las grandes. El plantel de personajes, bien grande, es de lo más memorable que he visto en una larga temporada. Sumarle que es divertidísima, y tendreis una película deliciosa para pasar una tarde en el cine, y mejor aún si es en 3D.

Parece inevitable que con la rentabilidad que han conseguido Pixar/Disney y Dreamworks, empezaran a salirle competidores, como Blue Sky Studios con la nada desdeñable franquicia de “Ice Age” e incluso la española Ilion Animation, que con su “Planet 51” ha conseguido involucrar a buena parte de la industria norteamericana y colonizar sus pantallas. En toda esta carrera (rat race, que dirían los americanos) estaba un poco descolgada Sony Pictures Animation, ya que ninguno de sus relativamente recientes productos “Colegas en el bosque”, “Locos por el Surf”, y que el que fuera mejor de todos ellos, auspiciado por el mismísimo Robert Zemeckis “Monster House” ha cuajado demasiado en el público. Por eso necesitaban urgentemente un revulsivo que lograra posicionarlos en los puestos de cabeza en las (muchas) factorías de animación que ya han abierto un filón, extensivo al marketing, el merchandising y varias vías de negocio que conforman el panorama actual de las películas dibujadas y/o diseñadas a imagen y semejanza de los actores famosos que les prestan sus voces a los personajes. En el mundo anglosajón es muy popular un libro para niños, escrito en 1978 por Judi y Ron Barrett, “Lluvia de albóndigas” que con su singular estilo visual, sus coloristas dibujos, y su surrealista sentido del humor han logrado hacerse un hueco en las mentes de los que han crecido con este referente, como les ha sucedido a los directores/guionistas del film que nos ocupa, y que vieron ideal el material de partida para hacer un film original (y por supuesto, rentable) para niños. Porque a pesar de los intentos de hacer “compatible” este film para los adultos, no lo es: su delirante sentido de la historia, del guión, del humor, parece exclusivamente orientado a los más pequeños. No obstante, el film se disfruta con cierta candidez, sobre todo por la historia: un chaval obsesionado con convertirse en el mayor inventor de la historia de la humanidad, consigue por fin hacer funcionar uno de sus artilugios, y no es nada más y nada menos que un aparato que convierte el agua en comida. (sigue en spoiler)

Desde que el genio de Pixar esponsorizara el nuevo maná de la animación con la aplicación de las técnicas digitales, muchos son los que han intentado hacerse de oro con ella. Y mientras que Pixar, mejor que nadie, ha sabido entender aquello de que para que un bonito envoltorio luzca tiene que estar relleno de algo igualmente sabroso para no dejar caer el desánimo entre sus espectadores, algunos otros han seguido el camino algo más gratuito del recurso fácil y el juego del artificio pirotécnico. Pues bien, si Pixar es el indiscutible maestro de la animación moderna, Sony Animation se presenta como el alumno aventajado, algo de lo que ya dio muestras con su también notable anterior propuesta 'Locos por el Surf'.

‘Lluvia de Albóndigas’ podría valer como la perfecta definición de lo que significa la simpatía. Ya desde su primer fotograma, desde su primer gag (y el cual tiene lugar incluso antes de la película… antológico), es tal la simpatía que despierta que es imposible no caer rendido ante esta notable cinta que sabe apreciar que un film para todos los públicos no tiene por qué ser necesariamente infantil o infantiloide. Aunando una factura técnica excelente, un guión sólido, un ritmo envidiable y con el buen rollo por bandera, el resultado de su visionado es tan sumamente gratificante que no hay otra opción que salir de la sala con una sonrisa de oreja a oreja.

Después de unos años en los que por momentos parecía que el cine para todos los públicos, y en particular el de animación, no tenía muy clara su condición y se dedicaba a presentar propuestas en algunos casos irrisoriamente estúpidas, en este año 2009 parece que algo ha cambiado. ‘Up’, ‘Los Mundos de Coraline’ o la propia ‘Lluvia de Albóndigas’, y por citar sólo tres ejemplos, presentan propuestas que escapan a todas luces del gueto de la animación para presentarse como verdaderas obras del séptimo arte a tener en consideración en cualquier grado. De Pixar no sorprende, y aunque de las otras dos su condición animada sea fundamental para entender sus intenciones y resultados, lo uno no quita lo otro. 'Lluvia de Albóndigas' suma así su nombre a la respetable lista de lo mejor del año, y lo hace por méritos propios.

Otra más de animación. Mucho colorín e historia más o menos rocambolesca salpicada de innumerables tópicos: el cerebrito incomprendido, la peligrosa ambición científica, la manipulación política, el inevitable y ñoño romance, el trasfondo moral más o menos llevadero… todo dentro de un tono lo suficientemente amable como para ser degustado en ambiente familiar.

El punto novedoso lo pone el mundo gastronómico; el tornado de espaguetis me ha hecho bastante gracia y, en general, por menos publicitada y pretenciosa, la película me ha parecido mucho más divertida y fresca que los megaéxitos de Pixar en los últimos tiempos, “Wall-e” o “Up”.

Buffet libre de locuras en una producción que no deja indiferente por lo ultra acelerado de su ritmo y lo definitivamente descacharrante de su premisa y desarrollo. Diversión a raudales para grandes, pequeños y medianos.