Transamérica

Dolorosa, sórdida, triste, con una dosis de realidad más alta de la que el cine americano nos tiene acostumbrados. Aunque fueron varias las veces en las que la tentación de interrumpir su visionado me acechó con insistencia, conseguí llegar hasta el final y me alegro por ello infinitamente. Una inesperada invasión en la sensibilidad del espectador que nos obliga, más que nos invita, a reflexionar sobre el ser o no ser nosotros mismos.

La verdad por delante, su punto flaco es el tono humorístico de lo que es un drama en toda regla. Y a la vez su virtud, puesto que de otra forma sería de muy difícil digestión.
Acierto del director/guionista el de contraponer una vida más caótica y atormentada del hijo respecto al conflicto principal de la madre.
Gran interpretación de la mujer desesperada y del resto del elenco -especial mención para Mrs.Flanagan que lo borda como madre-. Te crees un papel tan difícil de realizar por una mujer por el amor que le tiene Huffman al mismo.
Lo mejor: El pulso general del film, Huffman.
Lo peor: Fríamente es difícil de creer.

Los oscars me la sudan desde hace mucho tiempo, así que no voy a caer en aquello de "Felicity Huffman está de oscar". Está de oscar, de palma de oro, de león de oro, de copa volpi... Está para casarse con ella, y mira que sale fea la jodía. Eso me recuerda que su marido es William H. Macy. Menuda familia, por dios. Yo quiero ser hijo vuestro.
Odio las comparaciones pero tiene esa maravillosa sencillez de "Entre copas", sobre todo en los diálogos magistrales "rebuscadamente poco rebuscados". En la sencillez está la clave.

Creo que el extraordinario desempeño histriónico de Felicity Huffman le debió haber valido el Oscar® como mejor actriz, ya que te lleva por la complicada vida de este hombre que se transforma en una mujer, una dama conservadora, de forma que al ver la película te olvidas de que es una mujer la que interpreta a este hombre y te dejas llevar por el personaje. Aparte del buen trabajo de caracterización, me recuerda al papel de en “The Adventures of Priscilla, Queen of the Desert”, quien tuvo una muy notable actuación aunque no fue reconocida por la critica. Incluso “Transamerica” tiene esa formula de tiene un poco de “The Adventures of Priscilla, Queen of the Desert” por lo de el padre que reencuentra con su hijo solo que en esta cinta es un travestiste homosexual interpretado por Hugo Weaving, y parte del personaje de Terence Stamp, tambien tiene tintes de “The Adventures of Sebastian Cole”, en donde el padrastro del protagonista está por realizarse un cambio de genero.
Kevin Zegers logra una actuación bastante convincente, como un hijo que no entiende a su extravagante padre. Aunque Fionnula Flanagan es una de mis actrices favoritas en esta ocasión su actuación no me convenció.
Finalmente creo que Transamerica es una película que realmente te llega al corazón.

Una muy buena película donde destacaría a la protagonista, Felicity Huffman, por su creíble ambigüedad, pero sobre todo a Duncan Tucker, no tanto por su labor en la dirección (aunque también es digna de elogio) como por el excelente guión que ha dado base a toda la obra.