Los aristócratas del crimen

Aunque la peli no pasa de interesante, se puede dejar ver; se ve el estilo del los años setenta.

Tiene ritmo, bonitos paisajes de San Francisco, un gran trabajo de James Caan, sin desmerecer a J Duvall, malo malísimo, por cierto, dúo que disfrutamos en El Padrino", según esta web la mejor película de todos los tiempos.

Para pasar el rato, en una trama de servicios secretos corruptos, tema que siempre será actualidad, por desgracia.

Por supuesto que no es de las mejores de Peckinpah y tiene un argumento inverosímil con personajes estrafalarios de todo tipo aunque, eso sí, logra entretener si uno no piensa ni por un segundo. El film cuenta con los toques característicos de Peckinpah, la cámara lenta, la violencia y las traiciones por doquier. Aquí encontramos a un grupo de mercenarios que trabajan para un organismo que realiza tareas en donde el gobierno no quiere aparecer y se centra en la amistad de dos de ellos en donde un hecho puntual hará que se separen y se ubiquen en bandos contrarios o en realidad no tanto. Por supuesto hay acción de todo tipo y entretiene especialmente por la sobria actuación de los dos protagonistas principales los muy correctos James Caan y el gran Robert Duvall, pero también es digno de destacar a Bo Hopkins y Burt Young como secundarios que aportan lo suyo. En síntesis, es cierto que Peckinpah estaba en horas bajas cuando realizó esto pero también es justo decir que si uno no analiza nada le alcanza para pasar dos horas divertidas.