Interesante película con Alain Delon de protagonista, que se luce aquí gracias a un guión muy irónico y sarcástico, lleno de un humor siempre inteligente; algo que por desgracia no se encuentra en estos tiempos.

Los actores muy brillantes, al mando de un director que se sabe el oficio y maneja la trama a un ritmo muy ágil, rápido, perfecto.

En cuanto a la historia, para qué hablar! : tramas corruptas en las altas esferas políticas, con un libro de apuntes de los sobornos y nombres de sus destinatarios... Policías corruptos, políticos ídem. de ídem...

Igualita igualita a la realidad que nos rodea.

Recomendable.

A mi entender es una pelicula muy bien fotografiada, ambientada, con muy buenos movimientos de cámara, creadora de mundos, etc.etc., pero vacía y superficial, inverosímil a veces, con imágenes crudas y desagradables para saciar apetitos de gentes raritas.

Si después de media hora no engancha, no te atrapa porque no tiene ninguna magia que te conmueva, para qué esperar más? ; encima dura dos horas y pico.

Definitivamente el Sr. Del Toro no es mi director.

Sí, Micky Rooney, pequeño de estatura pero que como siempre llena la pantalla con su presencia, con sus maneras de gran actor.

Otra vez el Sr. Quine se luce haciéndonos pasar un buen rato con una entretenida historia, creíble, donde todos los actores están a gran altura.

Tiene un ritmo muy preciso, con una tensión que va aumentando progresivamente y que te deja anclado en el sillón hasta el desenlace.

Trata un tema muy interesante, que siempre será actual: cómo un hombre se puede quedar atrapado por los encantos de una mujer, cambiando una actitud recta de su vida e ir por otros indeseables derroteros, convertido en un títere en manos del "poder femenino".

Gran policíaco de J. Sturges, que se atreve con la tarea de meter al gran jinete del oeste en un coche haciendo de detective, con carreritas, persecuciones y metido en una comisaria.

Y a fe que lo consigue; el gran vaquero esta genial, como toda la película.

Un ritmo ajustado, buenas interpretaciones, acción a raudales y una historia entretenida, con suspense hasta los últimos minutos y un final digno del genio y saber hacer de su director; con persecuciones de coches con las olas del mar encima... lo nunca visto.

Para pasar un buen rato y disfrutar del eterno John Wayne.

Estupenda película, donde brillan Kirk Douglas y Kim Novac.
A buena altura están también todos los demás actores, muy bien dirigidos todos ellos por el director Richard Quine, que maneja además la cámara de manera sabia, regalándonos unos planos siempre acertados.
Los dos protagonistas principales, bordan sus papeles con la infidelidad y el enamoramiento como tema principal de la película.
Muy recomendable, en particular para los admiradores de Douglas, que somos legión.