Adèle y el misterio de la momia

Luc Besson se ha vuelto un productor-realizador bastante mediocre, tras algunos títulos estimables que le hacían augurarlo como un destacable rey del entretenimiento, se ha empantanado con los tópicos del cine francés de comedia, histrionismo a raudales y un humor donde lo absurdo reina y provoca el chiste fácil.
El film se esmera con sus cuidados y entretenidos efectos especiales y la caracterización de los personajes en seres paródicos, pero no es suficiente.
La actriz protagonista es lo mejor de la función y encaja muy bien en ese personaje disparatado y sin miedo a nada que solo se motiva por un objetivo noble y expiador, devolver la vida a su ser más querido, no importa lo que se haga o lo que implique eso.
Tampoco podemos sino elogiar la ambientación y los decorados de época de principios de siglo, que se encuandran bien en la época del furor de la pasión por lo egipcio y sus contínuos descubrimientos.
Para conocedores y condescendientes del cine francés y sus tópicos no está mal, pero para alguien, como es mi caso, que busca algo más serio, bien hervido y reposado, este tipo de humor chirría demasiado con su ritmo alocado y nervioso, y no es plato que se digiera con placer, quizás solo con simple hambre de comida muy poco nutritiva.
LO MEJOR_ Louise Bourgoin, sin duda. La ambientación, y los discretos pero dignos efectos especiales.
LO PEOR_ El tipo de humor galo y el ritmo histriónico de la historia y los personajes.
UN CONSEJO_ Ojo, esto es cinta de DVD. El gasto del cine es despilfarro...

No consigo recordar cómo llegué al cine a ver una película de la cual no sabía nada. Sin tener nada en contra del cine francés, esta vez hay que decir que esta película no tiene nada. Me parece que la historia de ciencia ficción esta cogida con pinzas, de manera que parece que, en cualquier momento, todo se desmorona. En ningún momento consigue sobrecogerte ni meterte en la trama, dado que apenas existe.
Aún no me queda claro para qué tipo de público se dirige la película, si bien los niños no lo pasarán mal al ver dinosaurios, momias, etc. pero es que sólo se queda ahí, en sacar algunas figuras que nada tienen que ver una con la otra y, a partir de allí, tratar de construir algo con muy poco éxito.
En fin, un misterio de película que te hace pensar si ese dinero se podría haber invertido mejor en otra cosa. A partir de hoy, no se ve ninguna película sin tener información, y bastante, sobre ella

Lo que aquí tenemos es claramente un Besson menor y algo fallido. Tal vez por que su humor, altamante franchute, es difícil de pillar aquí. O tal vez por el tono, un tanto esquizo y alocado. Sin ambargo, la cosa remonta el vuelo en los últimos minutos...

Comedia con mucho de género fantástico, bastante rara y original en su premisa narrativa, lo cual hace que la cinta nos mantenga entretenidos de principio a fin.

Además a favor hay que mencionar la muy buena factura estética de la cinta, la cual posee efectos especiales muy conseguidos por ser un filme parido fuera de las grandes productoras de Hollywood. (Es verdad que en algunos escasos pasajes estos trucajes visuales curiosamente bajan de nivel, pero en la gran mayoría de las secuencias los efectos son más que satisfactorios).

Otro punto positivo es el vibrante ritmo narrativo de la película, la cual no decae nunca en intensidad, ello hace que uno esté constantemente divertido mirando extravagancias cómicas durante todo el metraje.

Ya que mencionamos el humor del filme, hay que decir que el mismo quizás sea lo menos efectivo de la película. Pues si bien hay algunos momentos graciosos, puede decirse que es bastante tontón y facilón en la mayoría de los pasajes. Aún así no puede decirse que la cinta sea cargante en su jocosidad, porque es simpática al menos, pero tampoco es una obra maestra de la comedia, eso sin dudas.

También el maquillaje es un punto alto en el filme, todos los actores están verdaderamente irreconocibles detrás del make-up. Ello logra dar una apariencia muy sugerente al diseño estético de los personajes.

Como sabemos, esta cinta es una adaptación de un cómic de corte fantástico aventurero, en donde se combinan el subgénero de momias con el cine de aventuras estilo Indiana Jones.

Lo mejor: la belleza de la actriz Louise Bourgoin, la fotografía, los efectos especiales, el tratamiento de la imagen, la originalidad de la propuesta argumental.
Lo no tan logrado: el humor es irregular, la historia (a pesar de ser singular) es apenas efectista y resultona para sólo pretender ser mero un pasatiempo.

En esta ocasión, el propio Besson se coloca tras las cámaras para dirigir una adaptación de un cómic francés creado por el dibujante Tardí, que tiene como protagonista a Adéle Blan-Sec una joven que vive fantásticas (en todo el sentido de la palabra) aventuras en el París de principios de siglo. Una prácticamente desconocida Louise Bourgoin es la encargada de meterse en la piel de la heroina de Tardí, mientras que a su alrededor, Besson le fabrica un fastuoso escenerio en el que moverse a su antojo. No cabe duda que pese a la presencia de numerosos secundarios (Mathieu Amalric, Gilles Lellouche, Philippe Nahon, Nicolas Giraud) la estrella de la función es Bourgoin, la cual consigue un aprobado justitoya que quizás no sea ésta una película demasiado adecuada para juzgar sus dotes como actriz.

Técnicamente el film es irreprochable como no se puede esperar otra cosa de un largo que lleve la firma de Besson. Se observa un esfuerzo en acercarse estéticamente al cómic, al mismo tiempo que no rechaza mostrarnos un París casi irreal de finales de siglo XIX y principios del XX, al que se le añaden unos toques fantásticos. Tampoco se rehuye el mostrarnos unas buenas dosis de acción, a cargo de unos pasajes que tienen lugar en Egipto (y que tienen ciertas reminiscencias a la saga de Indiana Jones, las cuales, conociendo al realizador seguramente no serán casuales), y también de fantasía, con ciertos bichos prehistóricos sobrevolando la ciudad de París y alguna que otra momia que cobra vida. A nivel de efectos especiales y ambientanción pocos peros se le pueden poner a este film.

Otra cosa sería por un lado su extremado parecido en ocasiones al estilo creado por Jeunet en su "Amelie", con quien incluso su protagonista guarda un curioso (y posiblemente nada casual) parecido. O, por otro lado, hablar del tono cómico que destila por todo el metraje que en muchos momentos puede desconcertar al espectador sobre si lo que está viendo es un film fantástico, un film paródico o una mala mezcla de ambos, ya que hace que no consigamos meternos nunca en ese mundo creado por Besson que se nos antoja cada vez más artificial. Sólo hay una secuencia en la que consigue el tono adecuado y es cuando Adéle se propone sacar a un conocido de la cárcel.

El resto, no consigue trascender el extraordinario despliegue técnico, el cual resulta tan vacio como el modelo al que comenzó imitando al inicio de su carrera. Y es que, pese a que Besson ha conseguido crear y mantener un sello propio claramente identificable. Pero, lamentablemente, y pese a que el despligue de medios, a Besson se le sigue recordando por ser el autor de "Nikita" o "Leon: el profesional", películas que cada vez quedan más alejadas en su filmografía sin conseguir fabricar otro producto que les pueda hacer sombra.