Camelot

Bueno, la primera parte de la película (la cual dura casi tres horas) me ha parecido pasable, no han reparado en medios (aunque la ambientación, todo hay que decirlo, es un poco tipo "cuento de hadas Disney", todo monísimo y bastante blandito), y los números musicales no están mal (para alguien que no es fan del género) a pesar de la falta de voz de alguno y de que, a medida avanza el metraje, menos espectaculares y más intimistas se vuelven.
El problema es que en la segunda parte se obvia cualquier desarrollo de la historia que no sea el triángulo amoroso entre Arturo, Ginebra y Lanzarote, pasando por encima y/o eliminando personajes muy importantes (el hada Morgana, Perceval, los caballeros, que solo aparecen como una masa sin entidad propia, Merlín, que desaparece ya desde el principio y no se le vuelve a ver el pelo, etc). Esta última parte se hace pesada y larga, porque todo es volver al mismo lío amoroso de los tres protagonistas, sin tramas secundarias de ningún tipo salvo la traición de Mordred, tomada bastante por los pelos. Un film un poco confuso porque ni explora mínimamente el desarrollo del ciclo artúrico, ni acaba de centrarse desde el principio en lo que luego será su único interés (el adulterio de Ginebra); cada parte parece de una película distinta.
Desde luego, no se la recomiendo a los fans del ciclo artúrico, se llevarán un chasco porque no sale casi nada del tema; la desaparición de Merlín de la historia es como hacer "El señor de los anillos" sin que salga Gandalf.
Recomendable para los amantes del género musical con trama amorosa y ambientación de cuento de hadas naif con vestuario espectacular y kitsch.

Tiene algunas escenas interesantes y la música complementa la imagen genial. Además de eso, transmite todas las sensaciones posibles para acercarte a los personajes. Hay un cierto abuso de primeros planos, pero a parte de eso no sobra ni un segundo de metraje. La manera de musicalizar es más propia de la ópera que del musical, haciendo que se acerque más al estilo de película de época. Perfecta para ver si estás aburrido y con ganas de 3 horas de música.

Musical agradable con parches de interés, larga duración y bonitas ambientaciones. Esta es la rendición al cine del musical de Broadway por Lerner y Loewe con una extrema duración tratando sobre el Rey Arturo, Ginebra y Lancelot, siendo adaptado del libro de T. H. White ¨ The once and future king (El rey antiguo y futuro)¨. Una abrumadora adaptación, rotunda, pero demasiado larga, estropeada por una floja trama. El Rey Arturo (Richard Harris, que también canta, sin doblar) se siente abrumado por la tristeza en medio del campo de batalla y busca la ayuda de Merlín para descubrir la causa de su estado de ánimo. Merlín (Laurence Naismith) le dice que recuerde cómo años atrás ya estaba lleno de inquietudes, esperando la llegada de la extranjera Ginebra (Vanessa Redgrave), que iba a ser su reina. Consigue triunfos en el campo de batalla gracias a la creación de 'la orden de los caballeros de la mesa redonda'. La invitación del rey Arturo llega a oídos del caballero francés Lancelot du Lac (Franco Nero), quien en compañía de su escudero Dap (Pierre Olaf), se dirige a Camelot para proclamar su lealtad al rey. Por otra parte, un anciano con armadura oxidada en el bosque parece estar perdido, por lo que le ofrecen ayuda. El anciano se presenta como el Rey Pellinore (Lionel Jeffries). Pellinore le dice a Arthur que si no afronta la verdad, su Mesa Redonda estará condenada al fracaso. De repente, son interrumpidos por un joven pomposo llamado Mordred (David Hemmings). ¡La historia de amor más hermosa jamás vista!. ¡Revive las canciones!. ¡Revive el romance!. ¡Directo desde su asiento reservado de compromiso!. ¡Revive la música!. ¡Revive el drama!. ¡Revive la magia!.

Un mundo completamente nuevo de magnífico entretenimiento musical con emoción, duelos, aventuras, romance y muchas canciones. Versión cinematográfica del famoso musical de Broadway que supuso récord absoluto de duración en la cartelera del teatro. Alan Jay Lerner utilizó el guión de la película, en lugar de su versión teatral original, como base para la reposición de "Camelot" en Broadway en la década de 1980. El musical original de Broadway se estrenó en el Majestic Theatre de la ciudad de Nueva York el 3 de diciembre de 1960 y tuvo 873 funciones. Richard Burton, Julie Andrews, Robert Goulet y Roddy McDowall estaban en el elenco original a interpretar el film, pero por una razón u otra fueron desechados. Aquí también se puede disfrutar de una agradable postal de la historia mítica. El resultado es una película atractiva con muchos escenarios panorámicos, excelentes fotografías y un exuberante diseño de vestuario de John Truscott, todo lo cual es realmente muy agradable. La célebre leyenda del Rey Arturo, creada bajo todo tipo de detalles por un equipo técnico de la máxima profesionalidad: guión de Alan Jay basado en su propia obra, fotografía en Technicolor, dirección artística de Edward Carrere y música de Alfred Newman inspirada en la partitura. de Federico Loewe. La decisión de elegir actores que no sabían cantar para los papeles principales fue ampliamente criticada. Vanessa Redgrave y Franco Nero tienen bastante química como amantes ilícitos. Richard Harris es fuerte como el rey sincero y simpático que lucha por mantener unido su sueño, pero la dirección confusa y pesada socava el esfuerzo. A Richard Harris no le gustaba tener que usar peluca y sombra de ojos espesa como el Rey Arturo. También molestó a Jack L. Warner al insistir en cantar los números musicales en vivo, en lugar de sincronizar los labios. En años posteriores, Richard Harris compró los derechos de la versión teatral de "Camelot" por 1 millón de dólares, renovó el musical y lo llevó de gira, eso lo convirtió en un hombre muy rico. David Hemmings no cantó en absoluto en la película, a pesar de ser el único cantante capacitado del elenco. La armadura de los caballeros de la película fue traída a Hollywood desde España, donde se utilizó en El Cid (1961). Posteriormente fue alquilado a Walt Disney Pictures para La bruja novata (1971). En este film se utilizaron dos castillos medievales separados en Segovia, España. El Alcázar de Segovia, con sus tejados abuhardillados y numerosas torres que recuerdan al castillo de la Bella Durmiente de Disneylandia, fue utilizado como hogar de Sir Lancelot en la Galia (Francia). Las escenas de apertura y cierre también se filmaron en los terrenos del castillo. Para Camelot, el Castillo de Coca, también en Segovia, se utilizó en planos generales y de fondo para representar las torres y almenas del legendario reino de Arturo. Jack L. Warner inicialmente se negó a permitir que Joshua Logan filmara en Europa, exigiendo que toda la producción se filmara en el estudio. Warner pronto le dio luz verde a Logan después de que su departamento de contabilidad descubriera una laguna fiscal.


En Camelot (1967) destaca la impresionante cinematografía colorida en pantalla ancha de 70 mm de Richard H. Kline y el sonido estereofónico completo. Este musical de gran presupuesto fue presentado de manera muy hermosa y maravillosa por el cineasta Joshua Logan. Este artesano fue un buen director que realizó películas de éxito, generalmente dramáticas y musicales, incluyendo actores de renombre, como ¨Picnic¨, ¨Bus stop¨, ¨Sayonara¨, ¨South Pacific¨, ¨Fanny¨, ¨Ensign Pulver¨, ¨Paint your wagon¨ y este ¨Camelot¨. Calificación 6/10. Musical aceptable y pasable, pero ni notable, ni extraordinario, pero sí decente. La película atraerá a los fanáticos de Richard Harris, Redgrave y Nero.