Lo que la verdad esconde

A pesar de que los actores principales están ya consagrados no creo que sea suficiente para justificar el exito de esta película. Tiene momentos de suspense interesantes pero no convencen en su actuación.

Si no fuera por ti, Michelle, menudo tostón mil veces visto con la chica acosada y tal, pero resulta que eres tú la preciosa muchacha entre sofocos en ambiente de lujo con morbosa soledad, terrible soledad más bien, porque yo no puedo entender cómo es posible que ese ejecutivo con sonrisa falsa es capaz de dejarte sola deambulando con tu prodigiosa delgadez por semejante caserón y entonces se me ocurren mil y una manera de entretenerte, de acompañarte, bañarte y amarte, y mientras tanto sigo tus temores de cerca, esas venas que parecen estallar en torno al cuello, la piel casi translúcida, enterándote de cosas tremendas que no deberías saber... y así me voy dejando llevar por Lo que la verdad esconde, sufro contigo, te adoro, te deseo, te protejo y persigo a quienes te quieran hacer mal... Gracias por venir, Michelle, gracias por venir y convertir en buena historia la mil veces vista, contigo el asunto de chica perseguida y sufriente se convierte en una espléndida mujer que busca el amor a las puertas del infierno.

Un buen thriller, Robert Zemeckis exprimió hasta la última gota los thrillers que Hitchcock hizo medio siglo atrás, aunque con mejores resultados. Un entretenido thriller fantasmal con algún que otro susto incluido, y con un Harrison Ford debutando por vez primera en el rol de villano.

Buenas interpretaciones de Ford y Pfeiffer, aunque sigo pensando que Harrison Ford no era el idóneo para interpretar el papel de Norman Spencer. Jack Nicholson, Robert De Niro y Gene Hackman habrían sido mejores candidatos para el papel.

No veo a Harrison Ford muy metido en el papel de asesino de adolescentes (será porque toda su vida ha estado interpretando a héroes bonachones).

El ver a Harrison Ford y a Michelle Pfeiffer juntos en un thriller es una invitación a sentarse en la butaca y a degustar, seguro, de un buen film (y el director mejora, si cabe, esa intuición). En ese tipo de thillers suele suceder que todos los preparativos para llegar al desenlace final, son lo mejor del film, y sin embargo, la culminación puede llegar a fallar, por precipitación, por no saber como acabar, por exageración etcétera. Para mi gusto, este no es el caso: la gran media hora final eclipsa por completo toda la hora inicial, que resulta ser exageradamente lenta, y que es salvada porque fundamentalmente Michelle Pfeiffer se vale ella sola para eso y mucho más. Pero repito, además de la actuación de ésta, es la media hora final lo que da lustre a este film.

Porque como película de terror, "Lo que la verdad esconde" no vale nada. Ni miedo, ni susto, ni angustia, ni un pobre repullo, cosa que habrá decepcionado a algún espectador. Ahora bien, suspense sí que hay, quizás demasiado, lo que a la postre la salva. Buen planteamiento, un inicio algo torpe pero en seguida aparecen interrogantes que llaman nuestra atención. ¿Qué pasa con los vecinos?, ¿Qué sucedió hace un año?, ¿Qué ocurre en la casa? Diría que la trama es tan compleja que uno espera muchísimo más de lo que en el fondo es (SPOILER). Por este motivo se acaba viendo con desgana porque las expectativas se ven defraudadas. Además, hay cabos sueltos que no se aclaran.

Por lo demás, la pareja protagonista tiene tirón, por más que ella se luzca y la luzcan más que a él, que permanece en un segundo plano. Una estupenda Michelle Pfeiffer, guapa pese a tener más de 40 años, dando vida a Claire y Harrison Ford, casi con 60, a Norman. Un matrimonio normal y corriente pero sólo en apariencia. Ya se sabe, "Lo que la verdad esconde". Entretiene, pese a ser lenta y te permite jugar a detectives antes de que te revienten los globos sondas que te han soltado. Con un aire a lo Hitchcock pero más pesado, hay momentos que imitan a "La venta indiscreta", a "Psicosis" o a "Vértigo", pero a la que más se parece es a "Atracción Fatal". Aunque es muy diferente (SPOILER).