Cenicienta

Otra nueva película del mundo disney y es que parece ser que quieren sacar partido a todo su repertorio y la verdad es que tiene su lógica ya que cada película de acción real se hacen con unas recaudaciones de infarto. En este caso le ha tocado a Kenneth Branagh hacerse con el control de esta nueva adaptación, como director tiene un gran repertorio Hamlet es hasta la fecha su éxito más sonado y de esto hace ya casi 20 años, también tiene experiencia en el género y es que fue el encargado de la primera entrega de Thor y ahora le toca la Cenicienta un gran clásico de toda la vida.

La película arranca con una estética fabulosa y una ambientación fiel al cuento, todo parece muy bien montado y según van trascurriendo los minutos vemos a todos y cada uno de los personajes míticos hechos en carne y hueso. Todo resulta elegante, su parte técnica nos gusta mucho, su vestuario es genial, pero tiene algo que no nos hace conectar con ella. Según nos vamos acercando a su punto cumbre ya tenemos todos los roles de cada personaje, por un lado tenemos a inocente Lily que no termina de encajar en su personaje, se note un sobre esfuerzo por convencer y parece que tiene la necesidad imperiosa de trasmitir sus emociones pero sólamente logra resultar sobreactuada, con poco registro y tópica, todo lo contrario que a Cate Blanchett que hace de su personaje una de las madrastras mejor interpretadas hasta el momento, dotándola de una gran personalidad , continuamos con las insoportables hermanastras que es de lo peor que tiene la cinta, muy impertinentes, poco logradas en cuanto a sus personajes, llegando a resultar insultante para el espectador y por terminar tenemos al principe del cuál se puede decir que es otro tópico más que no se sale de la línea previamente marcada.En su tramo final la película se desinfla otro poco y aunque no termina de hundirse lo cierto es que resulta demasiado empalagosa.

El momento trasformación está bastante logrado, y ver a Helena siempre es un placer, cada vez más polifacética, Una vez dicho todo esto podemos decir que la película no logra sorprender , es bastante fiel al cuento y a todo lo que le rodea, pero le hubiera hecho falta, algo mas improvisación, algo más de oscuro y tenebroso, ya que esta versión está pensada para el disfrute de su público más joven, todo lo contrario que paso con Maléfica que estaba dirigida a abanico de espectador más amplio.

Como conclusión podemos decir que Cenicienta, logra entretener y maravillarnos en su parte técnica, merece la pena ver a Cate , pero que se queda coja en cuanto a originalidad, ya que resulta tópica y carece del guión adulto que muchos andábamos buscando.

Lo mejor: Tener a una Cate como madrastra
Lo peor: No arriesga nada.

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Por lo general soy muy critico de Disney. Su violencia, su aporofobia, su animalismo.
La búsqueda del "Principe azul" ¿a cuantas mujeres hizo daño?
Pero en este caso, debo señalar un notorio cambio.
La película cuenta con una excelente fotografía. Un vestuario y una escenografía realmente espectacular.
Muy buena banda sonora. Un guion que por algún momento cae, pero las excelentes actuaciones de Lily James y Cate Blanchett logran salvar esos problemas.
Buenos efectos especiales, quiero destacar lo bien logrados que están los zapatos de cristal.
Pero lo que mas me gusto de la película y de ahí el titulo de esta critica, es el mensaje positivo que da, sobre todo de solidaridad y buenos valores.

Si algo no teníamos claro cuando fuimos a ver “Cenicienta” es si Kenneth Branagh haría su propia adaptación de la “Cenicienta” de 1950 o si mantendría toda la idea original y nos encontraríamos sencillamente con una película de imagen real calco total de la de dibujos animados de Disney.

La primera noticia a daros es que ni lo uno, ni lo otro. Cierto que la esencia se mantiene. Tenemos animales parlantes, magia, hada madrina (una inusualmente de blanco Helena Bonham Carter…ex del director, ejem), encuentro fugaz con amor a primera vista, final feliz y madrastra malvada; pero Kenneth Branagh no sería él mismo si no hubiera metido de su cosecha lo necesario para hacer de la “Cenicienta” el éxito que está siendo ahora mismo. Y es que Disney siempre ha hecho películas para niños, y una adaptación de imagen real tiene que ofrecer algo también a los adultos. No se trata de cambiar a un superhéroe con películas ligeras como Batman y hacer remakes más oscuros, profundos y adultos; sino de hacer que tanto mayores como pequeños se enganchen a la película.

Este gran problema es difícil de solucionar. Sólo había que mirar alrededor en el cine para descubrir quién era el público objetivo de la peli (padres con hijos, chicas adolescentes, parejas – él obligado seguro – y parejas gays; todo cierto, os lo aseguro). Así que el resultado podía ser bastante cursi. Sobre todo, porque el director no quería cambiar la esencia de la protagonista del cuento, y Cenicienta a día de hoy tiene un rol que se considera “pasado de moda” (por no decir machista), y que hoy en día no funciona.

Kenneth Branagh lo soluciona con un toque magistral. Presenta la película desde el comienzo, no cuando ya la protagonista se llama Cenicienta (que en este film se llama Ella), sino desde que es un bebé hasta que es una mujer, mostrando diferentes momentos de su vida, ahondando en su carácter bueno y apacible, y en las enseñanzas que recibe de sus padres. Es precisamente la madre (Hayley Atwell) quién le transmite el precepto que ella promete conservar para siempre “Sé generosa y ten valor”, la cual le produce más problemas que beneficios, pero que explica el por qué Ella (Lily James) no abandona la casa de sus padres, ni da por perdidas a su madrastra (una soberbia Cate Blanchett) y a sus hermanastras Anastasia (Holliday Grainger) y Drizella (Sophie McShera). A día de hoy sería incomprensible tal apatía en una mujer hecha y derecha el estar aguantando lo que Ella aguanta.

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Fragmento extraído de www.generacionfriki.es

'Cenicienta' de Kenneth Branagh moderniza el clásico respetando la historia original, pero tomándose licencias a la hora de crear un nuevo relato con un tratamiendo diferente del argumento que tiene sus pros y sus contras.

De la factura técnica nada se puede decir, es irreprochable: una ambientación sorprendente, bellísima y tremendamente cuidada. La fotografía luce unos colores sobrenaturales que realzan esas formas de cuento, dejando encuadres que llenan el ojo. El vestuario juega un papel bastante importante, y cumple a las mil maravillas. Los efectos especiales brillan, sin abusar, dejando escenas memorables. Los actores están cómodos en sus papeles, Lily James preciosa como Cenicienta, Richard Madden cumple como príncipe de sonrisa reluciente, y mención especial para Cate Blanchett, guapísima y a la vez más fría que el acero. Además, tanto la dirección como el guion manejan bien una historia que podría haber pecado de dulzona, pero que camina a buen ritmo sin llegar a meter la pata (aunque creo que acaba extendiéndose un poco).

Y digo que se ha modernizado porque lo que más destaca es la quema de los antiguos personajes, simples maniquíes que actuaban siguiendo los rasgos más marcados de personajes de cuento (muy bueno, muy malo), para sustituirlos por personas de carne y hueso coherentes a su naturaleza.

Podemos ver el crecimiento de Ella, cómo su felicidad se marchita y cómo se convierte en una chica llena de dolor que trabaja mecánicamente por rutina, pero que todavía conserva un pequeño brillo de esperanza. Su némesis, la malvada madastra, ya no acaricia altiva a Lucifer desde su sillón; aunque conserva esa risa grave y oscura, aquí no es cruel ni siniestra. Es una frágil y asustada mujer que se ha ido endureciendo a base de desencantos, volviéndose egoísta, y que ya solo encuentra placer en lo banal aun a riesgo de pisar a cualquiera. La Hada Madrina aparece tremendamente modernizada en sus formas; pierde toda su candidez y dulzura de señora mayor bondadosa para dejar paso a Helena Boham Carter haciendo de ella misma. Y en el príncipe se encuentra el ajuste más grueso. Donde antes era un mimo asexuado con horchata en las venas que apenas era punto de unión con el final, ahora encontramos a un joven valiente, sensato y enamorado hasta las trancas que aparece muchísimo más en pantalla, ganándose sus partes narrativas y colocándose como uno de los personajes principales.

Resumiendo: los personajes son los engranajes de la película, han ganado fuerza y realismo a base de más metraje para su desarrollo y de un guion que cuida bien las líneas que lanza, pero esto ha ido, a mi juicio, en detrimento de los elementos de cuento. Las pocas canciones son solo un guiño, Gus Gus y sus amigos, antes inolvidables, ahora son un simple adorno y ni tan siquiera hablan, y el pobre perrito Bruno directamente ha sido eliminado.

Todo ello hace de esta nueva 'Cenicienta' una buena película, bonita a la vista, creíble en su universo, con grandes escenas puntuales y que en ocasiones llega a conmover en los momentos dramáticos. Pero ¿por qué, para mí, 'Cenicienta' no ha dado el Do de pecho? Porque su nuevo planteamiento más apto, al parecer, a nuestros tiempos, la ha vuelto un romance adolescente con tintes mágicos que no deja de recordame a títulos no muy bien valorados. Me habría gustado que esta nueva visión más modernizada la hubieran sabido conjugar mejor con esa parte "de cuento" que echo de menos para saber que 'Cenicienta' es algo diferente a un romance al uso.

Han tenido valor, desprende bondad, pero se han quedado cortos con la magia.

Que desengaño y que empacho!!!

Lo mio con los criticos profesionales es de juzgado de guardia,
¡las películas que adulan las aborrezco y las que destrozan me encantan!

Vaya aburrimiento de historia, sin una chispa de magia o emoción, los planos van pasando encantados de conocerse y la cursileria se apodera del metraje afectado al pie de la letra.

Cenicienta parece una campesina francesa encantada de que la humillen, el principe es mas soso que el caldo de un asilo, las hermanastras mejor lo dejamos y la madrastra (decepcionante Blanchett) tiene un ramalazo neo pijo con risotadas estridentes que desesperan.

LO PEOR: Metraje anodino, Personajes planos, la estética, el casting....
LO MEJOR: Helena Boham-Carter dando vida a la hada madrina (Único momento con algo de chispa) , El Vestuario y la B.S.O.

Los que espereis ver una MALÉFICA 2.0 Quedaos en casita.

Me quedo con la respuesta de una niña al padre al salir del cine:

-¿te ha gustado?
-esta no hace falta que me la compres papi