(500) días juntos

Se le canta al amor y al desamor de mil maneras distintas y parece que siempre hay una canción que, tarde o temprano, llega a nosotros reflejando fielmente lo que hemos vivido. Y en el cine también sucede.

"500 días juntos" es justamente la historia que puede sucedernos a cualquiera, o que ya nos ha sucedido. Porque estamos eufóricos cuando nos enamoramos pero la conclusión que siempre sacamos, por mucho que amemos a la otra persona, es que jamás terminamos de conocer a quien convive con nosotros aunque llevemos juntos una eternidad.

Confieso que me ha tenido atrapado de principio a fin, que me ha hecho esbozar una sonrisa en algunos momentos y comprobar que alguien se atreve a ponerle el cascabel al gato porque no todo es hermoso en una relación, sobre todo si uno ama más que el otro, porque lo que hoy es blanco puede ser gris mañana si alguien te mira o habla y sientes que algo se ha roto dentro de ti de forma inexplicable.

El ritmo adecuado, la dulce sencillez con que se expone la historia, la interpretación y algunas frases memorables del guión, junto a un magnífico narrador que, además de advertirte desde el principio a lo que te enfrentas, también hace reflexiones interesantes, sirven para que salgas del cine con una agradable sensación, con media sonrisa en el rostro y la cabeza dándote vueltas por lo que acabas de ver que, aunque no lo queramos reconocer, puede ser nuestra propia historia.

Creo que es, además, una película para verla más de una vez y que a cada pase descubriremos mayores y mejores cualidades. Posiblemente llegue a convertirse en un clásico con el tiempo y hay que estar atentos a su director, Marc Webb, que apunta excelentes maneras en su ópera prima.

Una última reflexión, aunque el verano sea la época donde más horas de sol tenemos, no hay que olvidar que el astro rey también brilla en el otoño...

La película está bien, se deja ver, tiene sus momentos cómicos divertidos, narrativamente es original, nos cuenta una historia bonita, pero... no deja de ser una sucesión interminable de videoclips. Oculta sus carencias con escenas intrascendentes que quedan resultonas gracias al buen uso de la música. Webb es un experimentado director de videoclips y eso se nota. No es tan buena como algunos dicen pero es mejor que casi todas las comedias románticas que se hacen actualmente.

356/13(15/11/09) Original y fresca comedia romántica, prometedora ópera prima del director Marc Webb, que da la vuelta a la clásica historia de amor, ya desde el principio te remarca la voz en off que no esperemos que acabe bien. El argumento es un ameno relato de los 500 días que Tom Hansen (Joseph Gordon-Levitt) hace que conoce a Summer (Zooey Deschannel), su amada, del cómo se enamora de ella, como empieza su relación y sus posteriores problemas, todo esto contado de adelante hacia atrás y de atrás hacia adelante, describiéndote, maravillosamente los sinsabores del amor. La cinta tiene en sus protagonistas su punto fuerte brotando entre ellos una química deliciosa, Gordon-Levitt encarna brillantemente a un voluble muchacho amante de la arquitectura pero encerrado en un aplasta-sueños trabajo que navega a la deriva en busca de su media naranja y Deschannel da vida a una extrovertida muchacha, que ama su libertad y que no pretende atarse a nada ni a nadie, estos caracteres chocan en una amarga historia de amor y desamor, en la que los amigos de él nos sirven para destaparnos sus pensamientos, destacando entre ellos una entrañable niña, Rachel Hansen, que actúa de psicóloga, interpretada por una fascinante Chloe Moretz, una extraordinaria roba planos, poseedora de una fotogenia salvaje, que consigue hacer sombra a su “paciente” Tom, si continua en el cine llegará lejos, veo en ella a la nueva Scarlett Johansson. Entre tanto desencanto alegra ver que la llegada del Otoño después del Verano da un halo de esperanza y que no todo está perdido. Recomendable a los que gusten de inusuales comedias románticas. Fuerza y honor!!!

Una película estupenda que refleja la realidad de la mayoría de las parejas de hoy en día cuando se acaba el amor... el director realizo un trabajo estupendo en esta película pues tiene puntos de comedia muy buenos además de escenas que dicen mucho y transmiten muy bien cada sentimiento en la película. Lo peor: un final romántico que no existe, lo mejor: la actriz y la banda sonora. No te la pierdas!!!!

Por fin me quité mis prejuicios y me puse a ver 500 Días Juntos. Pensaba que me iba a encontrar con la típica americanada de cine de verano, y cual es mi sorpresa al dar con una película mona, sin pretensiones y tremendamente divertida. He de admitir que me siguen haciendo gracia las historias de pagafantas que sueñan con el día de su boda y están deseosos de etiquetar su relación, mientras las mujeres les pegan una hostia tras otra.

“Tom Hansen […] creció creyendo que nunca sería feliz hasta el día en que conociera al amor de su vida. Esta creencia proviene de su temprana exposición al melancólico pop británico y a una mala interpretación de la película ‘El Graduado’”. Así presentan al personaje protagonista de la historia, un soñador empedernido que se enamora de la chica más independiente de Manhattan.
Aunque algunas escenas revuelven el estómago porque recuerdan a Quiéreme si te Atreves, la mayoría son muy graciosas: la hermana pequeña y sus consejos, el arte fecal del museo contemporáneo, el aplauso americano fallido, la burla al cine de profundis, etc.
No es un film original, ni demasiado inteligente, ni demasiado estúpido, ni muy dramático ni para partirse de risa. Pero es una de esas películas que te hacen disfrutar.