El amanecer del planeta de los simios

Increíble película superior a su antecesora en todos los sentidos: guión, personajes, técnicamente espectacular. Emocionante y emotiva, 2 horas poderosas de entretenimiento. Temas como la diplomacia, el liderazgo, la ley quedan plasmados en una historia reflexiva que pocos captaran. Una experiencia visceral. No dejar de verla.

Debo confesar que la primera entrega de ésta nueva saga no la he visto (aún, tardaré poco), así que estoy seguro de haberme perdido unos cuantos guiños a la misma a lo largo de ésta segunda entrega. Pero bueno, qué se le va a hacer.

La película arranca contándonos lo que supuso el fin de la civilización humana: un virus transmitido desde los monos que acabó con casi todo el mundo a la par que hacía a los simios mucho más inteligentes. En éste escenario seguiremos a un grupo de supervivientes que viven en las ruinas de una gran ciudad, grupo que debe internarse en el bosque cercano en la búsqueda de una presa con tal de ponerla en funcionamiento y volver a tener electricidad.

Pero en el bosque ya viven unos simios que, liderados por César, harán lo posible porque les dejen en paz. Pero tanto dentro de los humanos como de los simios hay quien cree que no se puede coexistir, lo que tarde o temprano llevará al enfrentamiento entre las dos razas.

En general nos encontramos ante una película de acción con el gran aliciente de lo bien hechos que están los simios, auténticos protagonistas de la película. Una película de acción con un buen ritmo narrativo que alterna las secuencias más rápidas y de adrenalina con otras de desarrollo de personajes, para que vayamos viendo la evolución de César y de su buen amigo Coba.

En la mezcla de los dos tipos de secuencia (acción y contemplativas) la película destaca sobre otros blockbuster vacíos de contenido que sólo intentan apabullarnos visualmente, sin ir más allá. Pues bien, ésta película consigue ir un poco más allá y nos presenta una buena película, con buen ritmo, efectos especiales y guion (sí, tiene fallos, pero es mejor que el del 90% de blockbusters).

Antes de acabar mi breve comentario me gustaría destacar dos elementos que sobresalen sobre el resto. El primero la música de Michael Giacchino, un auténtico genio que demuestra a cada partitura que compone que es de los más grandes de la industria. Y el segundo no es otro que la excelente recreación de los simios, unas recreación Cgi ayudadas por la captura de movimientos que nos dan algunos de los personajes “animados” más vivos desde el Golum del Señor de los Anillos.

Vale la pena verla? Sin duda.
Es imprescindible? A fecha de hoy creo que no, aunque no tardaré en verla otra vez (antecedida por su predecesora) y es posible que modifique algo el post. Porque en el momento de escribir esto acabo de verla, y aunque me ha gustado no ha llegado a provocarme el subidón que sí consiguen transmitirme otras películas de acción. No sé si el problema es mío o de la película, pero le falta ese algo intangible que de vez en cuando me parece encontrar en otras películas que las llevan al sobresaliente.

De todos modos, si tenéis un par de horas es una muy buena forma de emplearlas.

“El amanecer del planeta de los simios” da un importante y arriesgado salto temporal en la historia que iniciara “El origen del planeta de los simios” perseverando en el intento de poner un inicio a la mítica saga de Charlton Heston pero sin la red de seguridad que suponía una trama con James Franco y John Litgow que se había revelado exitosa. Sólo César y alguno de sus compañeros simios mantienen la conexión, pero han madurado en un mundo que ha cambiado con la humanidad al borde de la extinción.

De este modo, esta nueva entrega tiene un enfoque radicalmente distinto. Ya no es la historia cotidiana, casi intimista de un científico experimentando con un simio para salvar a su padre enfermo, que muestra cómo fue la primera chispa de inteligencia en los monos que desencadenaría los acontecimientos posteriores, sino que aquí los monos toman el foco de la historia y pasan a ser los auténticos protagonistas. “El amanecer del planeta de los simios” se centra en cómo los monos rebeldes fundan la que será su civilización, estableciendo sus propias normas de conducta, sus reglas de gobierno, primitivas al principio y más evolucionadas según avanza la cosa. También hacen frente a los problemas derivados de la inteligencia y las emociones (los celos, la ambición, el rencor, el deseo de venganza…) así como el vivir en sociedad (la lucha por el poder, por imponer los puntos de vista, mantener la disciplina, establecer jerarquías). Ah, claro, y a compartir ecosistema con una raza humana en declive, pero que, como suele pasar en la adversidad, saca toda la ruindad que lleva dentro.

Nuevamente, uno de los puntos fuertes está en su argumento, en que nos creemos lo que nos cuenta. Tenemos unos monos en pantalla hablando y sentando las bases de su sociedad (¡joder, que son monos!) y nos lo creemos porque tienen los comportamientos y las formas de ser uno esperaría de una cultura rudimentaria. Luego además los efectos digitales con los que se han creado a simios con rasgos humanoides funcionan bastante bien, no son nada que no hayamos visto antes, pero gran parte de la credibilidad de la película recae en que los bichos no resulten ridículos y lo consigue sobradamente. Su gestualidad y expresividad son muy buenas, sin pasarse ni quedarse corto. Lo mismo de antes: los monos que hablan no existen, pero si existieran serían seguramente como nos muestran.

La película se enfrenta al desafío de construir localizaciones con lo que podrían ser poblados primitivos en la que los monos primigenios establecen sus primeros asentamientos sin la ayuda del hombre y en mostrar los efectos de una extinción casi completa sobre una gran ciudad como es San Francisco. En ambos casos, sin alardes, sin derroche de presupuesto ni de efectos, con más imaginación y trabajo que otra cosa, “El amanecer del planeta de los simios” consigue lo que persigue: convencernos de que lo que cuenta es una de las posibles formas en que el argumento propuesto podría tener lugar.

No tenía yo claro si la interesante “El origen...” iba a ser un producto aislado o parte de un macroproyecto de largo plazo. Y si las posibles continuaciones iban a estar a la altura en fondo y forma. “El amanecer…” confirma las más optimistas de mis expectativas. Afronta el reto de consolidar la historia y lo hace de una manera convincente, tanto en el plano simio como en el plano humano, y, sobre todo, respetuosa con la franquicia de los años sesenta. Cuenta de manera convincente y entretenida cómo se pudo llegar a ese mundo que se encuentra Heston, sin invadir ni contradecir lo que sabemos de ese mundo.

Estamos ante una lamentable continuación del gran retorno que supuso "El origen del planeta de los simios" 2011. El problema de la cinta es un guión pueril escrito en una tarde con papel de retrete, una historia absolutamente previsible y una buena cantidad de fallos de rodaje.
El guión es vergonzoso, como suele pasar en estos "tiempos modernos" en las películas uno ya sabe lo que van a decir los actores, un guión muy pobre sin nada brillante, lleno de tópicos.
La historia y el suceder de los acontecimientos es totalmente predecible, ya sabes lo que va pasar en cada una de las escenas, por uno ya ha visto eso cien mil veces en cien mil cintas. Por otra parte la acción es aburrida.
Qué pena....

A estas alturas, a un servidor ya le importa un pito lo bien montado que esté uno de estos blockbusters made in Hollywood.

Porque yo ME ABURRO.

Los largos de gran escala que se nos envían se han olvidado de ser DIVERTIDOS.

Y no: no todo es importante ni relevante. TODO HA DE SER SERIO nowadays: Batman, Godzila, Suprman o mi tía Enriqueta. Por muy tonto, muy infantil que sea el material, esto ha de tratarse como si fuera "El padrino".

¿Y saben qué? A menudo, el material que se está manejando NO ES RELEVANTE.

Sobre todo, con el abusivo CGI, las escenas de acción desmedidas, las tramas descabelladas y los personajes no realistas que cada vez abundan más.

Lo siento si no empatizo con un simio de gran capacidad intelectiva hecho por mor de la avanzada tecnología CGI.

Francamente:no estoy interesado en que se trate este material (y muchos otros) con la ceñuda gravedad y las ansias de relevancia de un "War horse" cualquiera.

¿Realmente tiene algo interesante este film que decir sobre la supervivencia, la guerra, la familia o la ecología? Yo diría que no. Pero... eh: el espectador parece creérselo, así que sigamos con ello.

Pues yo me quiero bajar del tren. Aún recuerdo una era en la que Raimi adaptaba cómics con ligero tono. O a Spielberg llenando de humor las aventuras de Henry Jones y su padre. O haber visto en tv a un kryptoniano salvando el mundo con gran cantidad de humor de por medio.

Sin embargo, parece que los vientos de hoy en día soplan de oscuridad, depresión y oscuridad

Personalmente: ya está la vida demasiado seria y llena de sufrimiento para que hasta las cosas que en muchos casos deberían ser un vendaval de entretenimiento se tomen como si fuera material digno de Will Shakespeare.

Conmigo que no cuenten.