La hermandad

Puede parecer algo injusta la quema a la que se ve sometida esta película, con ese nefasto 2,5 de promedio, y en parte así es, puesto que pese a su precario formato televisivo bien que entretiene a lo largo de su escasa hora y veinte de duración, lo cual ya es un lance con el que no contaba. Incluso los diálogos parecen demasiado sofisticados para el tipo de película que es, hecho que sorprende. El terror generado aunque por momentos dé risa tiene su atractivo: la eterna tormenta nocturna, el malsano ambiente que rodea ese siniestro edificio cuya fachada amenizan esas grandes letras griegas filmadas de manera imponente, el acompañamiento musical que también ayuda, todo eso son buenas maneras de un director que en entregas posteriores confirmaría su predilección por filmar a chicos adolescentes en vez de a chicas, una rara avis que desconozco si tiene como empeño llegar a un mercado distinto o en cambio es otro carente de fines comerciales. De todas formas aunque no sea gran cosa, diría que este director logra sacar partido de la única integrante femenina, pues no sé si será cosa del doblaje logra transmitir una cierta sensación de sensualidad, cosa que me empuja si bien tampoco a ensalzar está obra, sí a no mancillar más su ya de por sí maltrecha nota.

Yo creo que esto debería ser una película de culto porque pienso que es de las que o amas u odias con toda tu alma, no hay término medio, o casi. A mí personalmente me pareció algo aburrida y no pasa mucha cosa pero al menos se puede ver. Yo me pensaba que era, como dicen en la Wikipedia, homoerótica, pero nanai de la China. Buscaba películas de terror LGTB —lesbianas, gays, trans y bisexuales— y me salió esto que tiene una escena un poco homo, que no erótica y torsos desnudos de hombres pero que no es nada homo. Si por lo menos hubiera visto algún polvete entre hombres pues se me hubiera hecho más llevadera pero nada, ni un beso.

Lo demás tampoco está tan mal lo que pasa es que como digo no pasa mucho. La historia es de un chico, bastante guapo él, que llega a la universidad y el líder de una fraternidad lo quiere reclutar para su casa de fraternidad. Creo que no cae demasiado en tópicos y que tampoco está tan mal para tener la nota que tiene, no es de las mejores pero comparar esto con, por ejemplo, «Hungerford» es de pena capital. Total, un suspenso alto, es decir un cuatro que es una película normalmente aburrida pero que se puede ver entera.

Lo que es seguro es que le voy a dar la oportunidad a la segunda parte a ver qué tal y si no está muy allá ya no veré más.

Estamos ante una película que revolucionó (para bien o para mal) el cine de Serie-B que hasta la fecha todos conocíamos.

La originalidad de este film reside basicamente en su simpleza, su argumento deja bastante claro por donde van a ir los tiros desde el primer momento lo que elimina cualquier capacidad de sorpresa que la trama pudiera deparar.

Actores y actrices desconocidos con una capacidad pasmosa para quedarse en ropa interior, escenas eróticas interpretadas sin ningún tipo de complejo y situaciones homoeróticas que nadie esperaba ver son los secretos del éxito de esta película que derivó en varias partes más y films similares.