A mi madre le gustan las mujeres

Simpática comedia en torno a lo enunciado en su título, es decir, tres hijas asisten atónicas a la revelación de que su madre se ha echado una novia. Con un típico desarrollo de amoríos y enredos, Inés París y Daniela Fejerman sacan lustre a un guión muy típico, pero llevado con un buen gusto impecable. Me he imaginado esta película remakeada al estilo Adam Sandler, con el catálogo de gags groseros que podría formular en torno a la situación y se me han desalineado todos los chakras del mal rollo que me entra.

Lo mejor es la buena química entre las actrices, a destacar la vena cómica de Leonor Watling, el oficio de Rosa María Sardá (siempre cumplidora) y a la sencillez y naturalidad de Eliska Sirova en el papel de la novia de la discordia. Nunca pensé que diría algo así pero aquí los floreros son los actores masculinos; tal y como lo son los hombres en una reunión cómplice de mujeres que de eso va la cosa.

La peli está realizada con mucha elegancia tanto en la forma como en el fondo y ofrece un rato tan divertido, agradable e intrascendente como una merienda de chicas rematada por un buen postre (de chocolate, por supuesto).

Divertida comedia que sin grandes pretensiones, consigue entretener y mantener el ritmo en todos sus noventa minutos de duración. Es muy importante destacar el buen trabajo de los actores donde sobresale una excelente Leonor Watling, que ensalza esta ligera comedia a cotas muy superiores, sus diálogos son sin duda la chispa de la película. Algo histriónica y acelerada, recuerda su elaborado papel al mejor Woody Allen. ¡Pena de premios que olvidaron a esta gran actriz en ese año!
Con estructura algo surrealista y bastante convencional (sobre todo al final), esta comedia tiene algo especial que la desmarca de la típica comedia costumbrista. Llámese guión o Leonor, solo me queda dar las gracias por hacerme pasar un buen rato viendo cine (riéndome con los personajes y no, de los personajes, como últimamente suele pasar).

Primer trabajo del tandem Paris & Fejerman, una comedia con tintes amargos. Cuenta con un reparto excepcional, encabezado por Rosa Mª Sardá, donde Leonor Watling nos muestra su vertiente más cómica, interpreta a la hija neurótica, sus reflexiones son muy graciosas y lo mejor del guión.

Una forma muy elegante de tratar un tema que a priori puede sonar frívolo, donde por encima de todo triunfa el amor.

Qué buen rato me ha hecho pasar esta película del tándem París-Fejerman. Es el primer trabajo que veo de estas dos interesantes directoras pero está claro que no será el último. Estoy totalmente de acuerdo con la mayoría de los usuarios que han comentado esta película, es ágil, fresca, con unos diálogos ingeniosos, se nota que son féminas las que dirigen el cotarro y que conocen bastante bien las neuras que nos entran de vez en cuando a las mujeres (me siento algo identificada con Elvira, el personaje de Leonor Watling). Aún así debo destacar algunos puntos que, bajo mi humilde opinión, afectan negativamente a la película, entre ellos el tramo final, ese giro que da la historia a partir de ese viaje a la preciosa Praga es el comienzo del desenlace de la cinta, un final que parece más bien hecho en Hollywood, complaciente, edulcorado y que rompe con toda la realidad que imprimía todo el metraje anterior. No me ha gustado nada, es una lástima porque para mí casi hunde todo lo anteriormente logrado por unos personajes que se me habían hecho muy cercanos y creíbles. Otro punto negativo es el poco desarrollo que las directoras dan a las otras dos hermanas, desaprovechando totalmente a dos actrices tan válidas como son María Pujalte y Silvia Abascal. El tercer punto negativo sería el escaso desarrollo de los personajes masculinos, totalmente secundarios. Aún así, la película sigue teniendo muchos puntos a favor, siendo el principal ese conjunto de actrices que están estupendas. Destaco, sobre todo, a una Leonor Watling que lleva prácticamente todo el peso de la cinta. Esta actriz siempre me ha provocado pereza, nunca me había animado a ver ningún trabajo suyo porque se me aparecía como una actriz apática y sosa. Tengo que reconocer que, tras ver la película, he cambiado de opinión respecto a ella, no he tenido más remedio, ya que su talento cómico ha sido una agradable sorpresa y la actriz se come la pantalla cada vez que aparece en escena, creando un personaje, Elvira, encantador y divertido. A María Pujalte la descubrí en "Entre rojas" y me parece una competente actriz, algo desaprovechada, y que carga aquí con el personaje femenino menos desarrollado. A Silvia Abascal le tengo simpatía desde que apareciera en la serie "Pepa y Pepe", tiene una frescura innegable a la hora de actuar y parece que llevara toda la vida cantando, su secuencia en el concierto con su banda es tronchante. Rosa María Sardá es una señora que me cae especialmente mal, pero reconozco que es una gran actriz. Aquí está francamente bien. La desconocida checa, Eliska Sirova, es todo dulzura. Por su parte, los chicos de la peli hacen lo que pueden con sus pobres personajes. El gran Xabier Elorriaga cumple en su papel de padre de familia, con su innegable presencia, el atractivo Chisco Amado está bastante correcto.

Esta primera película del duo femenino de directoras es, además de ocurrente, simpática.
Las interpretaciones, sobre todo la de Leonor Watling, son muy acertadas. La historia de amor ¿extraño? que se da en la madre de las tres hijas esta narrada con gran sensibilidad y realismo. Los personajes secundarios no están mal aunque un poco desaprovechados.