El florido pensil

Quíen lea el libro se encontrará con un relajo tierno, jocoso y humoristico que describe lo absurda que era la educación en los años del franquismo, es un libro recomendable. Quien ha visto la obra de teatro del mismo titulo, que representa una compañía de Euskadi, (que me perdonen pero no recuerdo el nombre de este elenco de actorazos), no habrán parado de reir, la obra de teatro es genial.
Pero quien padeció la pelicula...que es malisima en todos los aspectos y muy aburrida, si tuvo la suerte de llegar antes al libro o al teatro sabrá lo que es "El florido pensil", de lo contrario, nunca querrá saber nada más de nada que aparezca con este título.
En conclusión, podrían no haber hecho la película, hubiera sido mejor.

Es una película que, pudiendo decir mucho, no dice nada. Desde el profesor hasta el cura (malísimo wyoming), pasando por os insulsos nenes; no hay chispa ni buen hacer.

El guión no aborda ningún tema de interés en profundidad, conformándose con relatar la vida rutinaria desde el punto de vista de unos niños de un pueblo castellano. Solo puede atisbarse una pequeña evolución en la personalidad del profesor que, en cualquier caso, resulta poco creíble por lo brusca y poco abordada.

En fin, una película que puede entretener únicamente si se visiona como un capítulo largo de Cuéntame que pasó.

Sobre la historia que se narra en esta película el director nos da unas pistas bastante exactas de en que año transcurre la misma y estas nos sitúan en el año 1956, justamente cuando comenzaron a emitirse los primeros programas de la recién nacida Televisión Española; resulta curioso que al parecer casi nadie se haya dado cuenta de este detalle.

Que los métodos de enseñanza para alumnos de primaria fueran tal como se describen en esta película ya es algo más cuestionable porque no se puede generalizar, ya que los tiempos de la dura represión franquista iban quedando atrás y los maestros tenían algo más de libertad para educar a sus alumnos de la que tuvieron diez años atrás, en plena represión aunque eso sí, siempre respetando las consignas marcadas por el gobierno y todo dependería ya del docente que les hubiera tocado, el cual no tendría porqué ser necesariamente tan estereotipado como lo son el maestro y el clérigo que se nos muestran en esta película.

Yo mismamente estaba escolarizado en la enseñanza pública y recuerdo que al finalizar el día de clase, todos los alumnos estábamos obligados a cantar el Cara al Sol y el himno de España que en aquél entonces sí que tenía su letra correspondiemte pero aparte de eso no recuerdo que tuviéramos ningún tipo de adoctrinamiento salvo lo que se nos mostraba en la famosa Enciclopedia Álvarez de la cual creo que había dos ediciones, una la destinada a la enseñanza primaria y otra bastante más extensa probablemente para la secundaria.

Hay algo que me llamó mucho la atención en esta película y es la aparición de unos organizadores de excursiones para visitar el Valle de Los Caídos ataviados muy grotescamente con unos uniformes falangistas azules con las boinas rojas con su yugo y flechas cuando yo que viví en esta época y sería algo más joven que los muchachos protagonistas de esta historia, jamás llegué a ver a nadie con este atuendo. Ni siquiera cuando Franco hizo una visita pública a mi ciudad allá por 1964 o 65. Es más, me parece que la Falange y J.O.N.S. ya no existía más que como una fuerza política más bien simbólica y no muy representativa.

Como he leído más arriba a alguien, estoy de acuerdo en que si no se hubiera hecho nunca esta película quizá hubiera sido mejor porque si se le quita el probable interés histórico que pueda tener y algunas pocas travesuras curiosas de sus muchahos protagonistas que puedan ser graciosas y la aparición de Francis Lorenzo y Jorge Sanz como Roberto Alcázar y Pedrín, casi nada más tiene para ofrecer.

Es tan solo una película que refleja la época franquista, principalmente correspondiente a la década de los 40 y 50, desde el punto de vista de los niños de aquella época ( los que ahora son nuestros padres e incluso abuelos ). Vemos todo tal como era en esos tiempos: los tebeos, los castigos, los campamentos, la sociedad en sí, la radio, la filosofía, la religión,...Es una película interesante para verla como estudio de la historia de España.

Eso sí, tira demasiado a documental y parece más un episodio de "Cuéntame como pasó" que una película. Entre los niños es divertido ver a muchos tipos de niños: el que era un hacha en los estudios, el normal, el tímido, el gordito torpón,...Puede llegar a aburrir bastante y como el sillón sea muy cómodo, llegar a dormirte. Aún siguen existiendo personajes como Don Julián o el pequeño Briones, tambien sirve para ver un poco como somos nosotros mismos. Todavía hay gente ( ancianos, eso sí ) que mantiene la filosofía franquista y van diciendo por ahí "con Franco esto no pasaba". Para los padres puede servirles como recuerdo. A mi me encantó sobretodo cuando salieron los niños hablando de los tebeos y salían los cómics de Roberto Alcázar y Pedrín, el TBO de siempre, Pulgarcito, Hazañas Bélicas,...Yo, que soy un comiquero y principalmente forofo del cómic europeo y del español ( dentro del europeo ), fue una alegría para mis ojos.

No he leído el libro en el que está basada, así que esta crítica es de la película en general sin contar que es una adaptación. Los niños no han estado mal en sus papeles, hasta Wyoming ha estado bien, haciendonos ver como eran los curas ( si supieran como eran las monjas de mi madre... ).

En resumen, un relato en donde podemos ver como era la sociedad española en los años 50 vista por unos simpáticos niños que son compañeros de clase, de una clase al estilo de las de Zipi y Zape con Don Minervo ( divididas por sexo, evidentemente ). Como interés cultural y a quien le guste la historia, perfecta. Quien se duerma en las clases de historias de su profesor/a y odie los documentales, por favor que no la vea que se va a quedar dormido y que se vaya a ver Gran Hermano que seguro que le entretiene más. Con todo, le pongo un 6'5. Podría haber estado mejor, caramba. No ha impresionado a nadie, hacerla más amena y que aprendamos divirtiéndonos y disfrutando con ella, no durmiéndonos.

Antes de nada, me sorprende comprobar que esta película que obtiene un suspenso categórico con un pobre 4,6 de media, tenga el 5 y el 6 como las votaciones más recibidas. Una vez hecha esta curiosa observación, he de decir que he encontrado una decepción dónde no la esperaba hallar, pues la unión de temas tan jugosos como lo son, o mejor dicho, pueden llegar a ser, el franquismo, la enseñanza y la sociedad, me la esperaba mucho más candente. El referente dentro de este ámbito es para mí la excelente sorpresa "Un Franco, catorce pesetas" (2006), y me sorprende mucho lo lejos que se queda esta de ella en todos los aspectos. (...) Lo único bueno, junto a una vaga representación del panorama general de la época, es la impecable actuación de Fernando Guillén Cuervo, que en paz descanse, qué gran actor nos ha dejado. Encarna con sumo acierto al profesor franquista, introdujendo incluso matices humorísticos dentro de una interpretación elocuente y profunda, a pesar de tratarse su personaje de casi un secundario. Por lo demás, se trata de una monótona narración de acontecimientos sin fuelle alguno, ni visión periférica tras la cámara, ni ideas sustanciales adonde poder llevar el rumbo del largometraje. Presenta poca originalidad a la hora de gestionar la línea argumental, la cual procura mantenerse inalterable en todo momento, siempre fiel a la deslúcida historia de los muchachos protagonistas. Tildarla de rutinaria sería incluso excederse. En resumen, una crónica plana sin demasiada emoción, aunque bien es verdad, que con algunos detalles logrados, y que se puede ver, pero yo me esperaba una cosa mucho mejor.