El peque se va de marcha

Allá por finales del año 1994, el estado creyó conveniente que un servidor se vistiera de verde y aprendiese a decir "sí, señor". No me hacía mucha gracia estar de chacha de los coroneles; pero o aquello de la objeción no estaba muy desarrollado entonces, o yo estaba empajillado y no me informé demasiado sobre el asunto. La cuestión es que me metieron en un avión destino Lanzarote y me regalaron 9 meses de sudor, jaqueca, agujetas, y servidumbre. Y todo ello por la increíble cifra de 11.000 pesetas al mes (y por que estaba fuera de la península, que si no, ni eso). Un sueldazo; Igualito que el que da de por vida Nescafé, vamos.

Suprimiendo todas mis mierdas personales, por no alargarme, me centro en esas largas tardes de fin de semana en las que solía estar arrestado (bastante común en mí sin llegar a ser nunca un golfo). Allí la única diversión que teníamos era; o dar la braza a los cocineros para que nos pasasen las tortillas de patatas carbonizadas desechables a las 6 de la tarde, o ver tele. 24 horas de tele. Recuerdo que había en mi barracón (2ª CÍA) un viejo VHS al que le sacábamos un provecho infinito. En la videoteca del cuartel (daba risa) solo había viejas cintas sobre el ejército (nunca la usamos), toda la colección de los dibujos de Tintín (había un compañero que por cojones se le había metido en la cabeza mangarlas y llevárselas el día de la licenciatura; cosa incomprensible porque no le gustaba) y mucho cine de la tribu esta de Manolo Escobar y Carmen Sevilla, grabadas años antes de la primera cadena por un antiguo reemplazo de soldados que sin duda alguna no andaban bien de la cabeza. Así que nosotros pudimos conseguir, tres películas algo más aceptables, que la machacamos una y otra vez; La primera y más exitosa fue "Speed"; no miento si os digo que me se de memoria cada frase de la peli. La segunda "Le llaman Bodhi"; el por culo que dieron los soldados surferos con esta, también es digno de mencionar. Y la tercera fue "El peque se va de marcha".

A mí esta última en particular me gustó bastante. En el 1995, que fue el grueso de mi estancia en el acuartelamiento de Arrecife de Lanzarote, la película de Patrick Read Johnson consiguió sacarme sonrisas a raudales durante múltiples fines de semana, con lo cuál no puedo más que darle mi aprobado con buena nota hoy.

Háganme caso; subid la media de nota de esta pequeña maravilla.

Muy divertida película interpretada por un simpático bebé y un siempre magnífico Joe Mantegna, uno de los mejores actores de Hollywood, por desgracia muy desaprovechado. La película tiene una premisa parecida a Solo en casa, de Macauley Culkin, pero con la diferencia que aquí, el bebe es mucho más divertido que Culkin. No hay que perderse la "innata inteligencia" del bebé para librarse de los malos de turno. Una pequeña delicia. Una de esas películas injustamente infravaloradas y que es mucho más divertida que la mayoria de comedias actuales.

Hay pelis que quizás sean de baja calidad, como esta, pero, sin duda, tienen un valor sentimental supremo al tratarse de la leche televisiva que hemos amamantado todos los de mi generación.

El peque, tras ser raptado por sus "malvados" secuestradores, recorre NewYork a través de los lugares conocidos en un libro infantil que le leía su mami. Este original motor de combustion nos lleva a mil situaciones cómicas en las que los pobres malos sufrirán tal "malos de solo en casa".

Peque, cuidado con las drogas amigo mío!

Un entretenimiento sano y divertido, tanto para niños como grandes.

Una peculiar película, muy entretenida destinado a toda la familia. El trío de malhechores es bastante cómico, además están acompañados por un buen guión que se parece a una historia de cuentos destinada a los más pequeños, bien narrado y en el que uno puede seguir la historia con suma simpleza.

En resumen, con este film se pasa un rato agradable y divertido además de ser muy cómico, pero se olvida al poco tiempo.

Esta es, a mi gusto, la comedia blanca por excelencia. Con una historia tierna, sencilla pero a la vez fantasiosa, graciosa hasta ser desopilante, De apariencia totalmente sencilla, aunque cuando lo piensas probablemente haya sido una película muy difícil de realizar, debido a la obvia razón de que el protagonista principal es un bebé de pocos meses.

La historia va dirigida al público familiar (tirando a infantil): Una reciente familia burguesa, formada por un padre adicto al trabajo y una madre muy bella, pero casi desnaturalizada, que prefiere dejar todo el cuidado de su bebé Bink a una joven y tierna niñera mucho más cálida que ella, que suele contarle un mismo cuento ("Baby's Day Out") que apasiona al niño. Por otro lado, un grupo de tres delincuentes (liderados por un genial Joe Mantegna) urden un astuto plan para secuestrar al bebé y pedir un rescate millonario. Eventualmente lo consiguen, sin saber que la inteligencia del niño, sumada al amor que tiene por ese cuento infantil, conseguirá no sólo que Baby Bink escape por su cuenta, y atraviese toda la ciudad dejando en ridículo a sus tres perseguidores una y otra vez.

Está pensada para ser una historia familiar, sana, entretenida, con risas, con carisma, con ternura y con una moraleja. Y todas esas premisas las cumple muy bien, remarcando la parte de las risas y el carisma en los momentos donde, más que el bebé, el protagonista es Joe Mantegna, quien a fuerza de gags se roba poco a poco el protagonismo, hasta ganarse totalmente al público. (Dato extra: Joe Mantegna es parte del elenco estable de The Simpsons, es la voz fija de Tony Grasson / Tony el Gordo).

Si quieres una historia tierna, divertida y fantástica, esta película te va a encantar. Si eres de los que no perdonan ninguna inverosimilitud en absoluto, te recomiendo que le eches un vistazo a mis libros de lógica.