Love's Kitchen

Una Claire Forlani que dan ganas de meter en salsa de oporto y comérsela poco a poco (lo siento, pero me encanta esa preciosidad de actriz, jódete, Angelina, tú no me pones. Tu marido sí...eso ha sonado muy gay... en fin). Una comedia romántica a la inglesa. No se parece a las americanas que tan poco me van. La nota que le pongo esta por encima de la que pretendía ponerle al ver la portada y el título. Los argumentos son bastante más realistas que la mayoría de romanticoides comedias mediocres, y lo digo yo, que no me motivan demasiado y no les pongo una nota demasiado excelsa...
Vale la pena verla, es entretenida, tiene unos planos simples pero claros, no tiene pretensiones (lo que es muy importante ya que hablamos de una película hecha para entretener, no para que se hablen en los anales de la historia del cine de ella), sencilla y dulce con un par de tragos amargos que pasan rápido. Menos comercial que cualquier bodrio vomitivo de JLo me ha dejado buen sabor de boca.

Otra de las películas de ese subgenero que es la comedia romantica ambientada entre fogones (a bote pronto se me ocurren varias practicamente iguales). Los ingredientes no son gran cosa, la Forlani está tan apetecible visualmente como insípida en el terreno artístico y su contraparte no es un ingrediente digno de la alta cocina.

El cocinero no supería los primeros castings del masterchef junior y la presencia del Ramsey que debía ser la guinda del pastel no termina de ser más que un pegote en un souffle que no despega.

Demostración de que el cine inglés puede ser tan malo como el español si se lo propone.

Ambientado en un restaurante que pasa de cero a todo por cosas del azar. La química entre sus protagonistas es nula y todo suena a falso en una peli que repite esquemas ya trillados que han supuesto un mayor o menor éxito en los últimos años.
Lo mejor: Es corta y no se hace pesada en exceso.
Lo peor: Claire Forlani haciendo cucamonas.
Nada del otro mundo, no.

El argumento no sorprende a nadie. El propio título es una paráfrasis del de la serie dirigida y protagonizada por el chef y crítico gastronómico Gordon Ramsay, quien aparece en un cameo interpretándose a sí mismo. Está claro desde el principio qué es lo que se va a ver y es precismente lo que se ve.Todo dentro de los estándares del subgénero de cine gastronómico, puesto de moda últimamente (obsesos de la cocina "de autor", estrellas Michelín y demás). Las derivaciones familiares no pasan de lo puramente anecdótico y sólo sirven de puro relleno. Hasta la protagonista parece un clónico de Angelina Jolie mal copiado. Personalmente, no voy a comer a restaurantes de la famosa supuesta guía de referencia que tengan más de una estrella. Me creo más las criticas de los gourmets que escriben en las páginas de viajes sin sospechas de esnobismo.