Perejil

La masacre del perejil fue un evento perpetrado en octubre de 1937 por el ejército dominicano por orden del dictador Rafael Trujillo, tenía como objetivo realizar una limpieza étnica de haitianos en el país, principalmente en la zona fronteriza de la provincia de Dajabón y el río del mismo nombre que sirve como límite entre ambas naciones.

La excusa del “Jefe” era típica de las personas que motivan este tipo de genocidios: una supuesta búsqueda por “blanquear” la población o por el temor infundado de que esta población le quitaba empleo a los dominicanos, claramente esto no era así y en dicha zona limítrofe, ciudadanos de ambas naciones convivían sin ningún problema.

La masacre fue bautizada de esta forma debido a la diferenciación fonética que tienen los francófonos de la letra “r”, por tanto, cuando los soldados tenían dudas de si una persona era dominicana o haitiana, les pedían decir la palabra “perejil”, lo que se convirtió en la sentencia de muerte para miles de personas.

La película se desarrolla a lo largo de un día y una noche que pareciera interminable para su protagonista, Marie (Cyndie Lundy) es una joven haitiana embarazada que vive en esta zona fronteriza, su pareja es Frank (Ramón Candelario), un peón agrícola dominicano que labora bajo las órdenes de su patrón en dichas tierras.

El filme inicia con el entierro de la madre de Marie, para continuar con la cotidianidad de las familias de la zona, que se ven interrumpidas cuando cae la noche, momento en el que el ejercito comienza la masacre mencionada previamente, sin piedad avanzan aldea por aldea arrasando todo a su paso.

Queman chozas, asesinan sin piedad a haitianos e incluso dominicanos que se interponen (recordar que muchos formaron parejas o eran amistades, vecinos), golpean y violan mujeres, la barbarie se apodera la película y se extiende buena parte del metraje, Cabral muestra con lujo de detalle esta terrible situación.

La película se centra en como Marie debe hacer frente a la situación, primero buscando a su pareja y segundo tratar de sobrevivir a la noche, llegar al río Dajabón y cruzarlo para llegar a territorio haitiano, como si los problemas no fueran suficientes, comienza a tener las contracciones que anuncian la llegada de su hijo, no hay piedad para nadie y tampoco para ella.

Perejil es una gran producción dominicana, muy bien realizada e interpretada, aborda un tema fuerte sin contemplación, quizá un poco excesiva en algunos tramos, pero eso no quita la validez al mostrar los eventos como fueron. Un gran trabajo.