Haz click aquí para copiar la URL

Beefcake

Beefcake
1998 Canadá
Documental
6,2
35
Documental Se centra en las revistas de musculación y fitness masculino de los años 50, que se suponía eran revistas centradas únicamente en la salud... (FILMAFFINITY)
Críticas 2
Críticas ordenadas por utilidad
31 de agosto de 2011
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es una mezcla de documental con parte de trama que intenta exponer la situación de los fotógrafos y modelos que se dedicaban a las revistas de musculación siguiendo la vida de Bob Mizar que en los años 50 se hizo famoso por las fotografías que captaba en su casa estudio. No hay un guión sólido en la parte que recrea la vida de este fotógrafo, su madre y sus relaciones con los modelos, pero en la película aparecen una gran cantidad de actores-modelos que con sus taparrabos, como les hacían salir en las revistas, y las fotografías y películas en blanco y negro hacen interesante esta película. La presencia de mitos eróticos y fotógrafos de ese tiempo aportando sus recuerdos refuerzan el aspecto documental de esta cinta. Quizás cansa el atiborramiento de fotos y su pase muy rápido por la pantalla, aunque eso, con los sistemas actuales de proyección en monitor o televisor, no es problema porque puedes parar en cualquier momento para observar con detalle cualquier fotografía, algunas de ella con un alto sentido artístico y otras con sentido erótico y la mayoría como muestra de cuerpos musculosos que es de lo que se trataba en principio.
Del Mar
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
21 de junio de 2020
Sé el primero en valorar esta crítica
Terminando de ver “Beefcake” (1998) de Thom Fitzgerald con Daniel MacIvor, Joshua Peace, Jack Griffin Mazeika, Carroll Godsman, Jonathan Torrens, Thomas Wayne Harris, Jaime Robertson, Dick Sircom, Orest Ulan, Glen Deveau, Andrew Miller, Marla McLean, Daniel McLaren, Bernard Robichaud, entre otros.
Documental y drama de temática gay, mezclado con eventos ficticios, e inspirado por un libro ilustrado de F. Valentine Hooven III, publicado por Taschen, una editorial de libros de arte fundada en 1980 por Benedikt Taschen en Colonia, Alemania.
La acción inicia durante los años de la posguerra, donde las leyes de censura de EEUU permitieron que solo las mujeres aparecieran en varios estados de desnudez en lo que se denominó “fotografías artísticas”; por lo que se creó “Athletic Model Guild” (AMG), dedicada a la producción y distribución de material fotográfico y cortometrajes, cuyo principal y único objetivo fue la divulgación de imágenes del cuerpo masculino, en especial del desnudo masculino, siendo fundada por el pionero de la pornografía gay, Bob Mizer en diciembre de 1945, y comenzó tomando fotos de hombres que conocía, que posaban para ilustrar consejos de acondicionamiento físico y similares, pero también se veían como material homoerótico; así, la fórmula utilizada consistía en mostrar jóvenes fornidos, haciendo poses de culturismo, luchando o representando escenas improvisadas.
Sin embargo, Mizer compareció ante un Tribunal para enfrentar varios cargos a lo largo de los años, incluida la obscenidad, el uso de drogas y la prostitución.
Y es que supuestamente, algunos los modelos AMG eran menores de edad, y a veces ganaban dinero extra alquilándose como homosexuales para estafadores, a lo que Mizer argumentó enérgicamente, que no era asunto suyo lo que hacían en su tiempo libre...
A pesar de algunos reveses legales, AMG sobrevivió a sus muchos juicios, y el material vendido en forma de impresiones fotográficas, revistas y cortometrajes, evolucionó lentamente con el tiempo, desde imágenes alteradas donde los genitales masculinos estaban pintados o cubiertos, hasta finalmente, como lo permitieron las leyes cambiantes, a la desnudez total.
Para ello, Mizer utilizó su revista trimestral, “Physique Pictorial”, que presentaba a otros artistas como Tom Of Finland como medio de publicidad de su material.
De hecho, varios culturistas y actores de la época, comenzaron a posar para Mizer y sus amigos en AMG, y se estima que fotografió a más de 10,000 hombres, como al protegido de Andy Warhol, Joe Dallesandro, Ed Fury y Glenn Corbett, hasta Susan Hayward, Alan Ladd y Arnold Schwarzenegger.
Como producción audiovisual, “Beefcake” es un homenaje a las revistas de músculos de las décadas de 1940, 1950 y 1960, en una extraña y colorida mezcla de entrevistas, dramatizaciones, recreaciones y traviesos “hanky-panky” homoeróticos que recrean la historia profesional de Bob Mizer; por lo que se incluyen clips de las películas reales de Mizer; pero la desnudez en la película, que es mucha, transmite una sensación de inocencia y frescura, en comparación de las escenas dramáticas de baja calidad.
En el fondo, la película analiza el gusto de los aficionados de la salud y el “fitness”, que llegó a tener mucho auge en hombres homosexuales, creando una industria clandestina de prostitución masculina.
Queda latente, por increíble que parezca, que la mayoría de los chicos de Mizer desconocían lo que había detrás de sus fotos, esa ingenuidad en tiempos donde el alcohol y las drogas era lo que se veía, no es muy convincente, y deja en duda si todos llevaban una doble vida… lo que sí es triste es saber que muchos de esos modelos que aparecieron en esas producciones en el apogeo de su belleza física, unos murieron, otros cayeron en el olvido o viven en la absoluta confidencialidad, pues Mizer fotografió a muchos siendo menores de edad; otros siguieron sus pasos como productores, otros actores o modelos.
Tampoco nos queda una idea clara de si Mizer estaba realmente interesado en la belleza masculina como una forma de arte, o si su único interés era la naturaleza pornográfica de las impresiones; aunque los 2 campos de pensamiento no son excluyentes; lo que sí se puede achacar, es que “Beefcake” no es un documental riguroso de Mizer, y la parte dramatizada es muy “camp” para retratar su vida, se ve de muy escaso presupuesto, pero hay que ver que precisamente así fue, todo de muy baja calidad.
Del trabajo de Mizer, irónicamente ahora están en manos de instituciones educativas y culturales de todo el mundo, y se pueden encontrar en varios libros, galerías y colecciones de arte privadas.
Y es que Bob Mizer produjo más de 3.000 títulos de películas desde principios de los años 50 hasta principios de los 80, cuando usó la tecnología del VHS, y grabó más de 7.500 horas de sus sesiones de fotos hasta su muerte en 1992.
Así, desde 2004, tanto la compañía y sus archivos fueron vendidos al fotógrafo Dennis Bel, por lo que AMG continúa operando como La Fundación Bob Mizer, todo ese material heredado que alguna vez se temió perdido en el tiempo, hoy está organizando y remasterizando digitalmente; y como Mizer no incluyó avisos de derechos de autor en los números publicados entre 1951 y finales de la década de 1970, probablemente porque los contenidos habrían sido considerados “obscenos” por La Oficina de Derechos de Autor de EEUU, ingresaron inmediatamente al dominio público cuando se publicaron.
“Pastel de Carne”
RECOMENDADA.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/
Alvaro Zamora Cubillo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow