Ángeles y demonios 2

Esta segunda entrega de la trilogía angélica "Ángeles y demonios" es crucial en muchos aspectos en el hilo narrativo de esta saga, ya que es el capítulo de en medio. Lo más importante es el orígen de Daniel el elegido, el nephilim, que aquí aparece. Su origen es determinante para entender su importancia en un futuro que se caracteriza por su ausencia o su presencia, es decir; con un futuro no escrito sino que se puede ir escribiendo. Esta perspectiva de variación hacia el lado positivo o negativo es lo que le da encanto a esta parte de la saga. El elenco cuenta con Walken, en el papel de Gabriel y con Rusell Wong y Beals, como los padres de Daniel. Danyael y Valerie, con una gran química, son los protagonistas absolutos de esta cinta número dos, ya que de su unión depende el futuro. El resto de los personajes son los recurrentes, engrosando el universo angélico, sus actuaciones son las de personajes tradicionales, como son los ángeles en un escenario moderno y con un comportamiento aún más moderno. Buenos efectos, y perspectiva en general. A los que os guste la saga adelante, porque está parte es imprescindible en la trama para entender esta historia en toda su intensidad y amplitud. Saludos.

Segunda parte bastante liosa y aburrida donde ahora la salvación viene de un niño que está por nacer (a alguien le suena?). Más ángeles para enrevesar aún más la historia, si no se ha visto la primera parte uno puede que no se entere mucho y, si la vio, desde luego creo que se va a quedar bastante indiferente ante esta oscura secuela.

A pesar de la derrota de Gabriel, la guerra civil entre Ángeles continúa.

Siguiendo la profecía, en la cual un niño nacido de la unión entre un Ángel y una humana, los Ángeles leales a lo voluntad de dios envian al Arcangel Daniel, para que, literalmente, deje preñada a una hermosa mujer, llamada Valerie Rosales, quién como esta profetizado, dará luz al nefilim, mitad hombre, mitad Ángel, y que pondrá fin al interminable conflicto.

Empero,los planes serán alterados ante el regreso de Gabriel, expulsado del mismo infierno por Lucifer, quien se niega tanto a tener a este en sus dominios como a tomar parte en esta lucha fratricida.

Libre de nuevo, Gabriel no dudará en dar caza a Valerie para impedir como sea que se cumpla la profecía.

Dirigida por Greg Spence, quien toma el relevo de Widen, esta secuela se aleja de los desérticos y áridos paisajes de la primera parte por un oscuro entorno urbano.

Dotado de un mejor ritmo que su antecesor , el film no alcanza a aburrir en ningún momento gracias sobretodo a la labor del carismático Walken, como el implacable Arcángel Gabriel, acompañado en esta ocasión por una jovencita Brittany Murphy, y cuya química y momentos sazonados de cierto humor, como la secuencia en el Bar, son lo mejor de la peli.

No desmerece para nada el papel de Jennifer Beals, quien se toma en serio el papel y se esfuerza en su interpretación, Russel Wong en cambio se muestra mas espeso que su compañera. También hay un pequeño pero importante rol para Eric Roberts, como el Arcángel Miguel.

Es interesante la visión que se da aquí del edén, representado como un oscuro y siniestro páramo industrial.

Una secuela bastante digna y que consigue entretener por su mezcla de fantasía, mitología cristiana, thriller y acción.

Gracias.

Sigue en la misma línea de la primera entrega, donde se desarrolla una batalla entre los ejércitos angelicales del Cielo por cuestiones de celos hacia la raza humana que ha sido privilegiada por Dios. Combate que se traslada a la Tierra, donde existe una única posibilidad de contrarrestar la maldad del arcángel Gabriel: el hijo nacido entre una humana y un ángel.

Como vemos, el argumento es sumamente delirante, donde se bebe fuertemente de temáticas
religiosas sagradas combinadas con ciertos tópicos mundanos.

El problema es que esa combinación resulta poco atrapante, porque se caen en situaciones que quedan pegoteadas e irrisorias, y en ese contexto ridículo es muy difícil tomarse el argumento en serio ya que no atrapa casi nada la atención.

No engancha en su mesianismo, las circunstancias textuales son muy extraviadas y se termina armando un mejunje que no pega en nada y que repele por la falta de elaboración y de lucidez narrativa.

Los efectos especiales son flojos y poco sugerentes, la banda sonora es del montón, la creatividad argumental es pobretona y muy inverosímil hasta para un producto de fantasía, la interpretación de Christopher Walken no es tan convincente como en la primera y hasta hay situaciones muy toscas como la de ver a un ángel teniendo sexo o tomándose a golpes de puño.

Sólo queda como positivo la sugerencia de algunos escenarios góticos y oscuros, la fotografía y la presentación visual del contexto escenográfico donde se desarrolla el guión, además de que al menos no aburre de tan absurda que resulta en sus premisas.

Palabras claves: ángeles, demonios, Cielo, secuela, directo al mercado del video, guerra sagrada.