Stargate: El arca de la verdad

Siendo esta la primera crítica que se va a publicar, no diré nada de la trama, para no fastidiar a nadie.

Bueno, como todos sabíamos, The Ark of Truth pone fin a la serie, al menos de momento, y a la saga de los Ori. Es una guinda agridulce a diez años de excelente ciencia ficción. No porque, en absoluto, sea una mala película, sino porque, en realidad, no es más que un episodio del doble de duración. Un modo de atar los cabos que quedaban sueltos, pero sin la fuerza ni gancho que debería tener. Es el último episodio de la décima temporada, uno que viene a sustituir a Unending en la numeración, finalizando la historia de los Ori.

Respecto al episodio, bueno, quizá se echa en falta a Richard Dean Anderson, el fantástico general O'Neil. Quizá una aparición "para coger el teléfono" hubiese sido de agradecer. Y la dinámica es la misma, la de siempre, la que nos encanta a los gaters: para acabar con la amenaza Ori hay que encontrar un artefacto Antiguo, el Arca de la Verdad, y tenemos al SG-1 viajando de planenta en planeta a través del StarGate y de la Odisea en busca del Arca. Diversión para los clásicos asegurada.

Pero, como ya dije, le falta mucha fuerza. Es decir, se supone que ésta es la última vez que vemos al SG-1, al Teal'c, a Daniel Jackson, también al ya encariñado Mitchell (Sam sigue en Atlantis) en su ambiente, en su línea... y es un episodio más...

Esperemos que la fuerza y garra que le falta a esta película se consiga con la próxima y última, Continium, donde el SG-1...


NOTA PARA LOS VALIDADORES: en español, Ancient se tradujo por Antiguo, y no por Anciano. Lo digo por la sinopsis ;)

La clave para valorar esta película es, como bien han apuntado algunos: capítulo largo. Y como capítulo largo que es, está en la línea de coherencia y calidad argumental que tiene la serie, sinceramente no esperaba ver algo mejor. Aunque sería una sorpresa muy agradable ver algún día una película decente basada en este universo Stargate.

Yo no sé de qué presupuesto disponían, pero no parece más que el destinado a uno o dos capítulos normales. Los decorados nada nuevo, están las ruinas de cartón-piedra de siempre, el interior de la nave Odisea, el mismo plano de costumbre de Celestis generado por ordenador, la base Cheyenne, y como no podía ser de otra forma, el bosque ese de Canadá que sale en todos los capítulos.

Es una película que todo fan tiene que ver, para poder zanjar por fin el tema de los Ori. Alguno dirá que finalizaron la trama de una forma muy forzada, y tendrá razón, pero tampoco el tema daba más de sí según los últimos acontecimientos en SG-1.

Le coloco un 5, que bien podría ser un 2 si no fuera por el cariño que uno siente hacia esta franquicia, que te hace asumir y pasar por alto agujeros argumentales, incoherencias, pésima realización y otros varios defectos.

A los seguidores les gustará, pero poco más.
Mismos personajes, mismos tipo de exteriores (han sacado uno muy grande de montañas nevadas como unica diferencia con capítulos normales en que los exteriores siempre son reducidos) misma estructura y nada que sirva de excusa para sacar estos dos capítulos a la gran pantalla.
Lo mejor:Te ahorras el "continuará" entre parte y parte y los ves todo de un tirón (cuando lo pongan el televisión será así)
Lo peor:Es una pena que no usasen más medios para diferenciarlo un poco de la serie.

En la misma línea en que marchaba ya la serie esta película podría ser considerada como dos capítulos largos que no hacen otra cosa que relatar lo que estaba programado para la última temporada de Stargate, que nunca se llegó a hacer. Con la serie no queda descolgada y solucionan el problema de los Ori omnipotentes de la galaxia. Por lo menos cierra la serie de una forma más correcta y nos dejan a la espera de el film que tienen anunciado. Después sólo nos quedará Atlantis.

Esta película fue creada para cerrar de una vez por todas el ciclo del SG-1, pero lo han hecho todo de una manera tan radical, tan rápida y todo tan a machete, que algo de sentido tiene, pero te quedas con un cierto mal sabor de boca por lo súbito de todo. Otro sin sabor es la no aparición de Richar Dean Anderson, que le hubiera dado otro aire aunque sólo apareciese un rato.

Con esto no quiero decir que sea una película mala, ya que más que película son dos capítulos, y son de muy buena calidad, pero la manera de cerrar este ciclo no me parece adecuado, ya que creo que podrían haber dejado algún cabo suelto para más adelante en vez de meter el candado.

A los fans de SG-1, les recomiendo sin lugar a dudas esta "película capítulos", y a los que nunca la vieron la serie de Stargate, les diría que antes de ver esta película viese las últimas temporadas del comando, ya que sino van a estar algo perdidos.