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Donde te lleve el día (Where the Day Takes You)

Drama King sale de la cárcel y se reúne de nuevo con el grupo de amigos a los que considera su familia. Pero descubre que, durante su ausencia, todos ellos han sucumbido a los peligros de la calle: drogas, prostitución, armas... Al mismo tiempo, conoce a Heather, se enamora de ella y, entonces, se plantea cómo afrontar la dura realidad de la vida. (FILMAFFINITY)
Críticas 4
Críticas ordenadas por utilidad
29 de agosto de 2008
9 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Mucho tiempo después de haber visto Mi Idaho Privado de Gus Van Sant (una de mis películas favoritas) tuve la gran suerte de toparme de madrugada con esta pequeña maravilla.
La película nos cuenta la historia de un grupo de adolescentes fugitivos que tratan de sobrevivir en las calles de Los Ángeles. Drogas, prostitución, violencia... todo representa una amenaza para los menores, que sin embargo, prefieren la vida en la calle antes que volver con sus familias. El film comienza cuando King (Dermot Mulroney) sale de prisión y regresa con su “familia” de la calle, un grupo de jóvenes con los que vive.
Lo mejor sin duda son los jovencísimos actores, entre ellos Sean Astin (que interpreta al personaje de Greg) está sencillamente maravilloso, nada que envidiar a River Phoenix, ni a Keanu Reeves. Fantástico también Dermot Mulroney, que ganó en el Festival Internacional de Seattle el premio al mejor actor por Where the Day Takes You.
Es una película que no te dejara indiferente, nos regala momentos de reflexión y consigue que tiempo después de haberla visto sigas pensando en ella. Muy recomendable para todo aquel que le guste el cine independiente.
Atikus
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3 de diciembre de 2012
4 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Grata sorpresa ha sido reencontrarme con esta película, la verdad tenía mucho tiempo sin verla y ahora me ha parecido mejor que en el momento de verla por primera vez.
Dermot Mulroney demuestra por que es uno de los mejores actores de su generación pero que nunca ha tenido el reconocimiento, esto debido a que sus peliculas nunca son de grandes estudios o no tienen la promoción suficiente.
El resto del reparto cumple con creces destacando a Lara Flynn Boyle como el interés romántico de Mulroney, Sean Astin en el papel de un adicto y Balthazar Getty en tal vez su actuación mas destacada.
Los secundarios de primer nivel: Christian Slater, Adam Baldwin y Kyle MacLachlan ponen en ingrediente extra a la cinta.
Mención aparte el personaje de Will Smith la verda aunque aparece muy poco es bastante destacado.
Así que estamos ante un film muy entretenido que toca temas polémicos pero de una forma ligera esto sin restar interés a la trama y que es aderezada con una excelente banda sonora de parte de Melissa Etheridge.
Difícil de conseguir, tuve la suerte de encontrarmela en un videoclub donde el dueño me vendió el DVD.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
RubenCinescape
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29 de noviembre de 2017
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
25 años después de su estreno en otros países y suponiendo el debut de Will Smith, Netflix ha conseguido traerla y doblarla al castellano (A donde te lleve el día, es la traducción el castellano al comenzar la cinta por el narrador) aparte de poder estar al alcance de los fans de Smith y otros actores. No esperaba gran cosa ya que apenas sabía de la trama y solo sabía del repartazo que tenía pese a que la mayoría fuesen apariciones breves. Perfectamente pudo haber servido de ejemplo a Aronofsky para su espléndida Réquiem por un sueño, salvando las distancias. Marc Rocco del que me falta su otra película también muy bien valorada, logra una cinta solvente e interesante, un tanto gratuita en el vocabulario pero bien planteada y desarrollada en general salvo ciertos personajes, como es normal, el exceso de personas siempre pasa factura al desarrollar. Pero la cinta reside en la cierto modo redención de sus dos protagonistas que se dan cuenta de qué están haciendo con sus vidas, y en las consecuencias que atribuye las drogas. Una cinta digna de poner en institutos y otro tipo de centros para que los chavales vean la cruda realidad, bien enfrentada en el personaje adictivo de Sean Astin quien logra posiblemente su mejor actuación y para mí revelación de la cinta a diferencia de lo que buscaba en Smith que se queda en un digno debut pero poco trascendente ya que a la vez rodaba el príncipe de Bel Air que fue lo que le dio la fama. La película es un tanto lenta en desarrollo y quizás se deba al abuso de extender el repertorio musical y la cámara lenta, tanto que por momentos parece un videoclip musical y eso adolece a la trama aunque visualmente y sonoramente no quede mal pero alarga minutos que se podrían haber metido para desarrollar a otros personajes ajenos a la pareja protagonista y Sean Astin. Aún así es una cinta correcta, con mensaje claro, importante y no es larga. No me parece la gran obra que decían varios críticos pero el resultado es aceptable e interesante.
StarNine27
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19 de enero de 2018
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Terminando de ver “Where The Day Takes You” (1992) de Marc Rocco con Laura San Giacomo, Dermot Mulroney, Sean Astin, Balthazar Getty, Will Smith, Kyle MacLachlan, Christian Slater, Adam Baldwin, Alyssa Milano, David Arquette, Lara Flynn Boyle, entre otros. Drama y crítica social sobre un grupo de jóvenes de la calle, y adolescentes fugitivos tratando de sobrevivir en las calles de Hollywood. La historia está basada en la experiencia del guionista Michael Hitchcock, cuando trabajó en un refugio para adolescentes fugitivos en Hollywood, donde logró conocer la consecuencia de los peligros de la calle, la violencia, las drogas, la prostitución, las armas, etc. De la dirección, el relato está contada de manera episódica, tomando de base una entrevista al personaje principal, y haciendo cortes en “flashback” para conocer las diversas historias que lo tienen a él en común con un grupo de jóvenes. Ese estilo narrativo le pasa factura a la producción debido a que muchos personajes quedan por fuera, y no se vuelve a saber de ellos a discreción del guión, como sucede con el personaje de Will Smith, el único que está 100% trabajado desde la caracterización, pues los demás siempre mantienen la buena salud aparente, muy a pesar que se pasan drogas, se prostituyen o vivan debajo de un puente. Aquí no se muestra ese sentimiento de soledad, desamparo y necesidad, sino más bien, parece un grupo de revoltosos que quieren todo fácil, tragarse el mundo, no crecer y jamás trabajar. Sin embargo, con el bajo presupuesto de la producción se logró reunir un elenco de estrellas en ascenso y con un currículo de vida muy particular; de quienes se dijo, trabajaron contra el consejo de sus agentes por un pequeño salario, y se prepararon para sus papeles al pasar días con fugitivos adolescentes reales en el distrito de Hollywood. La película funciona porque es amena y estimable, pero no hay desgracia dramática, más por la esperada como si fuera una bola de nieve, lo que la hace previsible, y no tarda en arruinarse y caer en un mar de tópicos, moralina barata y lugares comunes, como el sacrificio del líder, el estereotipo de los personajes, etc., donde el tratamiento moral de las acciones brilla por su ausencia, pues desconocemos cómo y por qué llegaron hasta allí. Si bien la historia aparenta dureza y rebeldía, no lo logra porque se contiene en mostrar lo que se quiere prevenir, y se mantiene en su tufo conservador y domesticado, muy probablemente para llegar a la TV, y por ello se opta en muchas ocasiones por suavizar su contenido por lo que al final, todo se monta dentro de los forzados límites. Hay escenas buenas, dentro de lo episódico, como la secuencia final en la estación de autobús, ya que contextualiza de manera perfecta el personaje de Dermot Mulroney. Del reparto destaca por ser la primera película de Will Smith, en una historia muy aclamada por la crítica en su momento, pero su personaje dura solo unos minutos en pantalla. Dermot Mulroney está bien como el personaje principal, y uno no se espera el giro que da debido a las grabaciones de las entrevistas. Sean Astin como un adicto a varias drogas, no está muy bien trabajado su personaje, pues es demasiado “dulce” para un drogadicto, y uno no se lo cree, pero se aprecia que busque darle un giro a su carrera con personajes oscuros. Y Balthazar Getty como Little J, como un joven agresivo al que no le importan las reglas, y que llega a los límites de venderse por nada, es el mejor personaje de todos y el único que logra la “redención” aunque el final es ambiguo, pareciera que no hay vuelta atrás, pues sin padres, no hay reglas, y estos brillan por su ausencia. Si quieren ver cine de realidad, les recomiendo el cine de Larry Clark. Nos queda la canción de Buffalo Sprinfield que resume toda la película, pieza que inicia y acaba el relato de manera circular, como la vida misma: “Stop what's that sound, everybody look what's going down”
RECOMENDADA
NO tendrá nota en Lecturas Cinematográficas.
http://lecturascinematograficas.blogspot.com/
Alvaro Zamora Cubillo
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