Tomie: Unlimited

Noboru Iguchi dirige esta sangrienta propuesta continuando fiel a su estilo provocador, divertido y buscador de carcajadas desde el gore más hilarante, como ya demostrara en diversas obras de su filmografía como “Machine Girl” o “Robogeisha”. Para esta película, Noboru se ha basado en el cómic de Junji Ito, creando a partir de él y junto a Jun Tsugita el guión sobre el que se desarrolla “Tomie: Unlimited”.

El film nos ubica en la relación de dos hermanas, Tsukiko y Tomie. Un desafortunado (y sangriento) accidente las separará al perder la vida la segunda y sumirá en el más desconsolado dolor a Tsukiko. Pero para su sorpresa, y la de sus padres, el día del cumpleaños de su hermana difunta, esta regresa a casa desde el más allá. Todo es alegría en la familia, pero Tsukiko irá viendo cómo la que viste el rostro de su hermana transforma su vida en un infierno y siembra el horror allá por donde pasa…

Excesiva, sangrienta y visualmente creativa, “Tomie: Unlimited” apabulla al espectador con una sucesión de imágenes de continuo gore y casquería, que si bien no deslumbra por su calidad sí llama la atención por su cantidad.

Este film, aunque parece asentarse en unas bases más serias que otros del mismo director, debido a su temática y su corte de clásica historia oriental de fantasmas, sólo puede disfrutarse si se le aplica el mismo filtro de humor que a cualquier otra de sus producciones, pues su historia se rebela en extremo sencilla y pobre y las interpretaciones del elenco actoral son discretas y más de una digna de carcajada.

En conclusión, una orgía de sangre y vísceras, hilarantes escenas de fantasmas y más risas que sustos o terror. Prescindible sin duda, pero salvable para un rato de diversión entre amigos y cervezas.

-Enoch-

Película japonesa que adapta el manga Tomie, y que está dirigida por el responsable de títulos como The Machine Girl (2008), que también ha participado en la popular antología The ABCs of Death (2012), y protagonizada por Moe Arai (The Blue Bird, 2008), y Miu Nakamura (Teketeke 2, 2009).

Tsukiko vive en el luto desde que un desgraciado accidente doméstico se llevó la vida de su hermana Tomie. El dolor deja paso a la extrañeza cuando esta regresa de la tumba el día de su cumpleaños, siendo recibida por sus padres con gran alegría. Pero Tsukiko intuye que hay algo que no funciona bien, cosa que se demostrará cuando esta “nueva” Tomie empiece a hacer de su vida un verdadero infierno.(FilmAffinity)

la película hace gala de un peculiar tono muy bizarro, en el que se combina un gore festivo con elementos sobrenaturales, a cada cual más raro, hechos con unos efectos prácticos resultones, y unos efectos digitales muy malos en según que casos. La trama es simple en extremo, aún con un giro final en el último minuto, que como resulta habitual en el terror japonés, vira un poco hacia lo abstracto, y las actuaciones están algo sobreactuadas, aunque no desentonan con el tono extravagante de la propuesta. Si bien el ritmo es de lo más logrado en conjunto, el hecho de que la historia no acompañe consigue que parezca que estemos viendo una sucesión de cortometrajes de terror, que aunque resultones, terminan por cansar.

Tomie: Unlimited es una película con un terror que no consigue dar miedo ni mucho menos, pero aún así, por lo grotesco de este se puede disfrutar pese a las evidentes carencias de una trama poco más que inexistente.

Nota personal 5/10

Si del país del Sol Naciente no nos hubieran llegado ya otras joyas como la primera y genuina The ring o Dark Walter os puedo asegurar que ni conoceríamos películas tan malas como esta.

Pero claro, estamos en un mundo donde si una gallina pone huevos de oro la vamos a exprimir hasta qué deje de producirlos. Y eso es precisamente lo que ha ocurrido para que nos lleguen films tan mediocres como este.

Así, Nos encontramos con unas actuaciones excesivas, sobre todo la del padre de Tomie, rayando lo paródico y una fotografía tan simple que casi parece sacada de un video de Youtube. La trama ya aburre hasta decir basta y los efectos no existen. Me encanta el cine que llega de Oriente, pero mejor no perder el tiempo con tontadas así.

Tengo que reconocer que a la media hora dejé de verla por lo que tampoco he sido muy objetivo con esta crítica. Dejo así para otros valientes que se la hayan tragado entera el redactar una crítica más real porque yo no pude soportarla.