Dash & Lily (Serie de TV)

Vale, vale. Puede que te haya llamado la atención todo lo que conlleva está serie, así que déjame que te explique una pequeña sinopsis. A pocos días de navidad, el joven Dash encuentra en su librería favorita un cuaderno donde una chica le reta a seguir una serie de desafíos, mientras los dos van participando se van conociendo sin llegar a verse…
Vamos a ser honestos, me ha gustado mucho. Como veis le doy un 8, no es la mejor serie del momento ni os va a hacer plantearos vuestra vida, pero si es un “happy place” muy cerca de navidades y para disfrutarlo del tirón. De esas series que no vas a dejar de ver, y en las que vas a estar permanentemente sonriendo (no se hacen muchas de esas últimamente). Es una buena comedia romántica adolescente que en lugar de durar hora y media dura 4.
Tenemos dos personajes muy bien trazados, Dash y Lily no se pueden parecer menos y a la vez ser mas complementarios. Unos actores que claramente han sido elegidos por sus voces en off, que logran que sin hacer mucho te caigan bien. Y con la gran cantidad de series, sobre todo en comedia que los protagonistas caen mal, estos son muy divertidos.
La temática de navidad, muchas comedias abusan de ella, y sobre todo en Netflix, casi ninguna bien. Está lo hace francamente bien. Sin navidad la historia no empezaría, pero es que a lo largo de los diferentes días que pasan, la navidad logra que la serie avance. Muchos de los capítulos, los ha dirigido Fred Savage, el niño que ya ha crecido de “la princesa prometida” y tengo que decir que lo hace francamente bien.
Por último, el otro gran acierto. Nueva York. Se convierte en un personaje más, y a través de sus sitios emblemáticos (y sin pasar por la estatua de la libertad que se agradece), logra que toda persona se sienta un vecino más de la gran manzana. Y logra que yo en concreto, quiera volver a ir allí.
No os lo penséis, y visitad a Dash y Lily. Lo disfrutareis.

Dash & Lily es la nueva propuesta adolescente de Netflix, que ha encontrado en dicho nicho un gran target en el que enfocar sus exitosas producciones. No estoy entre ellos (ya me pilla algo lejos), pero es que no me puedo resistir a los productos navideños, por lo que he caído sin remedio alguno.

Afortunadamente, estamos ante una serie que no engaña a nadie, siendo tan edulcorada y bobalicona como simpática y bien intencionada, en un regalo perfecto para los adolescentes en estas navidades. Para el resto, si te gustan dichas fechas y te dejas los prejuicios en casa, seguramente disfrutes de la experiencia, aunque tampoco se puede negar que no es nada del otro aquel.

La dirección no destaca en ninguno de sus ocho episodios (por cierto, algunos cortesía del mítico Fred Savage), con una acertada duración (poco más de veinte minutos cada uno), haciendo que estemos ante un dulce de fácil digestión, que se consume sin problemas y deja satisfecho, aunque dejando la sensación de que tampoco ha sido nada memorable.

Y es que el guion nunca va más allá de su peculiar premisa (que tampoco es el colmo de la originalidad, seamos sinceros), en la cual, dos adolescentes que no se conocen entre sí, se escriben en un diario en común, haciendo una serie de retos por la calles de Nueva York (que luce fantástica, aprovechando sus bellos escenarios), con el objetivo de finalmente conocerse y encontrar el amor.

Lo sé, ñoño, y vaya que si lo es, aunque la serie no lo oculta, notándose sus intenciones desde el minuto uno. Si el primer episodio no te convence, es mejor que te bajes a tiempo. No voy a afearle a la propuesta la falta de garra y mala baba, ya que es demasiado ingenua e inofensiva como para reclamarle algo así. Hay otras series y películas que sí ofrecen espectáculos desvergonzados, pero aquí tenemos la corrección política hecha serie. Esperar otra cosa sería de ilusos.

Los personajes caen bien, aunque de los dos protagonistas destaca ella (entregada interpretación de la actriz), más jovial y cercana, siendo un caramelito para que se identifiquen las adolescentes introvertidas, estando claro el objetivo de los guionistas. En vez de la típica princesa de cuento de hadas (como suele suceder en este tipo de productos), han optado por una adolescente de carne y hueso, solitaria y con pocos amigos, con la que bastante parte del público se pueda identificar.

Él (convincente actuación del intérprete) es estirado, culto y de buena familia, y con un físico que se lleva mucho en los tiempos que corren. Supongo que algunos también se verán reconocidos. Ambos tienen química, por decirlo de alguna forma, a pesar de tener caracteres tan dispares. Mención especial a los peculiares secundarios, aunque algunos de ellos están desaprovechados y aparecen poco.

Finalmente, estamos ante una serie dulce y recomendable para estas fiestas, pero que tampoco revoluciona el género, siendo más bien una opción perfecta para el público al que está dirigida. No tiene sentido ponerse exigentes con una producción de estas características, ya que no se puede negar que da lo que promete. Conforme.

Más críticas: ocioworld.net

Es de esas obras que se disfrutan más cuando se ven en la época en la que están ambientadas. En esta ocasión siendo la Navidad, siendo esta festividad otro elemento fundamental de la trama.

Siendo protagonizada por unos adolescentes muy peculiares, ya que prefieren la cultura a las fiestas llenas de alcohol, pero no por ello no anhelan buscar a otras personas y gente que comparta sus gustos. Siendo este rasgo que lo diferencia del resto de películas adolescentes que siempre el chico/a se enamora del más atractivo y quieren acabar juntos. Gracias a la interesante idea que se le ha ocurrido a la protagonista lograran enamorarse sin verse los rostros, una idea muy original que mejor que descubras por cuenta propia en lugar de que te la destripe en esta crítica.

Es cierto que usa los típicos recursos de comedia romántica para alargar la trama, pero los gustos como personalidad de los personajes y la forma de conocerse hacen que sea una serie interesante y fuera de lo habitual.

Si alguien busca una serie original, corta y de buen rollo de temática romántica y navideña, ésta es su serie. Pese a tener todos los elementos para ser ñoña y edulcorada no lo es. El guion es entretenido, ágil y a veces sorprendente; los personajes secundarios son adorables, y las localizaciones (Nueva York en Navidad) son fabulosas.

No pasará a la historia de la televisión, pero puede ser un buen regalo de Navidad.