Cadence, el valor del honor

Solo por ver ese momento en el que desfilan de la portada merece la pena ver la película. Las interpretaciones están bastante conseguidas y el grupo que se termina formando es creíble. El contexto de la guerra de vietnam y las problemáticas de las personas de raza negra en esa época completan el film. Eso no impide que la película sea digna de un sábado por la tarde en casa y sin palomitas.
Saludos.
MINTH.

En este tipo de historias, en el que el factor psicológico tiene un fundamental protagonismo, un planteamiento guionístico y de dirección basado en los recursos básicos de las historias de situación o de acción, no puede más que fracasar. El enfrentamiento entre el soldado y el sargento, el pulso de personalidades en que se cimenta este filme no llega a buen puerto precisamente por una labor de dirección que no está a la altura del planteamiento. Además, parece contaminada por estilemas más bien típicos de los telefilmes rápidos y baratos. Incluso la interpretación de Martin Sheen parece llevada a cabo sin ganas y el espectador no puede entender, merced al guión mal desarrollado y a la interpretación pobre, cómo el personaje que él interpreta puede acabar trastornado. Tampoco entendemos por qué el soldado odia al sargento, nadie nos lo explica. Aún así, ahí tenemos a Laurence Fishburne, grande como siempre, las escenas coreografiadas de los desfiles de los prisioneros, un cierto aire humanista en el dibujo de las relaciones entre los reclutas que da verosimilitud al relato y un ritmo, a pesar de todo, que logra que la peli se pueda ver sin aburrimiento.

La única experiencia que ha tenido el actor Martin Sheen como director fue en 1990 con el drama militar Cadence, el Valor del Honor. Un largometraje que quedó en familia pues el reparto lo formaban dos de sus hijos, Charlie Sheen (Platoon) y Ramon Estevez, y un Laurence Fishbourne con el que había coincidido en Apocalipse Now (1979). El mismo Martin Sheen se reservó otro de los roles principales aunque en principio el papel estaba destinado para un Gary Busey (Arma Letal) que fue despedido por mal comportamiento.

Otros intérpretes de Cadence, el Valor del Honor: el ganador del Oscar F. Murray Abraham (Amadeus) sin acreditar, y el joven James Marshall (Twin Peaks).

La acción -o la falta de ella- se sitúa en una base militar de los Estados Unidos en Alemania del Oeste, lugar en el que es encarcelado el soldado Franklyn Bean (Charlie Sheen) por rebeldía. Allí se hace amigo de los compañeros de barraca -todos negros (entre ellos Fishbourne)- y se enfrenta al sargento McKinney (Martin Sheen), que les hace la estancia imposible a todos ellos.

Cadence, estrenada en España en video bajo la distribución de Record Vision, es una película que hubiera encajado entre los telefilms que años atrás daban en la sobremesa de Tele 5 y Antena 3. Una realización propia de cine para la TV, con un guión que es la adaptación de la novela Count a Lonely Cadence de Gordon Weaver, una versión edulcorada de la primera hora de La Chaqueta Metálica (1987) pero con un trasfondo racial bastante amable.

Lo mejor: la relación del Flanklyn Bean con los compañeros de color -el apartado más cuidado del guión-, la interpretación del enérgico Laurence Fishbourne y cada compañero negro que le acompaña -las canciones, la coreografía-. La inclusión del tema Subterranean Homesick Blues de Bob Dylan en la banda sonora

Lo peor: cabos sueltos del guión -¿Por qué ese odio latente entre Franklyn y el sargento? La historia del hijo del mismo sargento tampoco está muy trabajada-. Tampoco muy destacable el trabajo de Charlie Sheen, que se une al grupo de actores capaz de llorar sin que asome una lágrima en su rostro.

Deslavazada película dirigida por Martin Sheen y protagonizada por su hijo Charlie y por él mismo, realizando un poco vibrante "tour de force" interpretativo entre padre e hijo, que se odian por espurios motivos que se nos escapan al resto de los mortales, pero que desde luego no convencen a nadie.

Lo mejor de la película, el góspel y la coreografía de los negros cada vez que desfilan.

Y no solo los Sheen, el elenco es absolutamente espectacular: cómo no el insuperable y sarcástico Lawrence Fishburne, F. Murray Abraham (qué pedazo de actor, aunque tenga el ego subido por ganar un Oscar)...
30 años tiene ya este melodrama cuartelero-carcelario de la época de la Guerra del Vietnam, que en su elenco y en el guión hace continuas referencias a "Apocalypse Now" y "Platoon", como no podía ser menos...
Pues a mí personalmente me gustó mucho porque es un film apabullante, muy bien interpretado, con mucha fuerza, sabe destripar los desaguisados sicológicos de unos militares recluidos y de otros militares que hacen de carceleros (en este caso, me impresionó la actuación de Papá Martin Sheen). El ambiente opresor de una prisión militar yankee en la Alemania Occidental, el trasfondo de la segregación racial con la humillación que le infligen al nene Charlie Sheen por ser obligado a compartir celda con un grupo de soldados negros...
Y lo mejor de todo: el bailecito-desfile soul que se marcan los negratas para ir a la cantina...
De los mejores films sobre cárceles militares que he visto.