Haz click aquí para copiar la URL

Le Havre

Comedia. Drama Marcel Marx, famoso escritor bohemio, se ha exiliado voluntariamente y se ha establecido en la ciudad portuaria de Le Havre (Francia), donde vive satisfecho trabajando como limpiabotas, porque así se siente más cerca de la gente. Tras renunciar a sus ambiciones literarias, su vida se desarrolla sin sobresaltos entre el bar de la esquina, su trabajo y su mujer Arletty; pero, cuando se cruza en su camino un niño negro inmigrante, tendrá ... [+]
<< 1 5 6 7 10 16 >>
Críticas 77
Críticas ordenadas por utilidad
22 de febrero de 2018
7 de 10 usuarios han encontrado esta crítica útil
Tardas en entrar en ella, a mi me ha ocurrido; pero cuando lo consigues, entretiene; porque aunque los elementos que toca son demasiado comunes, su estética clásica, y la forma de enfocar las actuaciones de los protagonistas, te hacen sentir que te encuentras ante un cine diferente, o al menos, un tanto olvidado.
Tal vez El Havre, podríamos calificarlo como un proyecto Naif, dentro de esa estética muy simple pero a la vez eficaz. Cánones clásicos en su desarrollo y un guion que va de menos a más, hasta conducirnos a un espacio conocido y convencional.

Un 5
LEUGIM
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
27 de marzo de 2012
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Cuidado con los cuentos de hadas que los escribe el diablo. Ante tal elenco de desavenencias y perdedores que promete el guion, puedes acabar edulcorando la historia por encima del índice de glucemia compatible con la credibilidad, esto suele pasar cuando te haces mayor, reconocido, y no quieres que tu nuevo y moderno público pase un mal rato. No es mi intención amargarle la euforia por las historias bonitas a nadie. Pero el empacho de caramelo hace que en ningún momento sientas el drama de los personajes. Así no te da tiempo a reflexionar sobre los problemas que enfrentan, aunque la intención sería esa. Y el interés es loable. Y la película no supone un feo a los problemas de marginalidad.
Los que ya conocen al director, conocen su infalible dirección de actores. Pero esta vez, más que aprovechar un nuevo entorno para indagar en su lenguaje, se autohomenajea. Haciendo ridículos los guiños cómicos que antaño sobresalían en el cine del maestro de la parquedad .
El cambio de país le sienta muy bien. Ahora que Finlandia progresa y es el resto del continente el que se hunde, los entornos urbanos degradados y arrabales que medran por aquí, hacen sentir a Aki como en casa. La fotografía es asombrosa y cuidada al detalle como ya pocos hacen, y en 35mm. Todo en el film es anacrónico y no muestra ni por asomo nada que haga referencia al siglo en el que vivimos. Lo que hace que el feísmo de Kaurismaki tome connotaciones románticas a riesgo de asumir el hándicap de que, con tanta velada fantasía, acabe retratando una pobreza idílica. A cambio, esto le augura a Le Havre una larga vida como clásico menor.
suzukid
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
9 de marzo de 2012
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Normalmente, las películas de Aki Kaurismäki ofrecen al espectador algo más que entretenimiento, a menudo se convierten en crítica social y "El Havre" en este sentido no es una excepción. En esta película utiliza un tema tan actual como la inmigración para contraponer la crudeza del estado gubernamental a la solidaridad de las personas anónimas (el pueblo, compuesto por: el limpiabotas, el frutero, la camarera, etc.) a las cuales Kaurismäki convierte en nuevos héroes anónimos. La película se convierte con ello en una lucha social (el pueblo contra el estado), donde los vecinos de un barrio, acogen y ocultan a un niño inmigrante que huye de la policía.

Pero esta película ofrece mucho más que eso, hay una historia de amor, cotidiano pero auténtico, verdadero, amor de afecto, de gestos, miradas y comprensión entre el protagonista Marcel Max y su señora Arlette.

Kaurismäki nos muestra los defectos de la sociedad pero también las virtudes de los individuos que la componen, en forma de poesía cinematográfica, dura durante gran parte de la obra, pero infinitamente reconfortante y maravillosa al final, porque…
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Aristofanes
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
26 de febrero de 2012
8 de 13 usuarios han encontrado esta crítica útil
El guion por el que trascurre la película se pasa de imposible. Los sucesos se van encadenando sin el más mínimo respeto a la verosimilitud, de forma infantil.
Y sin embargo, la propia cándida simplicidad de lo que sucede, y la particular idiosincrasia de los personajes, empezando por su aspecto físico y siguiendo por sus interpretaciones arquetípicas, teatrales o místicas, proporcionan un atractivo a la película que, por lo que a mi se refiere, la salva por pelos de provocar el aburrimiento.
En fin, que no la considero una película en general recomendable, aunque sí interesante.
Becerreo
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
24 de marzo de 2012
4 de 5 usuarios han encontrado esta crítica útil
El havre y El niño de la bicicleta coincidieron en la sección oficial del Festival de Cannes. Ambas son las últimas obras de tres de los directores más respetados del cine europeo. Ambas son historias de poco metraje que invitan al optimismo en tiempos difíciles. Ambas funcionan como descripción de la ciudad en la que sucede su historia: el Havre portuario, de badulaques y casas humildes; un pueblecito belga, con sus barrios residenciales, naves industriales y calles vacías. Ambos son cuentos en los cuales un niño cambia la vida de dos personas adultas extrañamente altruistas y comprensivas. Y ambos son films muy comprometidos con la realidad de la Europa del ahora, capaces de dibujar esperanza allá donde solo parece haber injusticia y oscuridad. El niño de la bicicleta es sumamente coherente con el estilo dardenniano, El Havre es una película cien por cien Kaurismäki, y ambas representan la consolidación de sus artífices y la puesta al día de dos maneras de entender el cine que parecían caducas: el realismo social sucio de los belgas, que tocó fondo con El silencio de Lorna; y el realismo mágico surrealista del finlandés, poco brillante en Luces al atardecer.

Y a partir de aquí las diferencias. El Havre se sitúa entre lo real y lo maravilloso, porque en el mundo de colores saturados de Kaurismäki todo resulta extraño y a la vez familiar. Un cerezo en flor sella un final feliz. Un niño inmigrante escapa de unos policías que no hacen demasiado por impartir la ley. Una mujer sana de su trágica enfermedad por decisión divina, compensación quizás de la buena acción de su marido. El Havre es una historia milagrosa que juega al absurdo y cuyo tono y mensaje solo está al alcance de los cinéfilos con buena predisposición o bien de los conocedores del curioso cine de Kaurismäki.

Tanto El niño de la bicicleta como El Havre, por su aparente pequeñez formal, corren el riesgo de ser vistas como películas menores cuando en verdad son dos films de esplendorosa lucidez y madurez. Son aptas para todos los públicos, incluso necesarias, pero no recomendables para todo tipo de paladares. El hecho de estar en el principal festival de cine del mundo, escaparate de los mejores autores y fiel reflejo de las tendencias cinematográficas seguidas y a seguir, corrobora la valía de estas dos obras personales, agradables, necesarias. El niño de la bicicleta me animó a revisar la filmografía de los Hermanos Dardenne (que ocupa un lugar estratégico en mi videoteca). Y Le Havre sin duda ha reactivado mi interés por el cine de Aki Kaurismäki, cuyas primeras películas todavía no vi. Alegra saber que los grandes de los 90 siguen dando guerra con sus obras sugestivas, atractivas, sensibles. Ojalá suceda lo mismo con lo nuevo de Moretti, Loach o Kusturica, por citar otros buques insignia del cine europeo que tiene plaza reservada en La Croisette.

Xavier Vidal, Cinoscar & Rarities
Xavier Vidal
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 5 6 7 10 16 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow