Cowboy Bebop (Serie de TV)

Bueno, ¿por donde empiezo? Debeis saber que yo esta serie no la vi en su día (quizás algo, haciendo zapping), por lo que mi percepción de la serie es diferente a la de muchos.

¿Que quiero decir con esto? Que cuando muchos vieron Cowboy Bebop por primera vez, el uso de internet no estaba tan extendido, no al menos hasta el punto de ver series de anime como churros, y aparte de la TV, el resto de opciones viables pasaban por ir al videoclub.

Y en esa época de pocos títulos, casi todo se veía, y que nos llegara una serie como Cowboy Bebop, que no toma al espectador como un (con perdón) estúpido, y no le lleva de la mano para ver peleas sin sentido, comedias o violencia ochentera, pues era de agradecer.

Cowboy Bebop da un golpe en la mesa y nos ofrece una serie corta pero intensa, que se toma en serio y que muestra una trama elaborada con personajes muy trabajados y un gran final... o eso es lo que siempre nos habéis vendido!!

Cowboy Bebop es una muy buena serie. Me ha gustado mucho, y por ello le he dado un 7, que creo que es una buena nota.

Pero aunque la ambientación me ha encantado, la calidad para la época es sobresaliente y la banda sonora es sublime, lo cierto es que de los 26 capítulos, 20 de ellos son episodios autoconclusivos que narran pequeñas historias, algunos mas serios, otros mas cómicos, en donde se hacen pequeños homenajes a otras series o películas.

Y ojo, no digo que esto sea malo, a mi me ha gustado, pero tampoco es que te dejara pegado a la pantalla esperando ver mas y mas. Entiendo que a finales de los 90, principios de los 2000 era lo que había, y era novedoso y de calidad.

Los personajes son muy carismáticos, los cuatro protas están muy bien desarrollados, pero no así los otros dos personajes de la trama, Julia y Vicius, que están ahí de comparsa para darle dramatismo a la historia, y que se sabe poco o nada de ellos. La enamorada y el malo maloso sin motivación alguna.

Pero entiendo que por aquella época todo el mundo alucinara con la serie, a mi también me hubiera pasado. Un 7 es una buena nota y es mi veredicto.

En cuanto pueda, veré la peli.

Es una serie que tiene muchos elementos que resaltan, como la animación, la música jazz, la ambientación y el carisma de los personajes, pero que flojea en el guión. Carece de una trama que abarque toda la serie, lo cual no es malo, pero las historias sueltas que conponen los capítulos pueden llegar a ser tan entretenidos como aburridos.

Vi esta serie cuando ya había sido coronada - desde hace rato - como "una de las 2 mejores series de los 90'", peleando en la cima con la reconocida Evangelion.

Desde el 1er capítulo, el primer minuto, el primer fotograma, la primera melodía, la primera mirada de spike... No pude (tampoco quise) dejar de admirarla.
Mundos paralelos (éste y el de "cowbe") íntimamente relacionados de una manera exquisita. Personajes completos, complejos, muy misteriosos, únicos, memorables, queribles, envidiables.
Escenarios fantásticos bajo una producción excelente que no deja nada fuera de lugar, que calcula todo milimétricamente.
La banda sonora (y acá me pongo de pie) es un canto al dolor, a la libertad, a la inocencia, a lo iluminado, también a lo sombrío. Jazz, blues y rock n roll.

¿Me estoy olvidando de algo? ahh si, todo esto sumado al magnífico guión hacen - a mi criterio - la mejor serie animada de todos los tiempos.


10, 10 y si hubiese 100: 100.

Bueno, si acaso sería al revés, porque Cowboy Bebop es previa a Firefly, pero la idea es la misma: un grupo de gente de mal vivir, supuestamente durísima, pero que acaba acogiendo en su seno a los descastados más variopintos que quepa imaginar y que, de alguna forma, acaban formando su propia familia. Lo mejor de Cowboy Bebop es, sin duda, su magnífica banda sonora, que no tiene desperdicio. Esto no quiere decir que el resto sea malo, ni mucho menos. Algunos episodios son realmente memorables, como "Sympathy for the Devil"; otros, como "Mushroom Samba", son tan japoneses que sólo los amantes del anime los apreciarán en su totalidad.
Lo mejor, sin embargo, es el desfile de personajes entrañables -a pesar de sus muchos fallos- que pasean por la nave, desde el taciturno Jet y sus queridos bonsais hasta la caradura de Faye, con su adicción al juego. Por no hablar de la magnífica entrada del perro Strut en escena. Para el que haya visto Firefly, a grandes rasgos tenemos a Zoe y Mal, Jayne y River llevados al extremo en su versión anime. Para el que no la haya visto ... ¿a qué estais esperando? :D

Cowboy Bebop no es una serie cualquiera.
Es el máximo exponente de las virtudes del Anime y una de las mejores series de todos los tiempos.
Cada capítulo posee un guión sólido, rotundo y con una capacidad de síntesis ejemplar. En tan sólo 25 minutos es capaz de narrar de forma atractiva un historia autoconclusiva, aproximarse desde diversos géneros (cine negro, ciencia ficción, comedia, thriller, terror,...) y ser coherente con el conjunto argumental.
Es tal la contundencia de los guiones, que alguno de sus 26 capítulos tiene más valor cinematográfico intrínseco que el de muchos largometrajes.
Como aliciente adicional hacer mención también de los personajes que componen la trama, los cuales resultan carismáticos y bien construidos. El espectador empatiza fácilmente con ellos, mientras descubre capítulo a capítulo sus personalidades, trasfondos y motivaciones.
La banda sonora que ambienta la serie, por su excepcional calidad, bien merece un comentario aparte. Yoko Kanno y su grupo, los Seatbelts (con la colaboración puntual de otros artistas), componen unas maravillosas partituras, que de forma parecida a lo que ocurre con los guiones, visitan con bastante acierto diversos estilos musicales (Country-folk, New age, Rock, Soul, Heavy Metal,..), consiguiendo amoldarse a la perfección, en cada momento, al clímax emocional de las situaciones a las que acompañan.
Como comentario final de esta crítica, simplemente revindicar esta gran serie, la cual recomiendo a cualquier tipo de espectador sin reservas, y alabar su final por ser uno de los más líricos, épicos y tristes que haya visto jamás.
Nunca el eclectismo fue tan inspirado.