Diarios de la calle

"El rector", "Rebelión en las aulas", "El sustituto", pero sobre todo "Mentes peligrosas".
Es más de lo mismo pero con situaciones ridículas e intentar tapar todo el bochorno con el nombre de Swank.
Si nos ponemos a hablar de educación, no creo que esta obra sea un ejemplo. Habla del nazismo pero en todo caso lo fomenta ya que los alumnos "malos" son de todos los colores del arco iris excepto blancos. Ya se sabe, negros, hispanos, panchitos, niggers, chinos, etc... todos malos menos los blancos vainilla.

Una profesora que se preocupa en exceso por sus alumnos. Les paga cena, visitas culturales y busca trabajos extra para poder costear todo. Yo me dejaba sin hacer los deberes y me castigaban...
Lo de leer está muy bien. Pero en esta obra lo ponen como remedio a la guerra de Irak. Es ponerse uno a repartir libros y Charles Manson se vuelve un jesuita.

Total no se lleva la peor nota por ser ligera y con un ritmo pasable. Hasta Hilary está como mínimo floja.

Aún siendo la misma historia de siempre (una profesora con un corazón que no le cabe en el pecho, buenísima de la muerte, se encarga de los adolescentes del ghetto, pobres ellos víctimas de esta sociedad; los estudiantes al principio la rechazan pero al ver lo gran persona que es esta mujer, empiezan a "aprender" y a adorarla) mezclada con un fuerte mensaje antiracista, tiene momentos sobrecogedores.

En esta película encontraremos emoción, sentimiento y sobre todo mucha humanidad, poco me importa que no sea el papel de la vida de Hilary Swank o las pegas que algunos le hayan podido sacar a esta película. Hilary realiza una buena actuación, aunque en opiniones de algunos no sea lo suficiente buena creo que más no se le puede exigir.

Porque a quién no se le haya encogido el corazón cuando un chico se presenta voluntario para leer su diario es porque no estaba realmente concienciado de lo que nos quería demostrar esta película. La historía en sí es muy bonita, da que pensar, y nos muestra un tema de interés social y cultural, porque en muchos lugares las personas viven situaciones como la que nos hacen ver y lo más justo es que se les rinda un homenaje a estas personas.

A pesar de lo que muchos puedan opinar creo que no hay más dureza en este mundo que el saber que exiten casos de este tipo y que algunos jovenes viven en esta vida situaciones tan desconcertantes como esta. Personas como estas, gracias a esta película, podrán darse cuenta, al igual que los alumnos de la digna de admiración Erin Gruwell, de que toda vida tiene su sentido y su positividad, y que cada uno con esfuerzo y confianza en sí mismo y en los de su al rededor puede llegar todo lo lejos que se proponga, sin limitaciones sociales.
De esta manera, los alumnos de esta maestra hacen una promesa de honor para un gran cambio que hará historía y provocará un futuro mucho mejor, sin problemas raciales, con un ambiente en las calles mucho más pacífico y con chicos y chicas inteligentes e interesados en aprender y mejorar.

Una gran lección, solamente quién crea que no es así es quién no le ha encontrado el verdadero sentido a esta película, porque en mi opinión, decir que esta película no emociona y que tiene falta de originalidad no tiene sentido, porque después de ver este tipo de historía tan arrolladora no sé que originalidad es necesario exigirle.

Película aclamada sin ningún mérito a parte de mostrar una historia vacía y repleta de sentimentalismos de feria, copia exacta de Mentes Peligrosas, pero acercándose aún más al límite del patetismo. A esto se le debe sumar la actuación de una Hilary Swank bastante empalagosa, para variar; una actriz que si no está dirigida por un buen director no da nada de sí. Y Richard LaGravenese no es precisamente un buen director; un claro ejemplo de esta afirmación es la historia sosa y mal conducida, encumbrada por pequeños y tristes planos bastante pobres.

Revisando a los actores me doy cuenta de que los tres principales actores son los que menos soporto: Hilary Swank, que lo máximo a lo que aspira con esa cara es a ser boxeadora y no emocionar a alguien como pretende en esta película, y menos tal y como lo pretende hacer el director, con tediosas escenitas de orquestral banda sonora; luego está Patrick Dempsey, el actor protagonista de una gran serie de médicos y Scott Glenn, ese actor que siempre está de extra en las películas de soldados redimidos americanas; preferiblemente en un bar oscuro y con poca luz.

Triste, penosa. Intenta llegar a ser una obra poderosa y se queda a medias, le falla el acelerador. Quizás sera porque este es el género que más odio de todos los que hay.

Film realizado por Richard LaGravanese ("De ahora en adelante", 1998), en el que interviene como director y guionista. Se inspira en el libro "The Freedom Writers Diary" (1993), de The Freedom Writers y Erin Gruwell. Se rueda en exteriores de LA y Long Beach (LA). Producida por Danny DeVito, Michael Schamberg y Stady Sher, se estrena el 5-I-2007 (EEUU).

La acción tiene lugar en Long Beach y alrededores, entre septiembre de 1994 y junio de 1996. Erin Grunwell (Hilary Swank), profesora titulada, de 25 años, accede a su primer trabajo en el "Woodrow Wilson High School", de Long Beach. Es idealista, liberal, novata y testaruda.

El film suma los géneros de drama y crimen. Aborda el tema de las relaciones del maestro y sus alumnos, como lo hicieron antes "Semilla de maldad" (1967), "Mentes peligrosas" (1995), "Escuela de rebeldes" (1989), etc. Lo hace desde una perspectiva cocreta y actual. El centro escolar de referencia se halla inmerso en el proceso de aplicación del programa de integración social del Gobierno de California, basado en la libertad de elección de centro. Tiene por objeto fomentar la convivencia y la integración de las minorías culturales y étnicas del país. En el instituto Wilson coinciden como condiscípulos alumnos de color, blancos, asiáticos e hispanos. El subtexto de la narración se posiciona a favor del programa implantado a partir de comienzos de los 90, pese a dificultades, inercias y resistencias. Explica la importancia que tiene aproximarse a los problemas humanos con una óptica renovadora y experimental, en especial cuando se han de afrontar situaciones nuevas. La repetición de fórmulas y recetas antiguas es poco funcional en un mundo de cambios profundos y rápidos. Defiende la trascendencia de la lectura y la redacción (composición) como instrumentos clave para la formación y educación. En este punto la aportación de la película es ilustrativa y novedosa en relación a las propuestas de films similares anteriores. Explica la necesidad que tienen los jóvenes de sentirse aceptados y respetados y la capacidad de respuesta de los mismos. La narración se presenta construida con corrección y sin concesiones a la artificiosidad y grandilocuencia. En ocasiones puntuales muestra reacciones sentimentalistas.

La música, de Mark Isham ("Crash", P. Haggis, 2004), incluye una partitura breve y clasicista, con emotivos solos pausados de piano y violín. Añade melodías rítmicas de los 90, como las de Tupac Shakur, Cypress Hill, Jeannine Ortega, Montell Jordan y Naughty By Nature. La fotografía, de Jim Denault ("Las muejres de verdad tienen curvas", P. Cardoso, 2002), desarrolla una narración correcta y funcional. Las inserciones de flashes referidos a las historias de los chicos/chicas tiene interés y no son molestos, pese a su abundancia. Buenas interpretaciones, en especial de Swank, acompañada de algunas sobreactuaciones, posiblemente programadas, de Imelda Stauton (Margaret Campbell).