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El reencuentro

Drama. Comedia Tres veteranos de la guerra de Vietnam -Doc (Steve Carell), Sal (Bryan Cranston) y Mueller (Laurence Fishburne)- se reúnen en el año 2003 para enterrar a Larry Jr., el hijo de Doc, que ha muerto en combate en su primer año en la guerra de Iraq. (FILMAFFINITY)
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Críticas 17
Críticas ordenadas por utilidad
26 de abril de 2018
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Richard Linklater y el tiempo, una combinación infalible que ha derivado en varias películas en la filmografía del realizador, que decidió adaptar una novela de Darryl Ponicsan que es la continuación de otra publicada en 1970 y llevada al cine por Hal Ashby en 1973.

Siendo el año 2003, los tres personajes principales, veteranos de la guerra de Vietnam, se reencuentran cuando uno de ellos, Larry (Steve Carell) decide buscarlos al enfrentarse a un momento muy duro en su vida, dando primero con Sal (Bryan Cranston), dueño de un bar al que busca sostener a pesar de su alcoholismo, para juntos después encontrar a Richard (Laurence Fishburne), convertido en pastor de una iglesia, además de estar casado.

Estando ya reunidos, Larry les confiesa el motivo de su reencuentro: la muerte de su único hijo en combate en la guerra de Irak, a quien desea enterrar en su ciudad, por lo que les pide lo acompañen a reclamar el cuerpo y posteriormente a trasladarlo y enterrarlo.

Fiel a su estilo, Linklater arma un relato que contiene toda su personalidad, con tres personajes solidos y personificados por tres grandes actores a los que Linklater les permite la libertad suficiente para crear rápidamente un clima de empatía a pesar de los muchos años que no se ven, conseguido en gran parte por los diálogos, inteligentes y llenos de vida.

Como en muchas de sus películas, los personajes deberán pasar mucho tiempo juntos y sostener largas charlas mientras se trasladan de un lugar a otro, donde además se filtran punzantes críticas al burocratismo estadounidense y a las políticas internacionales de su país, que siempre encuentra motivo para invadir otros países.

El éxito del relato se define en principio por la bien delineada personalidad de cada uno de los personajes, todos diferentes entre sí, que dan forma a una película con una fuerte carga política pero centrada en tres personajes llenos de humanidad, con tres actores en plenitud.

http://tantocine.com/reencuentro-de-richard-linklater/
Quique Mex
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25 de septiembre de 2018
2 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Sin duda la película tiene su interés, no lo dudo. Actores de peso, diálogos ágiles, estructura de road movie y cierto aire antibélico que la hace en parte algo subversiva. Pero está muy lejos del Linklater experimental de BOYHOOD o del Linklater en estado de gracia de ANTES DE AMANECER, ANOCHECER O ATARDECER, una saga redonda. Tampoco es el vitriólico Linklater de BERNIE. En cualquier caso, esperar mucho es lo que hace que la película me parezca menos de, quizás, lo que es realmente. Significar que el final, un tanto desmadejado, como la película entera, por errática (ese puede ser un poco su encanto) y con unos actores que se dejan llevar, siguiendo supongo las instrucciones del director, ese final, decía, está muy edulcorado y desmerece la película llevándola a terrenos casi lacrimógenos. Y esa no creo que era la idea. Creo.
melchorin
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21 de abril de 2022
2 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Me cago en Dios Alabado sea el Señor. El ejército es un montón de mierda pero los hermanos de armas son siempre todo y lo primero, el mismo cielo. No me mientas pero dime que me quieres, a veces las trolas gordas son de lo más buenas, la única salida o el verdadero consuelo. El crápula es un cabrón alcohólico que nada respeta y el más generoso y el santo es el más egoísta y lo contrario u otro. Y así tanto.
Y eso es lo mejor de la película, que deriva, todo gira, hacia la ambigüedad torna se, debilita las fronteras de los personajes y a sus acciones con ellos, niega los extremos purezas o absolutos y las demasiadas solideces y que nunca acaba de ser del todo explícita. Está entre Tape y En el valle de Elah.
Y lo peor es su blandura tibia sosa conservadora* fofa obvia.
Ellos están unidos por un muerto/pecado nefando del pasado, el absurdo de la guerra, y ahora se vuelven a reunir por el mismo cristo motivo, asunto chusco siniestro, sainete aterrador bélico vodevil luctuoso espantoso, juego serio, un error, un malentendido, fueron a morir por/para nada, por la patria, esa entelequia, ese lujo, ese caldo de cultivo, hogar, casa del ser, ese ridículo que en realidad es casi la única manera de estar vivo aunque haya que hacer a a veces más, no solo esa, puñetera cosa.
Los hombres hacen las guerras y las mujeres hacen los hombres que hacen las guerras.
Cranston está sobresaliente y los otros dos menos, sus papeles son más feos y tópicos tal vez y ellos no son el alma de la fiesta tampoco la alegría de la huerta.
La película es bonita y querible pero floja, tontorrona y superficialmente compleja
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
Ferdydurke
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16 de julio de 2019
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Linklater hace un nuevo ejercicio de la vida sin más, sin una gran trama argumental, sin una verdadera propuesta a la hora de contar una historia. Un cronista de la vida que esta vez apoya su película en un trío de actores bastante resultón que da lugar a alguna que otra escena interesante, pero lejos de los guiones e historias de sus otras películas.

Puede ser una película plomiza, y ese acompañamiento casi continuo de Linklater hacia la nada no ayuda, pero no es una mala película. Sin llegar a ser cine de autor como tal es conveniente verla sabiendo a qué vas. No voy a decir que es una mala película, porque a mí me gustó, pero sí que la considero un tanto vacía y demasiado dependiente de que salga esa chispa de la naturalidad que no siempre sale.
NeoJ
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21 de septiembre de 2018
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En 2005 el escritor estadounidense Darryl Ponicsan escribió  una secuela de su anterior novela publicada en 1970 "The Last Detail" que fue llevada a la pantalla en el 73 por Hal Ashby cosechando un puñado de premios y nominaciones entre los que Jack Nicholson se llevó el de mejor actor en Cannes. Ahora  Richard Linklater hace lo propio con la secuela "Last Flag Flyngn", proyecto que venia posponiendo desde el 2006. La sombra de la cinta de Ashby y de sus interpretes es alargada y surgen comparaciones que a mi juicio no vienen al caso. Al igual que para los personajes el tiempo ha pasado y eso marca todas las diferencias. Y es ahí precisamente en el paso del tiempo donde Linklater pone el dedo en la llaga.
Tres marines veteranos de la guerra de Vietnan, han sobrevivido a sus consecuencias físicas y mentales. Uno de ellos,  Doc, ve como la historia se repite y su hijo fallece en la nueva guerra de turno, en este caso la de Irak, otro, Sal, malvive con su placa de metal en la cabeza ahogando sus recuerdos y culpas en el alcohol y el otro, Mueller, a encontrado refugio en la religión convirtiéndose en pastor. Los dos últimos "se la deben" al primero porque se trasegaron sus reservas de morfina y no pudieron evitar el dolor de un compañero caído. Doc pagó el pato y fue a la cárcel. Ahora es Doc, viudo, en una composición notable de Carell quien busca consuelo en los antiguos compañeros de armas para sobrellevar la muerte de su hijo. Los tres iniciaran  un viaje de expiación de su pasado para encontrase de nuevo en un futuro que se ha convertido en un presente que nunca imaginaron.
El auténtico placer de la cinta es acompañar a estos tres supervivientes. La interpretaciones de cada uno de ellos, siempre mesuradas con una excelente dirección de actores nos invita a seguir en su compañía, con su pullas, chascarrillos, anécdotas de veteranos y un profundo amor por una bandera y una patria que nada tienen que ver con los gobiernos de turno que se las apropian utilizándolas para sus propios fines mintiendo y sacrificando a sus ciudadanos en su nombre.  Ellos son los únicos legitimados para ondearla con dignidad y sentido antes de que, como dice la canción de Dylan en los créditos finales. llegue la oscuridad final.

cineziete.wordpress.com
ELZIETE
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