La maldición de Chucky

La verdad que me encanta este género de terror, aunque la película ya no aporte nada nuevo, es cierto que me dará una buena dosis de adrenalina.

Si ya hablamos de la sexta parte, es cierto que ya se espera lo que pasará, más de lo mismo pero con otras caras, pues así es esta película.

Más escenas de tensión, al estilo más clásico, música tensa, sorpresas donde “no te lo esperas”, cine gore, y eso es todo.

La película parece más el cine de un estudiante de cine especializado en terror y en donde se estudia como se hacen escenas de tensión con una buena música, pues así funciona toda la película.

Sin más, sabía lo que esta película me aportaría, y lo he tenido, no me esperaba grandes cosas.

La nostalgia vuelve, solo por ver a Chucky una vez mas en pantalla, un personaje que siempre será odiado o amado por todos. Pero que en nuestra infancia nos hizo pasar malos ratos.

Si es verdad que la nostalgia vuelve al ver el titulo de la película no es lo que uno se espera de verdad. Tener una digna secuela de la 3era parte, un muñeco mas diabólico que nunca, mas muertes, mas agresivo, mas mal hablado, mas tensión de lo que nos tenía acostumbrado. Prefiero no hablar de "La novia de Chucky" y "La semilla de Chucky" de las cuales tengo leves recuerdos. Desde el trailer ya me pareció una parodia, la historia es convencional como cualquier película de terror de bajo presupuesto con su asesino en serie, lo mismo de siempre.

Desde que aparece en pantalla el viejo chucky, decepciona con su cara de "pendejo" con la sonrisa de payaso. Claro que detrás de eso se encuentra el verdadero. A mi parecer se ve muy afeminado. El reparto de actores es pésimo, sin contar a Nica que se deja ver pero cuando se la ve arrastrando y sufriendo es un estrés total. Pero los otros son una constante sensación de nauseas, no se los aguanta y solo se anhela que los maten ya! Cuando sucede es un alivio total. Hasta ese punto era una película floja y mala.
Hasta su media hora final que es cuando vale la pena, develando cierto aspecto de la historia del origen de Chucky, aunque un tanto confuso, mejor se hubiera dado mas minutos a contar algo mas creíble. Y como spoiler ver el final después de los créditos, deja una mejor sensación de una película regular. Quedan las ganas de volver a ver la trilogía que de niños encantaba con ese ambiente de los 80-90s de terror.

Lo peor: La cara de chucky
La hermana de Nica insoportable
Poco tiempo en pantalla de Chucky
Muertes flojas
La ingenuidad de la niña

Lo mejor: La pequeña historia de Charles Lee Ray vinculado a la familia.
Ver nuevamente a Andy.
La sensación de que puede haber otra película mas.

25 años después del estreno de la primera Muñeco Diabólico, Chucky vuelve a producir miedo. La cinta arranca muy deprisa cuando Nica (Fiona Dourif) recibe un extraño paquete por mensajería que contiene un muñeco Good Guy. Por supuesto los crímenes no tardarán en producirse, y es que Chucky siente una especial aversión por las familias felices, y todos estos pintorescos personajes serán sus víctimas perfectas.

En muchos de los asesinatos de Chucky contemplamos homenajes a cintas clásicas del terror. La ambientación también es muy clásica, en una mansión tétrica, con todo lujo de detalles y mucha oscuridad, además, y como no podía ser de otro modo, también les acompaña un fuerte tormenta que hará que la luz de los rayos se cuele a través de las ventanas en numerosas ocasiones.

Durante la película también se nos aporta más información sobre el estrangulador Charles Lee Ray y los hechos que acontecieron cuando fue tiroteado en la juguetería en los años 80. Aparte de numerosas sorpresas que el director Don Mancini nos ha preparado y que hará que no podamos despegarnos de la pantalla hasta que finalicen la totalidad de los créditos.

Una cinta que rescata el espíritu de las primeras cintas de Chucky, sin llegar a superarlas, pero al menos se aprecia bastante interés por parte del director de satisfacer a los fans de la saga y de reabrir de nuevo la historia.

Lo mejor: la escena post créditos.
Lo peor: que no se haya estrenado en cines.

Tras el fracaso que supuso La semilla de Chucky, todo indicaba que la carrera cinematográfica de Chucky había llegado a su fin. Sin embargo, 9 años después Chucky intenta renovarse con esta nueva secuela, donde el bajo presupuesto es más que evidente, porque, si bien es cierto que logra entretener hasta el desenlace, La maldición de Chucky no puede presumir de muchas más virtudes. Todo es cutre hasta desesperar.

Para empezar, la nueva imagen de Chucky le resta terror, carisma y masculinidad. En serio, ¿En qué estaban pensando los estilistas?

Por otro lado, las interpretaciones son, sin excepción, mediocres. Ni si quiera aprueba la actriz principal, Fiona Dourif. No obstante, realiza la mejor actuación de todo el reparto.

Aunque el gore está presente en casi todas las muertes, resulta muy falso, seguramente debido al mal aprovechamiento del bajo presupuesto con el que cuenta la cinta. Asimismo, el orden de las muertes cumple los tópicos del género y estas no rebosan originalidad.

Entre las virtudes, destaca una correcta ambientación, determinados sustos aceptablemente logrados y las auto-referencias, es decir, las escenas donde aparecen Alex Vicent y Jennifer Tilly, quienes interpretan a Andy y Tiffany respectivamente en las anteriores secuelas.

En conclusión, a pesar de que supera a La semilla de Chucky, sólo es recomendable para los fans nostálgicos de la saga.

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Vale, por fin, una secuela a la altura de la primera. Chucky ha vuelto... con la sed de sangre de la original. Esta película asusta, da miedo, entretiene, e hipnotiza. Es genial. Tiene sustos memorables, y Chucky ha vuelto mejor que nunca. Ha vuelto el Chucky de la original. Sangrienta, tensa, inquietante. La sexta entrega de Chucky está destinada a ser la mejor de las secuelas. Si hay una séptima, la esperaré con ansia.
Un 9. ¡Saludos!