Iris

Richard Eyre nos muestra en esta película partes de la vida de Iris Murdoch de la forma más tierna e íntima. Las actuaciones brillantes de Kate Winslet y Judi Dench nos muestran a una Iris por un lado activa, apasionada, intelectual, y por otro lado a una mujer que sufre por no poder terminar una novela, su último trabajo cuando cae víctima del Alzheimer. Por otro lado, Hogh Bonneville encarna al enamorado John Bayley, un profesor de literatura culto y bondadoso enamorado de Iris, quien lucha por ganarse su amor ante los amoríos y amantes de su amada. En cambio Jim Broadbent, el viejo John Bayley, lucha por mantener a su esposa de pie e intenta ayudarla que "las luces no se apaguen".

Yo que, por desgracia, tuve la oportunidad de vivir el Alzheimer bien de cerca, puedo decir que la película trata a la enfermedad con muchísimas seriedad además de con una precisión sutil que pocas veces he visto (vale aclarar que Richard Eyre y Jim Broadbent tuvieron a sus madres víctimas de esta enfemedad).

En cuanto a los climas y a la música, están bien pensados para ambas épocas, ya que se trata de ambientes familiares, con vestuarios simples para dar la idea de humanidad de estos dos escritores. Aunque durante la enfermedad de Iris, se trata de una casa sin cuidado alguno, como si toda la atención se hubiera vuelto a ella sin importar cómo se vea su casa. La música de James Horner nos porporciona un ambiente de violines y piano en menor proporción. Joshua Bell hace los solos y crea un ambiente completamente placentero.

Califico a esta película como "Excelente" porque además ser muy dramática, es tierna y toca el corazón de cualquiera con muchísima facilidad.

Qué dura es! Tremenda, te atrapa, te deja de piedra en el sofá (o donde estés). Qué película tan cruda, claro, como la vida misma. No hay más.

El amor, el acompañamiento, las dudas, una enfermedad, la juventud, la madurez, todos estos temas universales se tocan en Iris. No se hace larga (tampoco habría chicha para más) pero se agradece que no la hayan extendido con tonterías, como en otros casos.

Tengo que decir que aunque la película en sí funciona por muchos motivos, el principal de todos es el reparto. Vaya actores!!!
Judi Dench sabe plasmar perfectamente una mirada, un gesto, un movimiento y es tan real... que duele.
Kate Winslet está jovial, dinámica, divertida... Guapísima hasta con ese corte de pelo. Me encanta, grandísima actriz y aquí lo demuestra una vez más!
Jim Broadbent está genial también, por algo se llevó ese Oscar.

Resumiendo en una palabra: Emocionante.

Parece que en el reciente cine de Hollywood los guionistas andan flojos de ideas y las productoras terminan por recurrir a remakes, superhéroes y biografías de figuras relevantes de la humanidad, llevando sus obras y milagros a la gran pantalla para recoger algún que otro premio por el camino. Si echamos la vista atrás encontramos casos como el de Ray, Monster, Mi Nombre es Harvey Milk, Gandhi, La Dama de Hierro, Lincoln y ésta que nos ocupa, Iris, que recoge la pesadilla sufrida por la escritora, Iris Murdoch, atormentada por la pérdida de memoria que supone una enfermedad degenerativa como el Alzheimer.

Este tipo de películas biográficas gozan del interés del publico, ya que reconstruyen los acontecimientos y obras más importantes en las que tomaron parte los diferentes personajes pero, a su vez, tienen en contra las licencias que se toman los responsables de la película, alejándose de la realidad. Muchas son todo un viaje para el espectador pero, lo cierto, es que aunque algunos de los personajes y situaciones que recrean son interesantes, éstas no alcanzan como para completar la duración de un largometraje, algo que ocurre con Iris. Una prueba de lo mencionado anteriormente, es la corta duración de la película, formada por un esquema inconexo, donde se intercalan vivencias del pasado con el presente, intentando ofrecer vínculos entre el día a día de la pareja en el presente y los inicios de la relación, sin llegar a ofrecer un relato compacto.

La forma en que se presentan los primeros síntomas de la enfermedad y el posterior desarrollo de la misma, se produce con excesiva celeridad y este hecho, hace que la historia pierda en los aspectos dramáticos. Debe suponer una verdadera pesadilla para un escritor perder sus más valiosas herramientas de trabajo, las palabras, y esto no llega a reflejarse con acierto.

La película se vuelca en la relación de pareja, ofreciendo las grietas que, a lo largo de los años, han hecho más fuerte su unión y cómo se apoyan

incondicionalmente a pesar de los problemas que deben afrontar. La falta de unión entre imágenes del pasado y del presente hace que la historia resulte fría y distante, dos secuencias idílicas paseando en bicicleta o bañándose desnudos, no hacen que el idilio llegue al corazón del espectador. Un aspecto notable y que realmente destaca es la calidad interpretativa del reparto. Cuenta con unas soberbias Judi Dench y Kate Winslet, interpretando al mismo personaje en épocas diferentes y la entrañable aportación de Jim Broadbent, que le sirvió para ganar el Oscar a mejor actor de reparto, aunque parece más un reconocimiento a toda su carrera.

Corren rumores de que la relación de la pareja no fue tan estrecha como se intenta presentar en la película y que existía cierta rivalidad literaria e intelectual entre ambos, tema que no se refleja en la película, ofreciendo una versión edulcorada y distorsionada de la realidad, algo habitual en las adaptaciones biográficas que evitan tocar el lado oscuro de los personajes que presentan.

En resumidas cuentas, Iris, como toda producción inglesa, atesora las propiedades habituales de su cine, es correcta, elegante, cuidada y fría, pero no llega a ser completa. Diría que el propio personaje de Iris, hubiera apostado por algo más atrevido y novedoso, alejado de la corrección.

Triste film que se centra en los últimos y dolorosos días de la estupenda escritora irlandesa Iris Murdoch. La maravillosa Judi Dench encarna a la anciana escritora en su lucha contra el Alzheimer como sólo ella sabe hacer. Junto a su pareja en la ficción Jim Broadbent lleva el peso del relato, lo que le resta equilibrio al film porque los primeros años de la relación de ambos apenas tienen tiempo de desarrollarse, aunque nos permite disfrutar de dos grandísimos actores.

Iris es la presencia de Kate Winslet y Judi Dench. Sin más.
Por supuesto, Hugh Bonneville (cuando todavía estaba más cerca del gordito gracioso de Notting Hill que del noble Lord Grantham de Downton abbey) y el siempre excelente Jim Broadbent (ojo a su año 2001, con Moulin Rouge y Iris; vaya dos personajes más dispares y vaya dos interpretaciones maestras nos regaló el británico) acompañan deliciosamente a las dos maestras de la actuación, pero son Dench y Winslet las que llevan todo el peso de un biopic irregular, que combina buenos momentos con otros intrascendentes e incluso algo faltos de ritmo. Richard Eyre logra su propósito, que es contarnos quién fue Iris Murdoch y hacernos saber del incomparable amor que le profesó siempre su esposo a pesar de su difícil personalidad y su enfermedad final, pero fracasa a la hora de que nos apasionemos con la historia de esta mujer incomparable y genial escritora y filósofa. Aun así, un buen biopic digno de verse.

Lo mejor: Los cuatro actores protagonistas y muy especialmente Dench y Winslet.
Lo peor: Es un poco lenta a ratos y tampoco impacta demasiado.