Circunstancia

Yo creo en el cine como arma de denuncia, de hecho es una de las vertientes que más me interesan de la cultura en general; y considero que es en el campo cinematográfico en el que se consiguen mayores cuotas de verismo. Desgraciadamente esta maravillosa cualidad del arte que tanto amámos también juega a favor de la propaganda, y como todos sabemos cuando se intenta vender un producto hay muchas cosas que no son ciertas: están hinchadas, responden a los intereses de la parte inversora o manipulan descaradamente.....

Aprovechando que "el Pisuerga pasa por Valladolid" y que el régimen iraní no cae bien a casi nadie, Maryam Keshavarz y sus promotores se lanzan a tumba abierta, desde E.E.U.U., donde nació la directora, para contarnos las vivencias de dos mujeres que, con la desfachatez de la juventud por bandera, intentan amar y disfrutar en las propias barbas de los integristas musulmanes que intentan controlar sus "excesos occidentales".
Hasta aquí podemos simpatizar con la historia, pero.......

Debut de esta directora de origen americana y criada en Irán, reconocido con el premio del público en el Festival de Sundance.
Ofrece una visión de Teherán muy diferente a la habitual en el cine. Lo hace a través de los jóvenes, Atafeh hija de una acomodada familia y de su amiga con al que comparte una atracción muy difícil de mantener en su país. La llegada del hermano de Atafeh les complicará la vida.
Me ha gustado por la valentía de mostrar la represión que sufren, en especial las mujeres en Irán.
Realizando este film, la directora contó en la rueda de prensa, que no puede volver a su país.
Rodada con actores iranís pero tuvieron que hacerlo en el Líbano, aunque no fue nada fácil.
La vi en la Seminci donde logró el Premio especial del jurado.

Una película cuyo inapelable y elogiable mensaje antiislamista no puede hacer justificar una realización videoclipera, una narración caótica y tediosa, y una estética general hasta hortera.

Defendible, por tanto, por el necesario aperturismo por el que aboga para los países árabes desde el exilio (la directora es iraní pero la producción es norteamericana) y la mierda que denuncia (la prehistórica, inhumana y alienante mentalidad islamista respecto a la homosexualidad, las relaciones humanas y sentimentales en general o la imprescindible libertad individual).

Pero bastante indefendible desde un punto de vista puramente cinematográfico, pese a valores y aciertos puntuales como la buena labor de las bellísimas actrices protagonistas y algunos detalles como todo el rollo de la versión iraní del "Milk" gusvansantiano.

La película es una crítica salina contra aquella revolución iraní que unos jóvenes hace algunas décadas se tiraron a la calle a apoyar en detrimento del "Sha de Persia", dando la bienvenida a Jomeini y al islamismo fundamentalista (¡hay algún islamismo no fundamentalista?) sobre todo por el retroceso de libertad que ha supuesto en ese país y la prohibición misma de muchos de los derechos fundamentales de los seres humanos, principalmente el de los seres humanos mujeres.

Nos cuenta la historia de dos jóvenes mujeres iraníes, en la misma Irán, con tendencias lésbicas, que se aman, que sienten y se expresan con ese temperamento propio de la juventud que consiste en exhibirse saltándose ciertos límites o convencionalismos oficiales. Entonces sentirán sobre sus vidas la represión del régimen iraní, del islamismo y toda esa religiosidad hipócrita y fanática (sobre todo contra las mujeres), "cultura religiosa" con la que el nuevo experto y consejero de estado, José Luis Rodríguez Z., quiso crear una alianza tratándola como civilización tal cual, con el visto bueno de sus ministras Pajín, De la Vega o Aido, todas ellas tan predispuestas siemre contra la derecha en España y tan complacientes con el régimen islámico iraní u otros por el estilo. ¡La madre que las parió!

¡Vean, vean, esta tremenda película y juzguen por sí mismo!

No todo el monte es orégano ni todas las pelis del festival de la Seminci tenían que ser buenas. Circunstancia fue la película que menos me gustó. De hecho, me aburrió bastante. Está muy bien que hable de las costumbres de Irán, de la marginación de las jóvenes iraníes y todo eso, pero es que lo que cuenta no me interesa para nada. Lo único que se salva es que las dos jóvenes protagonistas, en especial una de ellas, están muy buenas, pero por lo demás... para olvidarla cuanto antes.