Maniaco (Maniac)

Con lo feo que es Spinell mete miedo incluso aunque interpretara al abuelo de Heidi.. terror de los 80 con ketchup en abundancia y la espectacular Caroline Munro.. Con la voz de Rogelio Hernandez la verdad que Spinell gana atractivo porque él tiene voz de pito. Munro, que echaría a correr en la vida real si se le acercara Spinell a menos de 10 metros establece una relación con él y la verdad que estás esperando con ansiedad el momento en que se le va a tirar al cuello durante toda la película. Ese es el aspecto más inverosímil porque por lo demás es una cinta que resulta convincente dentro de las limitaciones de su bajo presupuesto.
Cinta de serie B con un Spinell que hace un gran papel y es el principal aliciente de la película junto con la bellísima Munro aunque esté a mucho menor nivel que él. Tal fue el éxito de la pareja que volverían a coincidir dos años más tarde en “The Last Horror film”

Joe Spinell, que en los años 70 había sido actor de reparto de las dos primeras películas de 'El padrino', las dos primeras entregas de 'Rocky' o en 'Taxi driver' pasó al campo de juego en 1980 cuando él decidió producir, en el rango de productor ejecutivo, escribir, fue co-guionista, y protagonizar esta película sobre un asesino en serie de aspecto inquietante, acompañado por la bella Caroline Munro, que fue chica Bond en 'La espía que me amó'.

Si bien a primera vista se podría pensar que es otra película de terror de serie B que pudiera tener su encanto, lo cierto es que así es...pero no del todo. Comparte detalles del terror de serie B como la sangre a borbotones o el gore hecho de la forma más rudimentaria (ojo a la penúltima escena); sin embargo, en su guión y en apartados técnicos como algunos encuadres o el manejo de la cámara se ve un intento por ser algo más que serie B y aportar elegancia al relato.

Joe Spinell también hace mucho por elevar la calidad del filme, con su aspecto amenazante y su interpretación, donde podemos verle no solo como brutal asesino, sino contemplarle más allá del perfil con sus traumas y locuras. Es por esto también que 'Maniac' se esfuerza por ser algo más que serie B.

Quizás no se acuerde mucha gente de esta cinta a la hora de establecer un recopilatorio de lo mejor del cine de terror de los 80, más no hay que negarle que es una obra con cierto atractivo, que con el paso del tiempo se le podría considerar de culto.

Vista dos veces en mi vida, la primera de ellas, en un cine de Bilbao, cuando se estrenó, me pareció esto:

"Francamente mediocre producción de terror, con un Joe Spinelli, actor popular por aquéllos años, encumbrado, por fin, en el protagonismo de una película. Y no lo hace nada mal.
Quizás lo mejor sean los intérpretes, junto con la sensualidad que desprenden todas las actrices que salen en la pantalla.
Pero la historia es tópica y los asesinatos verdaderamente feos (aparte de deplorables, claro).
No me ha gustado".

Ahora, viéndola de nuevo en julio de 2021, por televisión, pues pienso más o menos lo mismo.
Hace un año leí un libro sobre Williamm Lustig (no recuerdo ahora el título...) y comentaban cosas que me dieron muchas ganas de verla de nuevo pues según se desprendía de los artículos, no la había entendido muy bien en su momento. Así que, un poco tarde lo he vuelto a hacer.
Y sí, le he sacado algo de más jugo aunque en esencia pienso lo mismo: que no me gusta mucho que digamos.
Sí que encuentro técnicamente logros como la puesta de escena y la fotografía y escenas bien conseguidas, como la larga de la enfermera, llena de tensión aunque su final sea muy previsible.
Pero en líneas generales me ha vuelto a parecer fea, oscura (sí, a propósito por lo que se puede decir que Lustig acierta en la atmósfera) y con un final que de nuevo me ha vuelto a decepcionar porque no le encuentro sentido alguno.
Supongo que, de nuevo, no la he vuelto a entender. Pero no habrá tercera visión.

https://filmsencajatonta.blogspot.com/

A las 17:00, en la Sala 1 del Proyecciones, se proyectó, tras un breve coloquio con su actriz Caroline Munro (condecorada en esta edición con un premio honorífico) y un vídeo de presentación con la intervención del director William Lustig, se recuperó en pantalla grande el clásico de 1980 Maníaco/Maniac (quién fuese revisitado en 2012 con un muy interesante remake en primera persona protagonizado por Elijah Wood). Frank Zito (un extraordinario Joe Spinell) es un hombre grande y solitario que busca mujeres jóvenes por las calles de Nueva York. Tras reunirse con ellas, las asesina, les arranca el cuero cabelludo y se los clava a los diferentes maniquíes que le rodean con su guarida. Con ellos conversa, y cada uno representa una extensión de su ya fallecida madre, prostituta que le maltrataba de niño y responsable directo de su locura, queriendo ahora recuperarla y no perderla de su compañía en todas las mujeres a las que daña y en los maniquíes femeninos con los que convive. Su planteamiento cambiará cuando se enamore de la fotógrafa Anna, pero un maníaco cómo él nunca podrá amar con normalidad.

De entre las toneladas de slashers producidos a principios de los 80, este es especial por varios motivos. Para empezar, cuenta con un personaje principal que no es un enmascarado sin carácter ni motivaciones, sino un tipo con cierto nivel de complejidad en su comportamiento (dentro de los parámetros del tipo de cine del que estamos hablando) y cuya obsesión homicida tiene unos motivos que iremos descubriendo a lo largo del metraje, un poco al estilo del Norman Bates de "Psicosis" y de algunos giallos setenteros. Y para seguir, tiene para dar vida a ese personaje a un actor con talento (Joe Spinell) que además está totalmente entregado a la causa y se mete en el papel con una convicción que hace al personaje más creíble...y más amenazante. Además de eso, tiene todo lo que una película de terror necesita: momentos de suspense tensos, atmósfera sórdida e inquietante, asesinatos brutales recreados con todo lujo de detalles sangrientos por obra y gracia de los efectos especiales del gran Tom Savini (que aparece en un pequeño papel, como es su costumbre), giros de guión medianamente sorprendentes...y un desenlace que impresiona.

Es un clásico del género.