Si el objetivo de la película era romper con esa idea de que las rubias son tontas, pues no se logro ese objetivo.

Si el objetivo de la película era simplemente hacerte reír, tampoco se logra eso.

Si el objetivo de la película era hacerte pasar un buen rato, la verdad me hizo perder el tiempo.

Si el objetivo de la película era demostrar que la Reese Witherspoon es una buena actriz, la verdad no lo logra y me parece que es una de las actrices más sobrevaloradas de los últimos años.
De lo único que puedo estar seguro es el objetivo de mi crítica: decir que la película es un asco.

Lo peor no es que sea previsible e insultante para la inteligencia del ciudadano corriente. Tampoco lo son las actuaciones forzadas. Ni tan siquiera lo es que esté llena de surrealistas topicazos norteamericanos, ni asímismo el hecho de ser una película machista. Lo peor de todo, sin lugar a dudas, es que aparenta posicionarse contra el machismo y sin embargo destila un aroma machista imposible de ocultar. Hipocresía nivel top, en eso sí que cinco estrellas.

De lejos...el perro fue el mejor actor en esta película, con unos diálogos impresionantes que fueron los mejores de la película. Si no fuera por este chihuahua, la película sería una de las peores en la historia del cine, entre otras muchas que, poniéndole un punto, está muy sobrevalorada...