Haz click aquí para copiar la URL

Big Little LiesSerie

Serie de TV. Drama Serie de TV (2017-2019). 2 temporadas. 14 episodios. Una oscura y misteriosa historia sobre tres madres (Madeline, Celeste y Jane) del norte de California cuyas vidas, aparentemente perfectas, se ven sorprendidas por un asesinato durante un evento para recaudar fondos del colegio de primaria. Celeste (Nicole Kidman) es una mujer con una vida familiar perfecta y un esposo ejemplar. Sin embargo, luchará por conseguir algo que le quita el ... [+]
Críticas 73
Críticas ordenadas por utilidad
escribe tu crítica
3
4 de abril de 2021
9 de 14 usuarios han encontrado esta crítica útil
Un 7,7 a fecha de mi comentario con 19.661 votantes ¿Esto es normal? Pues debe serlo y yo tendré muy mal la percepción de las series mas encumbradas de la historia.

Bien es cierto que las emisiones por capítulos y yo, nos llevamos regular, tirando a peor. Nicole Kidman espectacularmente operada y jovencísima a su medio siglo de vida.

La serie es un vigoroso ejercicio femenino de colegios infantiles e historias en exceso aviesas. Madres e hijos, bobadas tremendamente absurdas y el fondo de un conflicto del que te informan a pinceladas con pequeñas secuencias. NADA Y MENOS.
8
16 de octubre de 2017
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Big Little Lies es una serie que desmonta los clichés de la perfección. Cada personaje, a su manera, tiene su propia historia con sus propios problemas que rompen con una bonita imagen que proyectan de cara al exterior. Y de eso se trata, de aprender a aceptar todo ese bagage, de aprender a luchar con todas esas adversidades y de aprender a meterte en tus propios asuntos, pues en ese pueblecito de Monterrey, California, queda claro que a la gente le gusta opinar de todo sin conocer.
Parte de la premisa de un crimen, en el que víctima y actor se mantienen en secreto hasta el final. Aunque funciona como un juego para que el espectador extraiga conclusiones de todo y se intente adelantar al misterio, puede que no sea lo que más atrape de esta serie, pues las historias de las protagonistas tienen mucha fuerza por sí solas.
Pero hablemos de la realización de Big Little Lies: sorprende su capacidad para hacernos entender todo sin necesidad de palabras, con solo una mirada; al igual que sorprende la confusión en la que nos sumerge, poniéndonos en la mismísima piel de sus personajes, sobre todo de Jane.
Destaquemos esa alternancia del montaje que nos deja unas escenas recurrentes que poco a poco cobrarán sentido. Y alabemos también la importancia del mar como símbolo temático, que parece estar en calma pero siempre termina rompiendo.
Todo es visualmente atractivo: las localizaciones, que aún con todo lo que pasa, transmiten mucha paz. La fotografía, incluso el vestuario es digno de mención. Todo acompañado de unos silencios dramáticos muy bien utilizados que mantienen el ritmo adecuado, y acompañados de una maravillosa banda sonora en los momentos idóneos.

El paradigma de las series está cambiando bastante para acercarse al cine, que hasta ahora había estado en una posición más privilegiada. No es extraño ver nuevas ficciones televisivas rodadas como si de una película se tratara. Ambos medios se están retroalimentando y, así van apareciendo actores y directores provenientes de un medio que aceptan el reto de meterse en otro al que no están tan acostumbrados. Big Little Lies aspira a ser uno de los máximos representantes de este fenómeno:
Como director de todos y cada uno de los capítulos tenemos a Jean-Marc Vallée (Emmy a mejor director), que triunfó en 2013 con la película Dallas Buyers Club. En cuanto al reparto principal, las actrices también han sabido cumplir el reto con grandes resultados, pues Nicole Kidman ha obtenido el Emmy a mejor actriz en una miniserie o telefilm a la vez que su compañera Reese Witherspoon quedó nominada en la misma categoría. Como curiosidad, cabe destacar que estas dos actrices apostaron tan fuerte por este proyecto que ambas fueron productoras.
En cuanto al resto de reparto también destacan Shailene Woodley, que nos deja, en mi opinión, una de sus mejores interpretaciones, y Alexander Skarsgard, veterano en ficciones de HBO y también ganador al Emmy en su categoría mejor actor de reparto en una miniserie o telefilm.

Más valoraciones de otras series y películas en: https://seriesmeblog.wordpress.com/
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La trama que quizás llame más la atención es la historia de Celeste y su marido Perry. Ellos forman una familia "idílica" junto a sus dos hijos gemelos perfectos, pero su relación se nos presenta de una forma muy pero que muy interesante. Nos da una imagen muy fiel de lo que es la violencia doméstica, que no empieza de pronto si no que poco a poco va a más. Nos muestra la evolución, sentimientos de culpabilidad en ambos frentes y, sobre todo, cómo puede repercutir en el entorno, lo que puede ser el detonante para sacar fuerza y cambiar tu vida. (Especial mención para esas charlas con la psicóloga que hace abrir los ojos de manera muy contundente a la realidad)
Si tengo que culpar de algo a esta serie, sería de no desarrollar más el personaje de Bonnie, de no contarnos más sobre su backstory. Tengo la sensación de que este personaje nos hace ponernos más de parte de Madeline solo por el hecho de no conocerla, y es una pena porque es además un personaje muy atractivo que podría haber dado mucho más juego, y, sabiendo todo su pasado, seguramente nos habría ayudado a que el final fuera aún más intenso.
Esta crítica la hago al terminar la primera temporada. Personalmente, no me gusta la idea de una segunda, ya que las tramas principales han quedado resueltas y tengo la impresión de que dañaría el legado de Big Little Lies o, al menos, no cobraría tanta fuerza. No obstante, es cierto que la trama de Madeline no queda bien cerrada, pero dedicar otra temporada para ello no creo que sea lo más necesario.
8
14 de enero de 2018
6 de 8 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los siete capítulos que componen la miniserie de HBO desglosan un fiel retrato de varias personalidades femeninas frente al machismo occidental del siglo XXI, con un asesinato (que no se desvela hasta el final) como nexo dramático. Big Little Lies ganó cinco premios Emmy en la última ceremonia, y bien merecidos.
Cuando uno se sienta a ver Big Little Lies y pasan los primeros minutos, parece que versa sobre un grupo de mujeres de clase alta, que viven en mansiones de lujo con vistas al mar y disfrutan de preciosos atardeceres, mientras beben copas de Romanée-Conti y se preocupan de los que parecen ser “problemas del primer mundo”. El universo opuesto de la vida en Sudán, Burundi o El Congo, donde la preocupación diaria es encontrar comida. Pero, precisamente, el valor de la trama creada por David E. Kelley (Ally McBeal, Boston Legal) y dirigida por Jean-Marc Vallée (Dallas Buyer Club, Alma Salvaje y ganador del Emmy por su labor en la serie), curiosamente dos hombres, es precisamente que nos importen, y mucho, el devenir de cada una de esas féminas, las entendamos y queramos que nos acompañen el mayor tiempo posible.

El test de Bechdel, de 1985, es un método para evaluar si una narración (sea película, serie, obra literaria…) evita la brecha de género. Y es que, pese a que las mujeres son la mitad de la población mundial, no están lo suficientemente representadas en la ficción. Para poder pasar dicho test, debe haber al menos dos personajes femeninos, que en algún momento hablen entre sí y que esa conversación no trate sobre un personaje masculino. Por sorprendente que parezca, muchísimas obras no pasan este sencillo test. Por ejemplo, de los 108 filmes nominados al Oscar a la Mejor Película entre 2000 y 2016, tan solo el 55% superó la prueba. Pero Big Little Lies la pasa con creces, y provoca una comprensión y empatía en el espectador con los personajes femeninos pocas veces vista en la pequeña o la gran pantalla.

La historia comienza con un flashfoward de un nocturno asesinato, luces de la Policía, caras sorprendidas y llantos desconsolados. Durante toda la narración, se intercalará un interrogatorio sobre el delito a diferentes personajes de la ciudad, con la historia de tres protagonistas: Jane, Celeste y Madeline. Jane (Shailene Woodley, conocida por su papel de Beatrice Prior en la trilogía Divergente) es una joven madre soltera que acaba de llegar a la ciudad huyendo de su pasado. Celeste (Nicole Kidman, en lo que a mi parecer es el mejor papel al que se ha enfrentado en su extensa carrera, de ahí su merecido Emmy) es la más elegante y comedida del grupo de amigas, una mujer con una vida familiar teóricamente perfecta y un esposo “ejemplar”. Finalmente, Madeline (Reese Witherspoon, que ha sabido exprimir óptimamente su eterno papel de pija metida en problemas, y aquí le va como anillo al dedo) es una líder nata, amante de la popularidad, pero que debe lidiar con su exmarido y la hija adolescente que comparten. Las tres formarán una alianza en una población llena de hipocresías, máscaras y formalidades sociales. Esta es Monterrey, en California, que casi se puede erigir como un cuarto personaje, con sus preciosos paseos, sus kilométricas playas y lujo, mucho lujo. El reparto lo completan Alexander Skarsgard, como marido de Celeste, y Laura Dern (ambos ganadores del Emmy como mejores actores secundarios), entre otros muchos personajes.

La miniserie está basada en la novela Pequeñas Mentiras, escrita en 2014 por la australiana Liane Moriarty, y tiene ciertas reminiscencias con la serie Mujeres Desesperadas (2004-2012), aunque tratando los temas con una mayor profundidad y madurez, desprendiéndose prácticamente del humor y abordando asuntos tan escabrosos como la violencia machista física y psicológica, en una sociedad de apariencias y falsedades en la cual la sonrisa de las féminas debe ser perenne. Además, es poco habitual encontrarse en Hollywood personajes femeninos de más de treinta años y aquí casi todas sobrepasan la cuarentena, ofreciendo un prisma más maduro y profundo de la mujer actual en la sociedad occidental.

Finalmente, otro de los grandes valores de Big Little Lies es que huye de la victimización, esa corriente que advierte a la mujer de los peligros del hombre (“no dejes que te maltraten”, “protégete contra el acosador”), en lugar de demonizar al agresor. Todo esto queda plasmado en la miniserie, pero no ahondo más para evitar spoilers. Y es que el problema no está en una falda corta o en un maquillaje exuberante, sino en la mirada irrespetuosa y lasciva del que se encuentra delante.

Más críticas en: https://eldebatedehoy.es/autor/gfuentes/
8
1 de mayo de 2017
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
HBO lo vuelve a hacer, una gran producción desde los títulos de crédito, un reparto espectacular, una acertadísima banda sonora, prácticamente todo encaja. Aparentemente unas personas que lo tienen todo para ser felices, no lo son y encima arrastran a su alrededor, matrimonios rotos, violencia.. Una sociedad con un envoltorio muy bonito pero que a poco que rascas aparece la oscuridad
7
22 de mayo de 2017
5 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Apenas 50 años atrás, la ciudad de Monterey en California, servía como marco espectacular para la consagración definitiva del “flower power”. En un festival de tres días en junio de 1967, todo el incipiente movimiento hippy daba a conocer los principios de su base libertaria.
Hoy, Monterey es una ciudad balnearia más del Pacífico, de apenas 30.000 habitantes que se conocen unos a los otros, como si fueran gran familia. Y sirvió para que los capitalistas de la HBO trasladaran esta prolija novela australiana a esas escarpadas tierras.
El contenido poco importa, cuando se trata de pasarla entretenidos durante siete horas de historias tan intensas como la de cualquier vecino tuyo.
Un culebrón más, pero rodeado de las artes de un buen director, los recursos adquiridos por una buena producción, y los melindres bien trabajados de un equipo actoral bien experimentado.
Lo interesante es poder analizar cómo esos contenidos en semejante envase alcanzaron un tratamiento al menos creíble. Es que en este Monterey –tal cual cumple la sentencia de “pueblo chico, infierno grande”- se cocinan dentro de cada casa las vidas más espinosas. En la cual, por supuesto, las mujeres parecieran sacar la parte menos beneficiosa, cuestión que por una razón social deben ocultar a los demás: violencia física y sexual, marginación, desprecio. Lo llamativo es que todo esto lo sufren en función de las figuras masculinas, seres en general marginales en términos de evolución de la intriga.
Y éste es un producto hecho con mujeres como protagonistas excluyentes, que encantará a las señoras que o se verán reflejadas, o tenderán a extender un lazo solidario con estas estrellas de la pantalla destinadas a sufrir.
Lo que planteo más arriba: un culebrón.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow
    Bienvenido al nuevo buscador de FA: permite buscar incluso con errores ortográficos
    hacer búsquedas múltiples (Ej: De Niro Pacino) y búsquedas coloquiales (Ej: Spiderman de Tom Holland)
    Se muestran resultados para
    Sin resultados para