Nowhere
5.6
5,336
Aventuras. Thriller. Drama
Mía es una mujer embarazada que, junto a su marido, huye de un país totalitario escondida en un contenedor marítimo. Tras ser forzosamente separados, deberá luchar por su supervivencia cuando una violenta tormenta la arroja al mar. Sola y a la deriva en mitad del océano, Mía se enfrentará a todo para salvar la vida de su hija y reencontrarse con su pareja.
4 de febrero de 2024
4 de febrero de 2024
3 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Alucino al leer tantas críticas alabando la interpretación de esta actriz en esta película...en mi opinión es una pésima actuación, prácticamente en ningún momento resulta creíble que se encuentre realmente sola, que es lo más esencial a transmitir en una película de supervivencia.
No he visto mucho a Anna Castillo, pero si como por aquí se lee, ésta es una de sus grandes actuaciones...apaga y vámonos. Toda clase de comentarios absurdos y a destiempo estando sola, como relatando con palabras sueltas lo que con su lenguaje no verbal es incapaz de transmitir, un horror.
Al márgen de la actuación de la protagonista, la película tiene su punto interesante para los que somos tragadores de pelis survival.
No he visto mucho a Anna Castillo, pero si como por aquí se lee, ésta es una de sus grandes actuaciones...apaga y vámonos. Toda clase de comentarios absurdos y a destiempo estando sola, como relatando con palabras sueltas lo que con su lenguaje no verbal es incapaz de transmitir, un horror.
Al márgen de la actuación de la protagonista, la película tiene su punto interesante para los que somos tragadores de pelis survival.
4 de mayo de 2024
4 de mayo de 2024
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Estupenda película la que ha conseguido dirigir para Netflix el catalán Albert Pintó, toda una producción en la que dijo haber invertido tres años de su vida y de la que ha recibido críticas muy positivas, siendo todo un éxito de espectadores en la plataforma, llegando a ser la más vista 58 países y siendo la 2ª película más vista en USA. Y es que al director catalán le parece mentira que su trabajo se encuentre disponible para todo el que quiera verlo en 190 países, no sólo en USA sino también en Sudamérica y toda Europa. Decía Pintó que era todo un subidón recibir mensajes de personas que habían v sito su película en India, Canadá o Brasil.
Muy bien realizada, con una actriz inmensa, una Anna Castillo, barcelonesa a la que le llegó el guion de la película de una manera inesperada, ya que ella venía de hacer un cine mucho más íntimo y de poco presupuesto pero que quiso retarse as í misma, ya que este papel de Mía es todo lo contario a lo que ella estaba acostumbrada, una actuación muy física, con gritos, con golpes, para el que la catalana se preparó con cursos de buceo y apnea, ya que quería estar perfecta para lo que le requería su personaje.
Es increíble cómo una actriz de físico tan delicado como Anna Castillo saca garra a la hora de interpretar y admiro cómo la actriz se echa a sus espaldas todo el peso de la película y nos regala una actuación portentosa. Su director decía que sólo la quería a ella y que la considera la mejor actriz española, una Meryl Streep nacional, o sea, palabras mayores.
Muy bien conseguido ese ambiente claustrofóbico dentro de un conteiner flotante en medio del océano, muy buena música acompañando el trayecto de sufrimiento de nuestra protagonista y una película que no se me ha hecho larga ni pesada en ningún momento y que me ha mantenido todo el tiempo expectante por ver cómo Anna Castillo consigue salir adelante de esta trampa mortal en forma de contenedor.
Muy recomendable.
Un saludo,
Tess
Muy bien realizada, con una actriz inmensa, una Anna Castillo, barcelonesa a la que le llegó el guion de la película de una manera inesperada, ya que ella venía de hacer un cine mucho más íntimo y de poco presupuesto pero que quiso retarse as í misma, ya que este papel de Mía es todo lo contario a lo que ella estaba acostumbrada, una actuación muy física, con gritos, con golpes, para el que la catalana se preparó con cursos de buceo y apnea, ya que quería estar perfecta para lo que le requería su personaje.
Es increíble cómo una actriz de físico tan delicado como Anna Castillo saca garra a la hora de interpretar y admiro cómo la actriz se echa a sus espaldas todo el peso de la película y nos regala una actuación portentosa. Su director decía que sólo la quería a ella y que la considera la mejor actriz española, una Meryl Streep nacional, o sea, palabras mayores.
Muy bien conseguido ese ambiente claustrofóbico dentro de un conteiner flotante en medio del océano, muy buena música acompañando el trayecto de sufrimiento de nuestra protagonista y una película que no se me ha hecho larga ni pesada en ningún momento y que me ha mantenido todo el tiempo expectante por ver cómo Anna Castillo consigue salir adelante de esta trampa mortal en forma de contenedor.
Muy recomendable.
Un saludo,
Tess
25 de julio de 2024
25 de julio de 2024
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
"Nowhere” es una película que, irónicamente, debería haberse quedado en ningún lugar. Con un guion tan flojo que hace que una hoja de papel parezca una armadura medieval, esta obra maestra del desastre cinematográfico español se lleva un merecido 3 sobre 10.
La trama, si es que se le puede llamar así, es un revoltijo de clichés y diálogos que harían sonrojar a un estudiante de primer año de cine. Los personajes son tan planos que podrían pasar por figurantes en una película de fondo. Y no hablemos de los efectos especiales, que parecen sacados de la película "Solomone Kane".
El cine español, en general, ha tenido sus altibajos, pero “Nowhere” es un claro ejemplo de cómo se puede tocar fondo. Es como si los productores hubieran decidido que la mediocridad era el objetivo y se hubieran esforzado al máximo para alcanzarlo.
En resumen, “Nowhere” es una película que hace que dos horas de espera en la consulta del dentista parezcan una experiencia emocionante. Si buscas una razón para perder la fe en el cine español, aquí la tienes.
La trama, si es que se le puede llamar así, es un revoltijo de clichés y diálogos que harían sonrojar a un estudiante de primer año de cine. Los personajes son tan planos que podrían pasar por figurantes en una película de fondo. Y no hablemos de los efectos especiales, que parecen sacados de la película "Solomone Kane".
El cine español, en general, ha tenido sus altibajos, pero “Nowhere” es un claro ejemplo de cómo se puede tocar fondo. Es como si los productores hubieran decidido que la mediocridad era el objetivo y se hubieran esforzado al máximo para alcanzarlo.
En resumen, “Nowhere” es una película que hace que dos horas de espera en la consulta del dentista parezcan una experiencia emocionante. Si buscas una razón para perder la fe en el cine español, aquí la tienes.
15 de marzo de 2024
15 de marzo de 2024
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Con ustedes llega la versión española de "Náufrago", dispuesta a ofrecer un calco de la supervivencia por la que tuvo que luchar Tom Hanks, pero cambiando el sexo del protagonista al género femenino y sustituyendo la isla desierta por un container de 15 metros cuadrados. En esencia ofrece lo mismo que aquella película pero estando sensiblemente peor hecha y siendo notablemente más gilipollas y mucho menos creíble, aunque cumple de sobra con su misión principal de entretener al personal. Lo mejor antes de ponerse a ver este film es desconectar en su justa medida las neuronas y ponerlas en modo elemental, porque pretender tomarse en serio las diversas situaciones que se nos muestran a través de la protagonista es ofrecerse en sacrificio a la explosión cerebral en general y a la tomadura de pelo en particular.
No les mentiré. La película me ha gustado y me ha hecho pasar un mal rato (en el buen sentido), pero no la puedo considerar solamente un thriller de los que combina terror y drama porque tiene puntazos y escenas que de tan estúpidamente increíbles resultan hasta cómicas, así que también les confesaré que me he reído en la misma proporción en la que me he acongojado. ¿Esto le resta credibilidad a la situación? En cierta medida sí, pero como sarna con gusto no pica, pues se acoge con cariño y hace que la película se vista de un aire de ligereza que le quita puntos pero hace que sume tiempo en nuestra memoria. De hecho ahí tenemos a Anna Castillo, añadiendo drama al conjunto gracias a un bombo que el guionista quiso incorporar para que todo resultara más bizarro y el curso de los acontecimientos iniciara con ello un viraje hacia lo extravagante y lo insólito. Una suerte de desnudo y ataduras a lo Kunta Kinte pero sustituyendo los latigazos por una espectacular dilatación en bañera para deleite de las detractoras de la anestesia raquídea. Y es que en esta historia no se desperdicia nada y todo se reutiliza en una especie de autofagia por necesidad a la deriva de un catálogo de recursos dignos de haber sido paridos por una mente dispuesta a quedarse con nosotros para soplarnos al oído algo del tipo: "¡Qué!, ¿cómo te has quedado con lo que te he enseñado?".
Existen muchísimos paralelismos con "Náufrago" a todos los niveles, por lo que se puede considerar una copia que hace que el resultado pierda valor porque carece de idea original. A todo se le da un toque metálico y claustrofóbico, pero sigue existiendo la técnica MacGyveriana, la técnica rupestre y la matemática en pos de la esperanza que ya usó Tom Hanks unos cuantos años antes. Habilidades de pesca aquí desarrolladas bajo el olor de la mierda más pura y técnicas de ingeniería naval de andar por casa me hacen recordar al actor estadounidense, pero con mucho menos vello corporal y un peinado, eso sí, a fuerza de bombas nucleares. Hasta el tal Wilson que tanto le dio al náufrago en aquella isla aquí tiene su réplica en formato "mini-yo", aunque les reconoceré que entre tanto llanto y tanto puto móvil de los cojones ha habido momentos de la película que me han recordado a cualquiera de esos días estresantes que casi le llevan a uno a darse de cabezazos contra las paredes de su casa.
Es en definitiva una película que cumple con su cometido de ayudarte a que tu vida sea más disfrutable durante los 100 minutos que dura, pero que a pesar de estar bien hecha, no aporta nada nuevo al panorama cinematográfico. Ratos de angustia, ratos de absurda extravagancia y alguna que otra escena un tanto exasperante para que a partir de ahora, cuando veas un container, te preguntes más que antes qué demonios puede haber ahí dentro. Absténganse claustrofóbicos y agorafóbicos.
LO MEJOR:
- Rodar el 90% de una peli en un espacio tan cerrado y hacerlo bien, tiene mérito.
- Anna Castillo me ha convencido.
- Se pasa en un periquete.
LO PEOR:
- El resultado es un copia y pega demasiado evidente.
- Te deja un regusto a refrito. Está bueno, pero repite.
- Su mundo político-distópico huele a plástico barato.
No les mentiré. La película me ha gustado y me ha hecho pasar un mal rato (en el buen sentido), pero no la puedo considerar solamente un thriller de los que combina terror y drama porque tiene puntazos y escenas que de tan estúpidamente increíbles resultan hasta cómicas, así que también les confesaré que me he reído en la misma proporción en la que me he acongojado. ¿Esto le resta credibilidad a la situación? En cierta medida sí, pero como sarna con gusto no pica, pues se acoge con cariño y hace que la película se vista de un aire de ligereza que le quita puntos pero hace que sume tiempo en nuestra memoria. De hecho ahí tenemos a Anna Castillo, añadiendo drama al conjunto gracias a un bombo que el guionista quiso incorporar para que todo resultara más bizarro y el curso de los acontecimientos iniciara con ello un viraje hacia lo extravagante y lo insólito. Una suerte de desnudo y ataduras a lo Kunta Kinte pero sustituyendo los latigazos por una espectacular dilatación en bañera para deleite de las detractoras de la anestesia raquídea. Y es que en esta historia no se desperdicia nada y todo se reutiliza en una especie de autofagia por necesidad a la deriva de un catálogo de recursos dignos de haber sido paridos por una mente dispuesta a quedarse con nosotros para soplarnos al oído algo del tipo: "¡Qué!, ¿cómo te has quedado con lo que te he enseñado?".
Existen muchísimos paralelismos con "Náufrago" a todos los niveles, por lo que se puede considerar una copia que hace que el resultado pierda valor porque carece de idea original. A todo se le da un toque metálico y claustrofóbico, pero sigue existiendo la técnica MacGyveriana, la técnica rupestre y la matemática en pos de la esperanza que ya usó Tom Hanks unos cuantos años antes. Habilidades de pesca aquí desarrolladas bajo el olor de la mierda más pura y técnicas de ingeniería naval de andar por casa me hacen recordar al actor estadounidense, pero con mucho menos vello corporal y un peinado, eso sí, a fuerza de bombas nucleares. Hasta el tal Wilson que tanto le dio al náufrago en aquella isla aquí tiene su réplica en formato "mini-yo", aunque les reconoceré que entre tanto llanto y tanto puto móvil de los cojones ha habido momentos de la película que me han recordado a cualquiera de esos días estresantes que casi le llevan a uno a darse de cabezazos contra las paredes de su casa.
Es en definitiva una película que cumple con su cometido de ayudarte a que tu vida sea más disfrutable durante los 100 minutos que dura, pero que a pesar de estar bien hecha, no aporta nada nuevo al panorama cinematográfico. Ratos de angustia, ratos de absurda extravagancia y alguna que otra escena un tanto exasperante para que a partir de ahora, cuando veas un container, te preguntes más que antes qué demonios puede haber ahí dentro. Absténganse claustrofóbicos y agorafóbicos.
LO MEJOR:
- Rodar el 90% de una peli en un espacio tan cerrado y hacerlo bien, tiene mérito.
- Anna Castillo me ha convencido.
- Se pasa en un periquete.
LO PEOR:
- El resultado es un copia y pega demasiado evidente.
- Te deja un regusto a refrito. Está bueno, pero repite.
- Su mundo político-distópico huele a plástico barato.
26 de octubre de 2024
26 de octubre de 2024
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Dirigida por Albert Pintó. Escrita por Indiana Lista, Ernest Riera y Miguel Ruz. En un futuro distópico una mujer embarazada queda sola y a la deriva en un conteiner en medio del océano.
Por Nicolás Bianchi
Nowhere cuenta con una presentación al estilo de Children of men (2006). En un futuro distópico pero no muy lejano la sociedad española está gobernada por una dictadura marcial. Además, hay escasez total de recursos, por lo que la población es sometida a razzias y depuraciones. En este contexto, la pareja formada por la protagonista Mia (Anna Castillo) y Nico (Tamar Novas), busca una vía de escape.
Mia está embarazada y, por este motivo, está especialmente en la mira del gobierno. Los personajes ven, junto a los espectadores, que las fuerzas del orden capturan niños y mujeres embarazadas para introducirlos en camiones jaula que van no sabemos adónde (pero es seguro que no es un buen lugar). La película no cuenta este mundo con precisión sino que se centra en la urgencia de la huida.
Entonces, Mia y Nico gastan todo su dinero para que unos mafiosos los transporten en contenedores que van en barco hacia un destino que no se menciona pero que se supone que es mejor. De alguna manera, esto presenta el drama inmigratorio europeo actual a través de un espejo invertido. En este caso, no hay inmigrantes desesperados por llegar al país sino emigrantes que buscan escapar para sobrevivir.
Después de una serie de sucesos, Mia queda sola en un conteiner que, para peor, se cae del barco que lo transporta. Entonces, la película se convierte en un relato de supervivencia de un personaje que está encerrado. Mia es, al mismo tiempo, una prisionera y una náufraga. Todas las situaciones que debe enfrentar la protagonista en este rectángulo de metal que está flotando en medio del océano están pensadas y contadas con cierto ingenio.
Uno de los principales problemas de Mia es su embarazo. También debe comer, ya que las provisiones se acaban pronto. Además, necesita resolver varios problemas para que su conteiner no se hunda en el agua. Nowhere es una película algo despareja. Su parte central, que es este relato de supervivencia, es intrigante y está bien narrado. Ahora bien, no está del todo bien logrado el resto, o sea el marco de esta historia.
En definitiva, la película es una suerte de odisea de una madre que lucha por sobrevivir. ¿Esa trama tan universal y poco particular es lo que en definitiva quería contar el film? No está del todo claro. Otro elemento que introduce el film son algunos estallidos explícitos de violencia, al estilo de la saga El hoyo o de la exitosa película La mesita del comedor (2022). Hay una buena idea en Nowhere, que es un relato de supervivencia contado con pericia. Pero le falta lo demás, lo que sostiene y da sentido a ese desarrollo central.
Está en Netflix. Contacto: [email protected]
Por Nicolás Bianchi
Nowhere cuenta con una presentación al estilo de Children of men (2006). En un futuro distópico pero no muy lejano la sociedad española está gobernada por una dictadura marcial. Además, hay escasez total de recursos, por lo que la población es sometida a razzias y depuraciones. En este contexto, la pareja formada por la protagonista Mia (Anna Castillo) y Nico (Tamar Novas), busca una vía de escape.
Mia está embarazada y, por este motivo, está especialmente en la mira del gobierno. Los personajes ven, junto a los espectadores, que las fuerzas del orden capturan niños y mujeres embarazadas para introducirlos en camiones jaula que van no sabemos adónde (pero es seguro que no es un buen lugar). La película no cuenta este mundo con precisión sino que se centra en la urgencia de la huida.
Entonces, Mia y Nico gastan todo su dinero para que unos mafiosos los transporten en contenedores que van en barco hacia un destino que no se menciona pero que se supone que es mejor. De alguna manera, esto presenta el drama inmigratorio europeo actual a través de un espejo invertido. En este caso, no hay inmigrantes desesperados por llegar al país sino emigrantes que buscan escapar para sobrevivir.
Después de una serie de sucesos, Mia queda sola en un conteiner que, para peor, se cae del barco que lo transporta. Entonces, la película se convierte en un relato de supervivencia de un personaje que está encerrado. Mia es, al mismo tiempo, una prisionera y una náufraga. Todas las situaciones que debe enfrentar la protagonista en este rectángulo de metal que está flotando en medio del océano están pensadas y contadas con cierto ingenio.
Uno de los principales problemas de Mia es su embarazo. También debe comer, ya que las provisiones se acaban pronto. Además, necesita resolver varios problemas para que su conteiner no se hunda en el agua. Nowhere es una película algo despareja. Su parte central, que es este relato de supervivencia, es intrigante y está bien narrado. Ahora bien, no está del todo bien logrado el resto, o sea el marco de esta historia.
En definitiva, la película es una suerte de odisea de una madre que lucha por sobrevivir. ¿Esa trama tan universal y poco particular es lo que en definitiva quería contar el film? No está del todo claro. Otro elemento que introduce el film son algunos estallidos explícitos de violencia, al estilo de la saga El hoyo o de la exitosa película La mesita del comedor (2022). Hay una buena idea en Nowhere, que es un relato de supervivencia contado con pericia. Pero le falta lo demás, lo que sostiene y da sentido a ese desarrollo central.
Está en Netflix. Contacto: [email protected]
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