Sólo sé que la ví hace 10 años, en versión original (con subtítulos en francés) y que mi nivel de francés era bastante básico (llevaba un año estudiándolo)...actualmente casi no recuerdo el argumento, en su día me enteré de lo que me enteré y la ví en 3 trozos en 3 días (la vía en clases de francés).
Sólo sé...que me encantó. Que estaba deseando que pasara el día para poder verla. Que no me acuerdo casi de qué iba (sólo del argumento general). Y que recuerdo la película y su título, después de 10 años.
Y sólo sé que, recordar una película de la que casi no te acuerdas tantos años después, teniendo en cuenta Hollywood y la cantidad de películas que se hacen, es todo un logro.

Antes de ver la película sabía que iba a ser una película rara, paranoica y original; pero superó mis espectativas. He de reconocer, por supuesto, que disfruté con ella: me reí y me entretuvo la hora y media que dura, pero también he de reconocer que no me la esperaba así.
Impresiona bastante por la originalidad que posee desde el primer instante y por el guión tan extraño. Pero es una película que a poca gente le gustará, dado el cine que están acostumbrados a ver. Hay que reconocer que tampoco es un peliculón que vaya a pasar a la historia ni nada de eso, pero es bastante interesante de ver aunque sea una vez.

Sin duda es una película curiosa, con un humor negro que ambienta unos sucesos vagamente normales: en realidad nunca llega a sorprenderte del todo el hecho de que se coman a amigos, familiares...
Veo en la metodología una delicadeza, cura por los detalles y las acciones que se suceden son simples y a la vez llenas de peculiaridades: eleva lo "rutinario" a "singular", como vemos en el caso de la pobre mujer que medio pierde la cabeza (uno de los ejemplos, quizás el más característico).

El primer minuto -dónde tiene lugar la escena que sale en portada-, es uno de los mejores incios que he visto jamás (los ojos del protagonista hablan solos). Intrépido.

La ambientación cromática, típica en los films de Jeunet, crea un aura de enseuño: parece que nada sea del todo real.

Surrealista fábula atemporal teñida de humor negro en un ambiente lúgubre y entre neblinas, en la que se recupera la esencia antropomórfica y canibalista del homo sapiens. Con personajes peculiares, es una película que crea buen rollo a quien la ve. Perdón a los superexpertos en cine que critican su pobre guión y no sé que más gilipolleces. Si fuera una película dónde lo importante fuera la historia, Jeunet no hubiera hecho esta película, hubiera rodado "Lo que el viento se llevó" o "Titanic", pero como quería rodar una fábula fantasiosa en una atmósfera mágica como sólo él sabe crear, pues por eso hizo "Delicatessen". A los guionistas de "Aquí no hay quien viva" no les debió parecer tan pobre la historia, porque la plagiaron literalmente y les dió para 5 temporadas.

Resumiendo: Los fetiches en cine que no la vean que no tiene historia, mejor que vean una de Garci, dónde va a parar. Para los que quieran pasar un muy buen rato y echar unas risas en un ambiente de lujo, que la vean.

- Síiii, descuartízalo!
- ¿Te crees que vamos de safari, puta?
- Eh! qué es mi mujer.
- Aquí no hay hombres ni mujeres, sólo voluntarios.

Parte del lema de los de abajo, habla de que la generosidad es necesidad, mientras los de arriba planean a quién se van a comer primero. Es una historia que imprime calidad y limpieza a las escenas y personajes, dónde se logra transmitir muy bien las necesidades, responsabilidades y preocupaciones de cada uno. Disfruté mucho la forma en que se expresa la imagen junto al sonido. Viva la música y el maiz...