Tiene cierta gracia que la película parezca el prólogo para una saga de dudosa viabilidad (sic).

En la continua escapada de Alex (número 4 para los amigos), él y su protector van a caer en un pueblecito perdido de la mano de Dios, donde (oh, casualidad!) vive la chica de sus sueños, por la que tendrá que pelearse con su antiguo novio, el cabecilla chulapo del lugar (casualidad también: hijo del sheriff) y defender al pobre pagafantas del instituto (obsesionado por los ovnis, vaya, vaya) que para eso Alex es el chico guapo, cachas y de buen corazón recién llegado.
Escena típica de feria, pelea también típica con los amigos camorristas del exnovio, flirteo suave con la chica (antes animadora que se ha descubierto “profunda” y amante de la fotografía ¿?),muestreo de bíceps surferos de Pettyfer (el niño lo merece y así las adolescentes pueden histerizarse a gusto) y descubrimiento de éste ante la familia modélica-americana que al final lo que desea es un hogar (americano, claro).
¿Qué les parece? Original argumento,¿verdad? Se nota que se lo han currado.
Pues no, no estamos viendo ni Footlose, ni Crepúsculo, ni Starman, ni Pettyfer es Jeff Bridges …pero la película se parece mucho a éstas y a otros dos millones por el estilo. Sobre todo (y es una puntualización que debo hacer llegados a este punto) porque el buen Alex no es sino un extraterrestre que ha venido con otros pocos a la tierra escapando de sus perseguidores y, de paso, para conocer a la CHICA a la que amará para siempre jamás (así son ellos; para siempre, como en Disney).
Y como el chico es un tanto lerdo, y a pesar de los consejos de su protector (qué jaquecas debe de tener el pobre hombre)va dando la nota por donde pasa (peleas, le sacan fotos, sale en internet ...) está claro que los malos-malísimos (y tontos, debo señalar) los hallarán al final, dando rienda suelta a escenas de acción más o menos amenas y mucho mejor llevadas que en la ya nombrada Crepúsculo, aprovechando que el niño es también medio mutante y empieza a desarrollar sus poderes (¡anda, cómo en X Men!).
Lo mejor: la conclusión a la que llegan con esfuerzo al final de la película (no me extraña que los malos-tontos se hayan cepillado a su planeta de lumbreras)y es que es mejor que se junten lo pocos que quedan dispersos por el mundo, porque así son más fuertes y pueden defendernos mejor de los malosos que ahora querrán conquistar también la tierra.
Primer capítulo: ya han localizado a la número 6 (cañera y con moto).
A película por número, supongo. Ustedes cuenten.
Con dos coj… Y que viva el cine.