Buena película de Clark, realista y directa. Esto no es un capítulo de Sensación de vivir sino la vida en directo de una parte de los jóvenes americanos en la época que les ha tocado vivir, además, basada en hechos reales.
Los actores dan la talla, en especial Bijou Phillips y Brad Renfro, que se muestran naturales en la interpretación.

El cine de Larry Clark es lo que tiene, que te gusta o no te gusta, pero a nadie deja indiferente.

Como anécdota, contar que Brad Renfro fue detenido un día antes de iniciar el rodaje acusado de robar un yate.

La historia en sí no tiene mucho misterio: unos colgaos matan a un amigo acosador. Están los drogatas, el tonto, la putilla, el flipado, el acosado,... No falta ni uno. Ante semejante comando, la cosa no puede salir muy bien.
El sexo está presente en toda la película pero de forma sensual, con bonitas escenas de desnudos. Que esté basado en hechos reales le da el punto morboso.

Lo peor de la película es que los personajes resultan poco creíbles: el acosado no se ve muy hecho polvo (la escena donde llora y se le cae la baba es patética), los drogatas se ven demasiado pasados de vuelta como para cometer un crimen (o conducir a altas velocidades), con la novia del acosado pasa lo contrario, que no se ve suficientemente colgada como para lanzarse al crimen, y el flipado (el "gangster") es un tirillas ¿Quién va a buscar a un canijo para cometer un asesinato?

Aún así me ha gustado por su originalidad, fuera de convencionalismos.

Larry Clark no se da a las concesiones. Es crudo, violento, gusta a los críticos y a los chavales que devoran divx hollywoodienses y jackass. Con la excusa de llevar al cine un caso real (?), Clark vuelve a su tema favorito: jovenes hedonistas, vacíos y terribles, sin moral ni futuro; y esta vez no hay clase baja a la que culpar, o al menos no es tan evidente. Parece menos un documental que Kids, y te ríes más que en aquella. Me ha gustado más, pero no es una peli de culto, sino un telefilm que seguró que nunca verás en la sobremesa.

La típica película de Larry Clark: adolescentes, sexo, drogas, violencia. Solo que ahora adapta un hecho real aunque más que adaptar, el término adecuado sería “exagerar”.

Por que a Clark le encanta la polémica barata, le encanta las escenas de sexo gratuitas y le encantan los diálogos de besugos. En Kids funcionaba pero repetirlo en cada película suele dar resultados dispares. Una película basada en éste caso de asesinato podría haber sido verdaderamente notable en vez de un intento corriente de dramatizar y exagerar los hechos.

De verdad, éste director debería dejar de hacer siempre la misma película y pensar en otros géneros.

... es un documental adolescente que trata bastantes temas de interés actual pese a la antiguedad de la película.
Pues sí, la he descargado en "PelículasYonkis", guiado por unas magníficas críticas y la acabo de terminar de ver, ¡vamos! que tengo fresquitas las imágenes, que por cierto, me han impactado bastante.
Como he dicho antes, este film no ha de tratarse como una película, sino más bien como un documental que habla sobre la vida de un grupo de jóvenes que no sigue unas pautas saludables de vida. La historia gira alrededor de unos jóvenes que poco a poco, y sea dicho, con poca lucidez también, deciden "asesinar" a uno de sus "amigos" ya que este no para de amedrentar, abusar y mofarse de ellos. Tengo 15 años, no tengo porqué ocultarlo y me gustaría confesar una cosa: finales (spoiler) como el que se muestran en este tipo de películas para mí son muy impactantes.
Muy recomendada si os ha dado la "picá" de ver los reales problemas de la adolescencia.