Fernando Meirelles consigue una película redonda. Un excelente trhiller y una aún mejor historia de amor de una gran emoticidad.
La denuncia de la abusiva situación de injusticia que sufre África en la actualidad, propiciada en buena medida por los intereses económicos de las potencias mundiales, resulta especialmente creible por el acierto en elegir para el rodaje de la película escenarios naturales en Kenia, país donde transcurre buena parte de la acción, metiéndonos de llenos en la turbamulta y el caos de aquel país. El uso, que no abuso, de la cámara en mano consigue acercar aún más al espectador a esa realidad, sumergiéndote totalmente en la historia.
Ese mismo recurso, además de unos acertados primerísimos planos, le sirve al director para hacernos partícipes de la extraordinaria historia de amor de los dos protagonistas, insuperables Ralph Fiennes en su papel de diplomático inglés, aficionado a la jardinería, y Rachel Weisz, como activista pro derechos humanos, enamorados de principio a fin.
Imprescindible.

No diré que son las mejores actuaciones, los mejores planos ni la mejor película que haya visto en mi vida, pero sí diré que hacía falta una crítica como ésta, véase en forma documental o, como ocurre, en película.

No entraré a valorar si hay que ser más o menos inteligente para comprender qué hay de verdad en lo que se denuncia y que hay de exageración alarmista, pero era necesario mostrarlo y luego que cada uno saque sus conclusiones.

No me gusta que me manipulen contándome una farsa aprovechando mi lado sensible, pero este no es el caso, coíncido tanto en el contenido como en el continente del mensaje que se quiere transmitir... y menos me gusta la gente que nada contra corriente simplemente por desmarcarse de la opinión general y sin ningún argumento sólido para hacerlo, simplemente por hacerse el interesante y tachar a los demás de ovejas de un rebaño engañado.

Recomiendo que se vea esta película y que luego se piense en ella, no desde lo que te digan, sino desde lo que sientas!

Hacía mucho tiempo que no veía una película tan buena y con tanto contenido. Cuando terminé de verla me quedé reflexionando

Es una de las mejores películas que he visto ultimamente. Mezcla a la perfección la dureza de la vida real, con una historia de amor preciosa. Despierta sentimientos encontrados. Es ideal para ver en pareja.

Un inteligente thriller de acción para adultos que no cae en los tópicos del cine actual.
Ralph Finnes y Rachel Weisz están soberbios.
Meirelles no consigue una nueva "Ciudad de Dios" pero se queda a las puertas.
Una agradable sorpresa!