Argumento:

El mundo del boxeo está tan devaluado que el campeón Mason Dixon no encuentra un rival a su altura. Han pasado 30 años desde que a Rocky Balboa (Stallone), un hombre sin futuro, se le presentó la oportunidad de boxear y enfrentarse contra el gran campeón Apollo Creed. El coraje y perseverancia de Rocky, tanto en la vida como en el ring, alimentó las esperanzas de millones de personas. Ahora, ya retirado, se pasa las tardes contando viejas historias a los clientes del Adrian's, el restaurante que lleva el nombre de su esposa, por la que todavía guarda un silencioso luto. Apenas ve a su hijo (Milo Ventimiglia), que está demasiado centrado en su propia vida. El paso del tiempo y los golpes recibidos lo han hecho más humilde y lo han envejecido, pero en el fondo aún sigue siendo un luchador. (FILMAFFINITY)

Juicio:

Stallone obra el milagro y consigue traernos de vuelta al mejor Rocky de todos los anteriores aún con el paso del tiempo. Al mismísimo nivel de la primera gracias a un precioso guión, a un Rocky que vuelve a ser él mismo y a un ritmo entretenido y emocionante hasta llegar al mejor combate filmado en la saga. Dentro de sus límites, es un final fantástico que llega en un momento perfecto.

Aún tardío y ya explorado, cuando se merece un aplauso hay que darlo. “Rocky Balboa” consigue lo imposible para muchos: ser la mejor película de Rocky. Eso bien puede ser casi imposible pues el esquema de la primera ya está explorado y será siempre el de la primera. Pero esta entrega, que es casi un remake actualizado de aquella, incluye las dos principales bazas que a la primera o le faltaban o debía potenciar: energía en su ritmo y emoción al verdadero límite, no sólo al final. Ello y un Stallone mejor que nunca en lo que mejor se le da hacer si se lo propone hacen de “Balboa” una inesperadamente buena película sobre boxeo y sueños de superación, una emocionante secuela y la mejor película de la saga. Con honores.

Me parece buena esta película aunque no le di los 7 puntos porque creo que lo justo son 6 porque esta trama al contrario de las 5 anteriores se ve muy forzada, menos creíble y por consiguiente de menor calidad. ¿A quien se le puede ocurrir que un hombre de más de 60 años pelee contra un tipo joven en plenitud de condiciones físicas y mentales.

Ademas esa excusa que ponen para "igualar" la pelea final me resultó tan mediocre que me fastidió bastante. A pesar de todo esto negativo que acabo de contar, la película tiene muchas cosas buenas, es muy nostalgica, Stallone sigue bordando su personaje al igual que su cuñado que sigue igual de desagradable como siempre y el personaje del hijo de Rocky es bastante irritante.

Y la escena final estuvo bien, fue bonita y conmovedora.

Esta es la despedida oficial de Rocky del ring como protagonista. Y no podría haber dado una despedida mejor, dentro de lo que se esperaba. Stallone resucita a uno de sus personajes estrella y lo devuelve al gran nivel con el que empezó. La historia puede tener sus limitaciones, pero está dotada de una emoción capaz de mover a las lágrimas.

Después de 16 años, el Potro Italiano volvió, y lo hizo a lo grande. Este film se parece bastante a los dos primeros de la saga. Y es que consigue transmitir la misma emoción y el mismo entusiasmo que ambos transmitieron en su día.
Aquí vemos a Rocky Balboa viviendo una nueva vida. Ahora es viudo por la triste muerte de Adrian, que falleció de cáncer 4 años atrás, y dirige un restaurante italiano que se llama igual que su fallecida esposa. Stallone brilla con su Rocky más melancólico y dramático. Su dificultad para poder pasar página es más que evidente. A eso hay que sumarle el problema con su hijo, que vive bajo la sombra de su padre.
Y luego está el campeón actual, un boxeador despreciado por la falta de rivales de nivel en la actualidad.
El film cuenta con muchos alicientes: la trama es muy interesante y (todos) los personajes están muy, muy bien desarrollados.
Rocky da muchos mensajes, pues muchos discursos y frases que dice son para grabarlos a fuego porque son muy ciertos. No solo es un gran profesional, sino que también es una excelente persona que podría ser perfectamente el mejor amigo de cualquiera.
Las escenas del entrenamiento son legendarias y motivan a cualquiera.
El combate es de lo más emocionante. Todos sabemos que Balboa tiene sus años y que, por tanto, su cuerpo ha envejecido, pero su mente es la misma. Yo no pude sentarme mientras veía como Balboa le plantaba cara al campeón. Ver a Rocky en pie hasta el final hace que nos entren ganas de aplaudirle. ¡Gracias, CAMPEÓN!.