La chispa de la vida
2011 

5.5
10,935
Drama. Comedia
Roberto (José Mota) es un publicista en paro que alcanzó el éxito cuando se le ocurrió un famoso eslogan: "Coca-Cola, la chispa de la vida". Ahora es un hombre desesperado que, intentando recordar los días felices, regresa al hotel donde pasó la luna de miel con su mujer (Salma Hayek). Sin embargo, en lugar del hotel, lo que encuentra es un museo levantado en torno al teatro romano de la ciudad. Mientras pasea por las ruinas, sufre un ... [+]
19 de enero de 2012
19 de enero de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Al principio todo es muy divertido. Sólo con ver las ya conocidas cara que pone José Mota ya pasas un buen rato. Después te sorprenderá el paulatino giro que va dando la historia.
Aunque hay detalles que seguro que no contentan a todos, saldrás del cine dándole vueltas a la cabeza y con un recuerdo consolidado de la trama. Sólo por ello merece la pena. Además aporta muy buenos valores. Yo la pondría en los colegios para combatir esta epidemia de superficialidad que se está extendiendo por el país.
Aunque hay detalles que seguro que no contentan a todos, saldrás del cine dándole vueltas a la cabeza y con un recuerdo consolidado de la trama. Sólo por ello merece la pena. Además aporta muy buenos valores. Yo la pondría en los colegios para combatir esta epidemia de superficialidad que se está extendiendo por el país.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Existe un clara falta de profesionalidad en los personajes con oficios. Con una soldadora hubieran cortado el hierro derritiéndolo en menos de 1 minuto. Sin vibraciones y con muchísima más seguridad, pero ningún personaje lo plantea. Supongo que será para poder continuar con la trama.
23 de enero de 2012
23 de enero de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
El otro día fuí al cine a ver esta película y no iba muy motivado la verdad, soy un gran servidor de Alex de la Iglesia, sobre todo con sui apoteósica "El día de la bestia" y "Balada triste de Trompeta", pero aún así no iba con muchas expectativas. Al salir del cine dije bueno la peli no esta mal, no le llega a los pies a los antiguos títulos de Alex pero no está mal, dentro de lo que cabe; buena crítica de la situación actual y de como un hombre desesperado es capaz de vender su alma al diablo, grandes interpretaciones de Jose mota y Salma hayek, sobre todo Salma
30 de enero de 2012
30 de enero de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Los temas de problemas sociales dirigidos por alguien de renombre y protagonizados por actores que se toman en serio su profesión suelen ser buenas combinaciones en nuestro cine. Además, en esta película, le sumamos una puesta en escena impecable y un ambientillo tipo Hollywood.
21 de mayo de 2012
21 de mayo de 2012
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Últimamente Álex de la Iglesia se empeña en realizar películas arriesgadas, y no porque toquen temas candentes y ambiguos, sino porque son películas que aportan poco o nada al panorama actual, y con este director de por medio, es casi decir que desaprovecha talento.
¿Qué queda de ese director capaz de construir humor negro inconfundible desde lo más común firmando "La comunidad" o "Crimen ferpecto"? Sin duda ha debido de diluirse para llegar a rodar una película como ésta en la que todo es grotesco y repetitivo. Ya no parece quedar nada del director que nos deslumbró con "El día de la bestia" por ver de una manera diferente aquello que nos rodea.
Ahora ese toque diferencial ha derivado en una película comercial, un drama convencional en el que chirrían unos protagonistas perdidos entre lo que deberían ser y lo que finalmente son. Mota es poco creíble, uno solo se le imagina en su show televisivo y cuesta (mucho) identificarle con la tragedia que le toca vivir; y Hayek, con poco peso interpretativo para la que se supone una estrella, es solo un títere que va de un lado a otro aguantando al resto de secundarios. Nunca se la ve cómoda.
Si es cierto que, para enganchar, contiene la dosis justa de actualidad que huele a crítica social, pero se difumina porque quiere tocar demasiados palos (la fama efímera, el paro, la manera que tiene el ser humano de sacar provecho de la desgracia ajena, la prensa, los políticos oportunistas...) muy alejados entre sí.
Este llamamiento final es para De la Iglesia: vuelve, porque te necesitamos para que nos ofrezcas tu visión particular de lo que nos rodea, pero si vas a volver para presentarnos algo estilo "Balada triste de trompeta", por favor, piénsalo un poco y lee más guiones antes de rodar.
¿Qué queda de ese director capaz de construir humor negro inconfundible desde lo más común firmando "La comunidad" o "Crimen ferpecto"? Sin duda ha debido de diluirse para llegar a rodar una película como ésta en la que todo es grotesco y repetitivo. Ya no parece quedar nada del director que nos deslumbró con "El día de la bestia" por ver de una manera diferente aquello que nos rodea.
Ahora ese toque diferencial ha derivado en una película comercial, un drama convencional en el que chirrían unos protagonistas perdidos entre lo que deberían ser y lo que finalmente son. Mota es poco creíble, uno solo se le imagina en su show televisivo y cuesta (mucho) identificarle con la tragedia que le toca vivir; y Hayek, con poco peso interpretativo para la que se supone una estrella, es solo un títere que va de un lado a otro aguantando al resto de secundarios. Nunca se la ve cómoda.
Si es cierto que, para enganchar, contiene la dosis justa de actualidad que huele a crítica social, pero se difumina porque quiere tocar demasiados palos (la fama efímera, el paro, la manera que tiene el ser humano de sacar provecho de la desgracia ajena, la prensa, los políticos oportunistas...) muy alejados entre sí.
Este llamamiento final es para De la Iglesia: vuelve, porque te necesitamos para que nos ofrezcas tu visión particular de lo que nos rodea, pero si vas a volver para presentarnos algo estilo "Balada triste de trompeta", por favor, piénsalo un poco y lee más guiones antes de rodar.
12 de agosto de 2013
12 de agosto de 2013
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Enfadado con la prensa.
Enfadado con el morbo de la sociedad. Del chismorreo.
Enfadado con los políticos.
Enfadado con un país de aprovechados, donde lo único que cuenta es el interés propio.
Enfadado con el egoísmo y del todo para mi, sin importar como.
Enfadado con la chulería del que lo tiene todo.
Enfadado del desamparo de la gente con escrupulos.
Alex de la Iglesia está muy cabreado. Y lo mejor, es que le dejan desahogarse y explicarlo.
Lleva dos películas muy muy cabreado (’’Balada triste de trompeta’’, ’’La chispa de la vida’’) y a mi personalmente me encanta.
Lo malo: un poco hipócrita metiendo a Carolina Bang dado el mensaje de la película, ¿Pero que otra cosa puede hacer?
Enfadado con el morbo de la sociedad. Del chismorreo.
Enfadado con los políticos.
Enfadado con un país de aprovechados, donde lo único que cuenta es el interés propio.
Enfadado con el egoísmo y del todo para mi, sin importar como.
Enfadado con la chulería del que lo tiene todo.
Enfadado del desamparo de la gente con escrupulos.
Alex de la Iglesia está muy cabreado. Y lo mejor, es que le dejan desahogarse y explicarlo.
Lleva dos películas muy muy cabreado (’’Balada triste de trompeta’’, ’’La chispa de la vida’’) y a mi personalmente me encanta.
Lo malo: un poco hipócrita metiendo a Carolina Bang dado el mensaje de la película, ¿Pero que otra cosa puede hacer?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here