Conocerás al hombre de tus sueños
2010 

5.9
21,861
Drama. Comedia
La historia sigue a un par de matrimonios, Alfie (Anthony Hopkins) y Helena (Gemma Jones), y su hija Sally (Naomi Watts) y su marido Roy (Josh Brolin), mientras sus pasiones, ambiciones y ansiedades les llevan a meterse en problemas y a perder la cabeza. A pesar de los intentos de estos personajes por esquivar sus problemas con quimeras y planes impracticables, sus esfuerzos sólo conducen a la angustia, la irracionalidad y el peligro.
10 de septiembre de 2010
10 de septiembre de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
He leído pacientemente muchas de las críticas de los amigos de FA. Como siempre, hay de todo. Y hay algunas que son verdaderas joyas. El cine, como cualquier arte, está sujeto a los gustos del espectador.
Está claro que Woody Allen es un hombre de cine total. Y también es un genio. Nadie lo discute. Clint Eastwood, también. Creo que son los dos últimos hombres de cine que quedan.
Cuando en los noventa acudía a la cita anual con Woody siempre pensaba que antes o después, la echaría de menos. Tenía la convicción que acudiría a esa cita mientras Woody Allen estuviese vivo. Y, en efecto, así es. Tengo la cita con él excepto cuando hizo "Richy, Josefina y Badalona", por razones evidentes. Y después de ver "Conocerás al hombre de tus sueños", me he dado cuenta que he cambiado. Y ya echo de menos la cita con Woody. Creo que me he estado engañando los últimos cinco o seis años, como hacen algunos de los personajes de Woody, para no enfrentarme a la realidad. Tengo la sensación de que ya no veo una película de Allen. Y yo, cuando voy al cine a ver una película de Woody Allen, quiero ver la misma película siempre. Y eso ya no ocurre. Voy con pereza. Sin fe. Por eso, a los que aún defienden lo maravillosas que son las últimas películas de Allen y están encantados con ellas, les tengo una envidia tremenda.
¿Dónde está el "efecto Allen" en sus últimas películas? Woody, por favor, si lees esto, regresa pronto a Nueva York. Deja de una vez Gran Bretaña y esa fotografía amarillenta tan horrorosa. ¿No te das cuenta que te está pasando lo que pronosticaste en tu película "Un final made in Hollywood"?
Por favor, vuelve a Nueva York y enséñanos la belleza del paso de las estaciones como hiciste en "Todos dicen I love you". ¿Sigue aquel detective hipnotizando a Helen Hunt cuando le susurra "Madagascar"? ¿Se sigue persiguiendo a sí mismo? ¿Se ha vuelto a desenfocar Robin Williams? ¿Cómo está el hijo que tuvo Woody con Mira Sorvino? ¿Martin Landau sigue sin arrepentirse? ¿Sigue la hermana de Hannah tonteando con su marido? Cuéntame Woody, por favor, qué le pasa a la gente que vive en Manhattan.
Está claro que Woody Allen es un hombre de cine total. Y también es un genio. Nadie lo discute. Clint Eastwood, también. Creo que son los dos últimos hombres de cine que quedan.
Cuando en los noventa acudía a la cita anual con Woody siempre pensaba que antes o después, la echaría de menos. Tenía la convicción que acudiría a esa cita mientras Woody Allen estuviese vivo. Y, en efecto, así es. Tengo la cita con él excepto cuando hizo "Richy, Josefina y Badalona", por razones evidentes. Y después de ver "Conocerás al hombre de tus sueños", me he dado cuenta que he cambiado. Y ya echo de menos la cita con Woody. Creo que me he estado engañando los últimos cinco o seis años, como hacen algunos de los personajes de Woody, para no enfrentarme a la realidad. Tengo la sensación de que ya no veo una película de Allen. Y yo, cuando voy al cine a ver una película de Woody Allen, quiero ver la misma película siempre. Y eso ya no ocurre. Voy con pereza. Sin fe. Por eso, a los que aún defienden lo maravillosas que son las últimas películas de Allen y están encantados con ellas, les tengo una envidia tremenda.
¿Dónde está el "efecto Allen" en sus últimas películas? Woody, por favor, si lees esto, regresa pronto a Nueva York. Deja de una vez Gran Bretaña y esa fotografía amarillenta tan horrorosa. ¿No te das cuenta que te está pasando lo que pronosticaste en tu película "Un final made in Hollywood"?
Por favor, vuelve a Nueva York y enséñanos la belleza del paso de las estaciones como hiciste en "Todos dicen I love you". ¿Sigue aquel detective hipnotizando a Helen Hunt cuando le susurra "Madagascar"? ¿Se sigue persiguiendo a sí mismo? ¿Se ha vuelto a desenfocar Robin Williams? ¿Cómo está el hijo que tuvo Woody con Mira Sorvino? ¿Martin Landau sigue sin arrepentirse? ¿Sigue la hermana de Hannah tonteando con su marido? Cuéntame Woody, por favor, qué le pasa a la gente que vive en Manhattan.
1 de octubre de 2010
1 de octubre de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Está claro que el gran Woody hace películas como quien hace calcetines, ahora bien, como quien hace calcetines de la mejor seda del mundo.
"Conocerás" es una película interesante, mucho más seria de lo que parece, pero aunque sea de seda, le falta un diseño un poco más pulido, porque la película no está cerrada.
Además, Banderas está realmente mal.
Pero es lo nuevo de Woody, hay que verla!
"Conocerás" es una película interesante, mucho más seria de lo que parece, pero aunque sea de seda, le falta un diseño un poco más pulido, porque la película no está cerrada.
Además, Banderas está realmente mal.
Pero es lo nuevo de Woody, hay que verla!
2 de octubre de 2010
2 de octubre de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Lo bueno de las películas de Woody Allen ( excepto muy contandas excepciones ) es que sabes que no te vas a aburrir ya que utiliza su pintoresco sentido del humor para sazonar temáticas ciertamente vulgares y repetidas, lo malo es que nunca saldrás fascinado.
Pasable no más.
Pasable no más.
4 de octubre de 2010
4 de octubre de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
Conocerás al hombre de tus sueños tiene mayor fondo de lo que pueda parecer, podría definirse como una reinterpretación de Shakespeare en el s. XXI. Los personajes viven sus vidas movidos por las pasiones humanas, la ambición, el amor, el deseo, etc., siendo estas pasiones el motor de una vida que sin ellas parece carecer de sentido, ya que al final lo que saben es "you will meet a tall dark stranger" (la muerte).
Las soluciones ante la verdad que es la muerte son variadas en el s. XXI, tener un hijo que contenga tus genes, pasar a la posteridad con un buen trabajo o incluso el ocultismo. En este contexto Allen aprovecha para hacer una radiografía de nuestra psique actúal, la importancia de la belleza, mantenerse joven, ideas de reencarnación.
Respecto al trabajo técnico, no estoy conforme con las opiniones de que Allen ha descuidado su trabajo como director, utiliza el recurso de la mirada a camara del actor, cuando lo que expresa es su verdadera forma de ser y juega con los espejos en sus planos. También me parecen buenas todas las actuaciones contribuyendo a que todas las historias sean buenas.
Las soluciones ante la verdad que es la muerte son variadas en el s. XXI, tener un hijo que contenga tus genes, pasar a la posteridad con un buen trabajo o incluso el ocultismo. En este contexto Allen aprovecha para hacer una radiografía de nuestra psique actúal, la importancia de la belleza, mantenerse joven, ideas de reencarnación.
Respecto al trabajo técnico, no estoy conforme con las opiniones de que Allen ha descuidado su trabajo como director, utiliza el recurso de la mirada a camara del actor, cuando lo que expresa es su verdadera forma de ser y juega con los espejos en sus planos. También me parecen buenas todas las actuaciones contribuyendo a que todas las historias sean buenas.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Es una verdadera tragedia shakesperiana aunque no se mueran, solo el personaje de Gemma Jones, Helena es feliz al final del film
8 de octubre de 2010
8 de octubre de 2010
1 de 1 usuarios han encontrado esta crítica útil
La película de esas que ahora se llaman corales, pues trata muchos temas a la vez, con un montón de personajes pero que no profundiza en ninguno de ellos. En esta ocasión, la trama se centra en los problemas matrimoniales que parecen heredarse de generación en generación. Una de las parejas, ya madura, descubre que después de años de aguantarse no son tan compatibles como pensaban. El hombre, en el clásico canto del cisne, cree que todavía es joven para realizar sus sueños (algunos húmedos, al liarse con una explosiva joven, muchísimos años menor que él). Su esposa, despechada, busca el consuelo en una falsa pitonisa (perdón por el pleonasmo), cuyos augurios condicionarán su vida a partir de ese momento. Por otro lado, tenemos a la hija del matrimonio anterior, con similares problemas existenciales y maritales; a una vecina indecisa, a un galerista conquistador…
El director no quiere profundizar mínimamente en la psicología de los personajes, que quedan delineados de manera muy superficial y tópica. Esto provoca que los personajes parezcan distantes y que sus problemas no parezcan importantes, por lo que asistimos a un desfile de situaciones, mínimamente enlazadas, con escasa gracia y una grave falta de acidez y mala hostia. Los diálogos, uno de los puntos fuertes del director, adolecen del mismo problema: les falta chispa, agudeza, trascendencia.
A pesar de todo lo dicho, el conjunto general se deja ver, pero es que a Allen se le pide algo más que una película rodada en modo piloto automático.
En cuanto a los actores y actrices, cumplen más o menos su papel. Para mi, destaca Josh Brolin, en un papel de escritor frustrado y la belleza de Freida Pinto (Slumdog Millionaire). Antonio Banderas tiene una corta, pero interesante participación.
Técnicamente, está rodada de forma muy elegante, con la cámara siempre en su sitio. Londres se ve estupendo, pero sin llegar a ser un panfleto turístico. Los créditos, como siempre, sosos y antiguos.
Para gente poco exigente.
Muy personal: nueva decepción de un director que admiro, pero que últimamente parece más preocupado por encontrar financiación que por dirigir.
Lo mejor: la elección de los actores; algún diálogo; Londres.
Lo peor: en realidad, la película cuenta muy poquita cosa; personajes planos, poco definidos.
El director no quiere profundizar mínimamente en la psicología de los personajes, que quedan delineados de manera muy superficial y tópica. Esto provoca que los personajes parezcan distantes y que sus problemas no parezcan importantes, por lo que asistimos a un desfile de situaciones, mínimamente enlazadas, con escasa gracia y una grave falta de acidez y mala hostia. Los diálogos, uno de los puntos fuertes del director, adolecen del mismo problema: les falta chispa, agudeza, trascendencia.
A pesar de todo lo dicho, el conjunto general se deja ver, pero es que a Allen se le pide algo más que una película rodada en modo piloto automático.
En cuanto a los actores y actrices, cumplen más o menos su papel. Para mi, destaca Josh Brolin, en un papel de escritor frustrado y la belleza de Freida Pinto (Slumdog Millionaire). Antonio Banderas tiene una corta, pero interesante participación.
Técnicamente, está rodada de forma muy elegante, con la cámara siempre en su sitio. Londres se ve estupendo, pero sin llegar a ser un panfleto turístico. Los créditos, como siempre, sosos y antiguos.
Para gente poco exigente.
Muy personal: nueva decepción de un director que admiro, pero que últimamente parece más preocupado por encontrar financiación que por dirigir.
Lo mejor: la elección de los actores; algún diálogo; Londres.
Lo peor: en realidad, la película cuenta muy poquita cosa; personajes planos, poco definidos.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
La escena: Josh Brolin espía a su vecina desde la ventana de su habitación, todos los días el mismo ritual. Un día puede espíar a la que fue su mujer desde la ventana de su vecina. ¿Por qué siempre valoramos más lo que no tenemos?
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here