Seré breve: lo más curioso de la película, intencionado o no, es esa “biografía oculta” de P. L. Travers. Antes de ver la película crees que vas a recordar a Mary Poppins, y, conforme la película avanza, te das cuenta de que has equivocado de novela. Estás viendo “A Tree Grows In Brooklynn”.

Por lo demás, el ejercicio de sentarte delante de una pantalla a ver cómo se ablanda de manera más o menos lacrimógena un carácter brusco lo hemos hecho demasiadas veces. En eso, la película es “una más”; nada nuevo bajo el sol. Pero las interpretaciones de Hanks, Thompson, y -para mí- sobre todo Giamatti no sólo salvan la cinta, sino que la convierten en una de las mejores producciones de 2013.

Cuando pensé en una película de Disney, no pensé exactamente este tipo de películas... sin embargo: ¡Valió la pena!


Tom Hanks es, muchas veces, sinónimo de una buena interpretación en la gran pantalla y, en su gran medida, de un guión a la altura de las expectativas. Este caso es uno de esos.

Fuente: http://www.cinezalco.com.ar/2014/01/critica-de-cine-el-sueno-de-walt-disney.html

Este magnífico actor se mete en la piel del mítico Walt Disney para contarnos la promesa que lo llevó a perseguir a la autora de "Mary Poppins" durante 20 años para conseguir los derechos de esa hermosa novela.
Emma Thompson se hace cargo maravillosamente del papel de P.L Travers, esta complicada autora, cuyo pasado la acompaña y le complica cada día. Nos mostrará, desde sus obsesiones, el desagrado que sufrió durante la adaptación de la novela y nos enternecerá con esa historia que arrastra.
Un profundo drama con momentos divertidos, con grandes actuaciones y con una historia que atrapará a todos aquellos que admiramos y disfrutamos de la bella Mary Poppins y de sus hermosas canciones. Que llegue rápido el viento del este...

"Al encuentro de Mr. Banks" es una película verdaderamente encantadora y conmovedora que ofrece una mirada emotiva detrás de escena de la creación de una de las películas más queridas de todos los tiempos, "Mary Poppins". Esta película biográfica combina una narrativa conmovedora, actuaciones excepcionales y una atención meticulosa a los detalles para crear una experiencia cinematográfica conmovedora.

La película se centra en la historia de la autora de los libros de Mary Poppins, P.L. Travers, interpretada de manera magistral por Emma Thompson. La actuación de Thompson es el corazón de la película, ya que captura la complejidad y la determinación de Travers mientras lucha por mantener el control de su amada creación en la adaptación cinematográfica de Walt Disney, interpretado de manera igualmente brillante por Tom Hanks.

La narrativa se desarrolla en dos líneas de tiempo: el proceso de producción de "Mary Poppins" en los estudios Disney y los recuerdos de la infancia de Travers en Australia. Estas dos líneas argumentales se entrelazan de manera experta para arrojar luz sobre los traumas y las experiencias personales que influenciaron la creación de los libros de Mary Poppins.

"Al encuentro de Mr. Banks" es una película que celebra la magia del cine y la creatividad artística mientras explora temas profundos, como el poder de la imaginación y la importancia de reconciliarse con el pasado. La dirección de John Lee Hancock logra un equilibrio perfecto entre la nostalgia y la emoción, y la película cuenta con una banda sonora encantadora que complementa la historia de manera hermosa.

En resumen, "Al encuentro de Mr. Banks" es una película que cautiva a través de su historia emotiva y sus actuaciones fenomenales. Es un homenaje conmovedor a la creatividad, la perseverancia y la capacidad de sanar a través del arte. Tanto los fanáticos de "Mary Poppins" como aquellos que buscan una película conmovedora sobre la creatividad y la superación personal encontrarán en esta película una joya que disfrutarán enormemente.

Quiénes amen a "Mary Poppins", como servidor, película que vi decenas de veces en mi infancia porque mi madre así lo quiso, también amarán a "Al encuentro de Mr. Banks". Incluso aquellos marcianos que no hayan visto la película original, también podrán disfrutar de esta, tal es su virtud.

Es un filme de corte clásico en el que se hallan grandes momentos cómicos, ofrecidos por la estrambótica personalidad de la protagonista, así como otros de grandísima intensidad emocional, pues la película rebosa humanidad en cada diálogo y en cada escena.

Es Emma Thompson la que aglutina todas las virtudes de "Al encuentro de Mr. Banks", pues su personaje, absolutamente fabuloso, y también en su caracterización, es la base de todo. Tan divertida y tan conmovedora, confieso que se me cayeron un par de lágrimas en su escena final. La actriz está mejor que nunca, y eso es decir mucho. Su ausencia en los Oscar es uno de los desaires más graves que se recuerdan.

Tom Hanks, ya bastante pasado de moda en estos papeles, poco tiene que ofrecer más allá de ser el Tom Hanks bonachón. A mi me aburre bastante. Por su parte, Colin Farrell sí aporta interés en su trama, pese a que esta goce de menos fuerza. Mucha menos, pues frente a esa británica estirada lidiando con los americanos en el desierto abrasador de Los Ángeles, poco hay que hacer.

Lo dicho, una película amena, amable, divertida y absolutamente emocionante.

Entretenida. Correcta y elegante. Educada y convencional.
Psicologismo simplificador y reduccionista como explicación del motor y meollo creativo. El pasado como causa, cual martillo pilón, que provoca indefectiblemente el comportamiento futuro; no hay lugar a las complejidades, aristas, contradicciones, retorcimientos y demás encrucijadas.
Kitsch y edulcorada.
Duelo interpretativo de dos pesos pesados. El tópico del escritor/a gruñon/a de buen corazón encarnado por la absorbente y dominadora interpretación de Emma Thompson. Hanks (cumple pero no brilla) queda reducido a una caricatura bonachona, demasiado dulce y poco verosímil del gran Walt.
Se ve con agrado pero no deja huella porque está hecha para no molestar, para recrear de forma políticamente correcta unos hechos reales. No faltan los indispensables ingredientes sensibleros, véase especialmente el recurso obvio y grosero de la hija del chófer, contenido pero innecesario (azúcar sobre azúcar). La película acaba cayendo en lo que ella misma insinúa, en una orgía de pasteles y dulces.
Acabada pero sin terminar. Se cierra cinematográficamente, se lastra/mutila creativa y verazmente.
Llena de academicismo amable, agradable y mortecino.
Pasen y... la siguiente, por favor.