Es un clásico del humor absurdo español. No tiene ni pies ni cabeza, y sin embargo hay momentos que parecen muy sacados de la realidad. Y es que algunas borracheras son de alucinar. Los diálogos, brutales, yo los utilizo en mi vida cotidiana.

En su día los críticos se ensañaron de mala manera con Bajo Ulloa. Venía de firmar dos peliculones serios, de enfadarse con medio mundo, de insultar (a veces merecidamente) a casi todos los críticos de cine... y entonces se le ocurre rodar una gamberrada como Airbag. Cine de puro entretenimiento que conectó con el público (llegó a ser la peli más taquillera de la historia... hasta que llegó otra peli del mismo tono: Torrente).
Hoy, muchos años después, se deja ver. Y se sigue apreciando que Juanma sabe rodar como pocos las escenas de acción. Manquiña sobresale como secundario en un papel (interpretación) memorable.
Una lástima que aquí se acabara la carrera seria de Juanma.

Dirigida por Juanma Bajo Ulloa "Airbag" fue uno de los grandes e incomprensibles éxitos de taquilla del cine español de los noventa, una comedia poco original rodada con mucho ritmo que intenta ser una crítica contra la sociedad española de la época pero que se queda a medio camino cayendo en un humor fácil y chabacano demasiado visto donde solo destaca la memorable aportación cómica de Manuel Manquiña. La película nos cuenta como un hombre a punto de casarse pierde su anillo de compromiso en un prostíbulo y como en su intento por recuperarlo se irá cruzando con un montón de mafiosos y problemas que le complicarán mucho el tema. Probablemente por buscar una explicación la principal causa del éxito de esta película presupuesto a parte habría que buscarlo en el amplio reparto de caras conocidas que van apareciendo por el metraje, algo que puso de moda Santiago Segura (que también aparece) con sus películas de Torrente, con la diferencia de que en su caso si tenían gracia.
En resumen, a pesar de algunos gags divertidos es una de las películas mas sobrevaloradas del cine español, una comedia vulgar y olvidable.

Airbag es, sobre todo, un barullo de proporciones bíblicas, muy divertido, pero que puede dar dolor de cabeza si no se entra. Quizá lo que más me llamó la atención es la cantidad de elementos que entran en juego y lo alambicado de la trama, lo que provoca que sea un mejunje argumental de campeonato, y al mismo tiempo, que esta trama en exceso retorcida, maride con gags de pedos, de farlopa y de putas.

Eché en falta, por sorprendente que parezca, más humor, pues a veces sabe resolver una trama con un chiste chusco, y otras veces se enquista con escenas lentas, grotescas, mal conducidas y en exceso sobre explicadas, como en la escena del primer puticlub, o el plateamiento completo, que dura casi 40 minutos, demasiado para una comedia vulgar y desenfadada.

Así que si no la has visto, no la quites enseguida y dale una oportunidad, porque estás enfrente de una de los milagros más sorprendentes que ha parido el cine español.

Ésta, forma parte de ese grupo de películas que tienden a recordarse en las cenas de amigos e invitar a alzar el vaso parafraseando alguna célebre cita.
Pues bien, reconociendo a un Manquiña difícil de ignorar, sólo puedo distanciarme del brindis y beber en silencio por una película que me resultaría muy fácil de olvidar sino fuese por el incondicional amor popular que la acompaña.