Caso 39
5.3
11,676
Terror. Thriller
Emily Jenkins (Renée Zellweger) es trabajadora de servicios sociales. Emily piensa que en su campo lo ha visto todo... hasta que un día conoce a su nuevo y más misterioso caso, el que hace el número 39: una problemática niña maltratada de 10 años llamada Lilith Sullivan (Jodelle Ferland). Confirma sus peores miedos cuando los padres de Lilith intentan matar a la niña, su única hija. Emily la salva y decide llevársela con ella, hasta que ... [+]
10 de abril de 2010
10 de abril de 2010
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
La idea de este film en si no es mala, pero considero que el primer fallo radica en que el tema de por si ya está muy usado. El mismo nombre de la infante protagonista deja dilucidar su naturaleza. El nombre de Lilith deriva del hebreo Lil, que significa noche, por lo que Lilith vendría a significar la nocturna, término que nos transmite la idea de oscuridad o ser de oscuridad. Ahora que el film parece no transmitir del todo lo que pretende, a pesar de poseer verdaderos momentos de tensión. Espero que no haya sido realizado con el fin de promover las adopciones de niños traumatizados. A muchos gustará, pero a otros más caprichosos como yo les parecerá una película de suficiente, en mi caso 5.6, el cual por defecto redondeo a 6 en mi votación.
24 de marzo de 2013
24 de marzo de 2013
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
En las bajas épocas de Renée Zellwegger -después del 2003 su carrera cayó estrepitosamente-, la conocida actriz aceptó ser la protagonista de un film de terror corriente. Sabemos que de estos se hacen copias y copias por año, sabemos que algunas son aceptables y otras son una verdadera cagada, bueno esta película pertenece al segundo grupo.
Da la sensación que desde "El exorcista" (William Friedkin, 1973), o tal vez desde antes, hay una gran tendencia y fascinación por colocar a los niños como perversas encarnaciones del mismísimo Diablo. El asunto es que algunas veces esta premisa se utiliza de manera correcta y acertada, en otros casos no tanto, y después tenemos a "Caso 39". Todo es tan obvio y predecible que hasta en la sinopsis nos dicen lo que va a pasar, pero lo peor es que Alvart intenta que no "descubramos" las intensiones de la niña como si no supiéramos cuáles son. El más que previsible cambio de actitud de la niña da vergüenza ajena.
El slogan de la cinta podría ser "vence tu miedo", premisa también utilizada antes, donde la protagonista (Zellwegger) debe vencer a su propio pasado y los miedos que esconde, para poder terminar con la amenaza. Estos no son los únicos clichés, también tenemos todos los chiches técnicos tantas veces usados que ya hasta debe haber un manual que todos siguen sin preguntar. Tenemos los típicos sustos efectistas, puertas que se abren, soniditos raros, etc.; tenemos la típica banda sonora pedorra que realza de forma obvia los momentos de tensión, exagerando hasta lo imposible; un montaje radical; y primeros planos malévolos como la giradita de la niña en una silla, algo con estilo "El exorcista" sólo que aquí gira el cuerpo completo no sólo el cuello.
Agreguen también a la receta unos diálogos con falsa profundidad, y una explicación sencillísima de los comportamientos de los personajes, y tendrán el resultado de "Caso 39". En serio, ¿insectos en el oído? ¿el miedo que pasa por el teléfono?, ¿no les suena a "Vigila quien llama"? Es que hasta en eso le falta originalidad al film.
Por cierto, destaquemos que nunca una escena como la del horno me hizo reír tanto. Ese es otro detalle: las risas involuntarias. En el caso de la escena del súper mega profundo horno, me quedé esperando que alguien me avisara que era un sueño, una alucinación o algo parecido que estaba teniendo la Zellwegger o la propia niña, pero resulta que todo era real, la niña de 1 metro y medio cabía dentro de un horno.
Lo mejor: pese a lo absurda que me resultara la actitud de los personajes y la resolución de la escena en si misma, no negaré que será lo único que recuerde de esta cinta dentro de unos meses, así que me quedo con "el súper horno".
Lo peor: ni siquiera asusta. Yo suelo perdonar los clichés, las inverosimilitudes y las incongruencias, pero no puedo perdonar que un film de terror no asuste.
Da la sensación que desde "El exorcista" (William Friedkin, 1973), o tal vez desde antes, hay una gran tendencia y fascinación por colocar a los niños como perversas encarnaciones del mismísimo Diablo. El asunto es que algunas veces esta premisa se utiliza de manera correcta y acertada, en otros casos no tanto, y después tenemos a "Caso 39". Todo es tan obvio y predecible que hasta en la sinopsis nos dicen lo que va a pasar, pero lo peor es que Alvart intenta que no "descubramos" las intensiones de la niña como si no supiéramos cuáles son. El más que previsible cambio de actitud de la niña da vergüenza ajena.
El slogan de la cinta podría ser "vence tu miedo", premisa también utilizada antes, donde la protagonista (Zellwegger) debe vencer a su propio pasado y los miedos que esconde, para poder terminar con la amenaza. Estos no son los únicos clichés, también tenemos todos los chiches técnicos tantas veces usados que ya hasta debe haber un manual que todos siguen sin preguntar. Tenemos los típicos sustos efectistas, puertas que se abren, soniditos raros, etc.; tenemos la típica banda sonora pedorra que realza de forma obvia los momentos de tensión, exagerando hasta lo imposible; un montaje radical; y primeros planos malévolos como la giradita de la niña en una silla, algo con estilo "El exorcista" sólo que aquí gira el cuerpo completo no sólo el cuello.
Agreguen también a la receta unos diálogos con falsa profundidad, y una explicación sencillísima de los comportamientos de los personajes, y tendrán el resultado de "Caso 39". En serio, ¿insectos en el oído? ¿el miedo que pasa por el teléfono?, ¿no les suena a "Vigila quien llama"? Es que hasta en eso le falta originalidad al film.
Por cierto, destaquemos que nunca una escena como la del horno me hizo reír tanto. Ese es otro detalle: las risas involuntarias. En el caso de la escena del súper mega profundo horno, me quedé esperando que alguien me avisara que era un sueño, una alucinación o algo parecido que estaba teniendo la Zellwegger o la propia niña, pero resulta que todo era real, la niña de 1 metro y medio cabía dentro de un horno.
Lo mejor: pese a lo absurda que me resultara la actitud de los personajes y la resolución de la escena en si misma, no negaré que será lo único que recuerde de esta cinta dentro de unos meses, así que me quedo con "el súper horno".
Lo peor: ni siquiera asusta. Yo suelo perdonar los clichés, las inverosimilitudes y las incongruencias, pero no puedo perdonar que un film de terror no asuste.
19 de abril de 2014
19 de abril de 2014
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Zellweger tiene cara de buena persona. De las que le pides la hora por la calle o a la que te acercas en un curso el primer día para hablar con ella, antes de que el grupo de turno la putee por ser buena gente. Siempre me cayó bien hasta que vi su amargamiento parejíl en "El diario de Bridget Jones"(2001). Por esa razón me sentí mal cuando se hizo cargo de la niña ésta que está realmente bien interpretada por la pequeña actriz Jodelle Ferland. No destripo la película si digo que la que al principio parece tan buena niña y que ha sufrido tanto hacia el final se torna en una hijaputa de cuidado. Yo empecé a ver la peli sin ninguna referencia de ella. Ni siquiera sabía que existía, prácticamente tenía perdida en el universo cinéfilo a Renée Zellweger desde Bridget Jones, y me llevé una sorpresa al ver a la criatura mutar tanto. Pero cualquiera que se meta en esta ficha de la web antes de verla, se dará cuenta de que aquí la menos pardilla de todas es la niña que como oí decir a mi padre cuando la veía: "Tiene cara de pánfila, pero solo tiene eso, la cara".
Interesante película que al principio parece una cosa y luego se va descubriendo la verdad escondida. Es el primer film que he visto de Bradley Cooper y me ha gustado. Me lo creo como joven psiquiatra enamorado de la Zellweger y realmente lo pasó mal cuando la niña puso definitivamente su vista en él. Y sí es verdad; se parece al presentador de Zapeando, pero este tio es más guapo.
Recomendable.
Interesante película que al principio parece una cosa y luego se va descubriendo la verdad escondida. Es el primer film que he visto de Bradley Cooper y me ha gustado. Me lo creo como joven psiquiatra enamorado de la Zellweger y realmente lo pasó mal cuando la niña puso definitivamente su vista en él. Y sí es verdad; se parece al presentador de Zapeando, pero este tio es más guapo.
Recomendable.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Al final se descubre que la niña ni siquiera es humana. Normal, una persona tiene sentimientos a no ser que sea un psicópata y esos juegos mentales no son humanos.
17 de abril de 2022
17 de abril de 2022
1 de 2 usuarios han encontrado esta crítica útil
Si sos exigente y no querés fastidiarte por ver una película con altos y muy bajos, no es para vos esta película.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Me ha parecido interesante, pero un final horrible tiene esta película, no tenía que haber terminado así la verdad, y es que te deja con una sensación extraña, te generas muchas preguntas en el final, de lo que tuvo que haber pasado (luego del hecho), no me pareció para nada un final correcto teniendo en cuenta, que la trama realmente fue interesante, la niña hizo una notable actuación, y la señora protagonista por su papel me dió mucha pena la verdad, por eso pienso que tenía que haber tenido otro final, algo así como que ella logra rescatar a esa pequeña de alguna manera.
Luego tienes dudas de lo que pasó, te imaginas que tuvo que haber terminado en prisión también, tuvo que haber explicado el hecho por la ausencia de la niña, y al final que hicieron con la supuesta madre de la niña también, entre otras preguntas más, igual por la trama le doy 5, porque no voy a mentir y eso que soy estricto, me ha atrapado.
Si hubiera tenido un final distinto, hasta emocionante y que así cierre la historia, lo hubiera calificado mejor obviamente, le hubiera dado un 7 u 8, como para tampoco exagerar tanto pero después eso lo vería, en fin no me arrepentí de verla, siendo exigente eso es muy positivo, aunque no se te cierre la historia jamás.
Luego tienes dudas de lo que pasó, te imaginas que tuvo que haber terminado en prisión también, tuvo que haber explicado el hecho por la ausencia de la niña, y al final que hicieron con la supuesta madre de la niña también, entre otras preguntas más, igual por la trama le doy 5, porque no voy a mentir y eso que soy estricto, me ha atrapado.
Si hubiera tenido un final distinto, hasta emocionante y que así cierre la historia, lo hubiera calificado mejor obviamente, le hubiera dado un 7 u 8, como para tampoco exagerar tanto pero después eso lo vería, en fin no me arrepentí de verla, siendo exigente eso es muy positivo, aunque no se te cierre la historia jamás.
10 de noviembre de 2009
10 de noviembre de 2009
Sé el primero en valorar esta crítica
Una de las pocas películas de terror que pasa más por el argumento que por el descuartizar personas. Eso ya es meritorio. Tiene varias frases interesantes pero la que más me gustó es cuando le preguntan a Renée Zellweger que qué clase de persona será esa niña mal nacida y ella contesta: "Simplemente una mala persona. ¿Te acuerdas cuando la gente se dividía en buena y mala, cuando (los hijos de puta, esto lo digo yo) no se escudaban detrás de un diagnóstico?". Creo que hay que caminar mucho para decir algo así. No es imperdible, pero no está de más verla.
Cancelar
Limpiar
Aplicar
Filters & Sorts
You can change filter options and sorts from here