Nunca me había emocionado tanto con una película de cualquier tipo, o con una de la Disney, como con ésta, realmente maestra y recomendable tanto para niños como para mayores.
Resulta inolvidable, cruel, amena, trágica y esperanzadora.
Logra combinar el "lado oscuro" de la vida con lo ameno e infantil de las películas propias de la Disney.

Si no es la mejor de Disney y de la animación en general, es de las muy mejores.
Realmente Maestra.

Perder a su padre siendo un cachorro a causa de una traición, vivir con dos animales a los cuales deberías de comerte por tu condición de León, y sobre todo, ser feliz pese a las adversidades, hacen de esta historia una grandísima historia.
Es una película para ver en compañía de tus hijos, pero aún así, no es la típica película que encierra un mensaje muy simple en el que se sabe desde el principio "por donde van los tiros".
Sin más, vive y se feliz. Akuna-Matata.

Alejada de la vida real de los animales del la sabana africana el filme El rey león no nenecita ni una sola gota de realidad es un vello cuento embellecido al cine. Los increíbles paisajes y animaciones que tiene la película me dejaron impresionado la primera vez que la vi, incluso ya años después me sigue gustando la calidad de la película.
La parte musical de la película es de las mejores que he escuchado en todas las películas de Disney.
La introducción de la película es inolvidable y muy bien lograda para mi parecer, los personajes me encantaron los villanos también y los cómicos como esa pareja traviesa de Timon y Pumbaa que logran cambiar un poco el sentido de la historia al encontrar a Simba y adoptarlo como un colega mas y brindarle también comedia ala película. En fin este filme conserva diversión emoción tristeza felicidad y escenas muy recordadas e interesantes. El rey león es un buen filme para la infancia.

Habré visto esta película un millón de veces, la primera vez con (creo) dos años, puede que uno (todos los que nacimos alrededor del año del estreno, 1994, lo hicimos) y cada vez que leo una crítica que no la recomienda para niños me da un vuelco el corazón. Dicen que esta película hace apología del nazismo porque los leones está por encima y se comen a los otros animales. ¡Enseñarles la naturaleza a los niños, la cadena alimentaria!¿A quién se le ocurre? Mejor que vean unos coches que hablan...
Más allá de la excelente calidad de la fotografía de la película, con detalles excelentes y de su banda sonora, de la que no entiendo como puede haber críticas negativas, ésta es una película con una historia muy completa y el mismo guión, con algunos cambios bien podría estar dirigido a adultos. Tiene aventura, acción, amor, muerte, superación, venganza, planes malvados... Hay quién dirá que los niños no entenderán ésto, pero no son tan tontos y perfectamente pueden entender ésta película sin traumatizarse por ver morir al padre de Simba. Además transmite valores como la responsabilidad o amistad y eso es lo que los niños extraerán de la película, y no que los leones son malos y se comen a los otros animales.

En resumen; una película estupenda con banda sonora sensacional, genial para niños (ni se os ocurra hacer caso de esas críticas que no la recomiendan), pero recomendable también para adultos.

En mi mente, tengo esta película como la primera que vi en pantalla grande, en el viejo cine de la playa que ahora es un supermercado. Tal vez, como pasa en "Amarcord", mis recuerdos no sean lo que se dice totalmente precisos, pero aunque no fuera la primera, lo que sí tengo seguro es que me pareció una grandísima película. Hoy la he vuelto a ver, en una sala pequeña en la que no habría apenas ni quince personas. La marabunta de adultos y niños se han ido a ver "El gato con botas", que es la que está de actualidad, pero mejor, porque así el ambiente estaba más recogido (incluso a pesar de que uno de los cuatro o cinco niños presentes no paraba de hablar) y podía permitirme el lujo de cambiar de asiento sin molestar a nadie.
Volver a verla ha sido una experiencia agradable, no solamente por recordar los viejos tiempos en los que yo era un crío y hacía cola a la entrada del cine ilusionado, sino también porque he podido saborear nuevamente un verdadero clásico de Disney, con una historia capaz de hacerte reir, de ponerse triste, de tenerte en vilo en el desenlace y de amenizar el relato con unas canciones que no por mucho escuchadas siguen pareciéndome geniales. En suma, ha sido un magnífico momento que espero que puede repetir igual de bien dentro de otros 16 años.

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