Clerks
7.4
56,179
21 de noviembre de 2009
21 de noviembre de 2009
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Comedia de muy bajo presupuesto que tuvo un gran éxito. La cinta transcurre en el pequeño supermercado donde trabajan los dos protagonistas. Éstos son unos fracasados de la vida en general. Se nos van mostrando los diferentes clientes que van a comprar, auténticos frikis jeje y las relaciones amorosas del protagonista.
La película en sí me gustó, pero para ser una comedia no me reí mucho, como bien digo en el título los diálogos son muy ingeniosos pero no me llegaron a parecer divertidos. Creo que una cosa no quita la otra.
Lo dicho que se agradece una comedia de aire fresco, con diálogos muy ingeniosos, y con el mérito de tener tan bajo presupuesto. Pero a mi entender le faltó algo de chispa en modo de diversión, lo que creo que sí tiene la segunda parte.
PD: está rodada en blanco y negro.
La película en sí me gustó, pero para ser una comedia no me reí mucho, como bien digo en el título los diálogos son muy ingeniosos pero no me llegaron a parecer divertidos. Creo que una cosa no quita la otra.
Lo dicho que se agradece una comedia de aire fresco, con diálogos muy ingeniosos, y con el mérito de tener tan bajo presupuesto. Pero a mi entender le faltó algo de chispa en modo de diversión, lo que creo que sí tiene la segunda parte.
PD: está rodada en blanco y negro.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Lo mejor: Jay y Bob El Silencioso jejeje y el interesante diálogo sobre los trabajadores de la Estrella de la Muerte de Stars Wars, realmente magnífico!
15 de diciembre de 2009
15 de diciembre de 2009
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Debut cinematográfico del cachondo Kevin Smith (aquí y ahora recomiendo a todos sus fans ver el "documental" -realmente no es tal- "An Evening with Kevin Smith", una recopilación de charlas que el bueno de Smith fue dando por distintas universidades americanas; no tiene desperdicio).
Con apenas 27.000 dólares de presupuesto y un plan de rodaje de 21 días, Smith logró crear todo un desvergonzado clásico encumbrado por su sencillez, pero a la vez mordaz crítica de la sociedad actual. El cineasta logró plasmar como nadie las frustraciones e inquietudes de unos jóvenes que se ganan la vida de manera más bien mediocre, sin tener muy claras sus aspiraciones. Dante y Randal son los "cajeros" de dos locales a cada cual más miserable que pasan las horas de trabajo discutiendo sobre temas banales e intrascendentes mientras a su alrededor todo un microcosmos de lo más surrealista se va sucediendo ante sus narices teniéndoles a ellos como espectadores de lujo.
A pesar de sus más que evidentes limitaciones presupuestarias (a lo que hay que añadir que la película se rodó por las noches en la tienda en la que el propio Kevin Smith estaba trabajando en ese momento), el filme cuenta con unos personajes antológicos. La empatía hacia ellos es inmediata. Dante y Randal son los principales, pero el abanico de extravagantes secundarios es lo que realmente eleva la categoría de este filme.
Con apenas 27.000 dólares de presupuesto y un plan de rodaje de 21 días, Smith logró crear todo un desvergonzado clásico encumbrado por su sencillez, pero a la vez mordaz crítica de la sociedad actual. El cineasta logró plasmar como nadie las frustraciones e inquietudes de unos jóvenes que se ganan la vida de manera más bien mediocre, sin tener muy claras sus aspiraciones. Dante y Randal son los "cajeros" de dos locales a cada cual más miserable que pasan las horas de trabajo discutiendo sobre temas banales e intrascendentes mientras a su alrededor todo un microcosmos de lo más surrealista se va sucediendo ante sus narices teniéndoles a ellos como espectadores de lujo.
A pesar de sus más que evidentes limitaciones presupuestarias (a lo que hay que añadir que la película se rodó por las noches en la tienda en la que el propio Kevin Smith estaba trabajando en ese momento), el filme cuenta con unos personajes antológicos. La empatía hacia ellos es inmediata. Dante y Randal son los principales, pero el abanico de extravagantes secundarios es lo que realmente eleva la categoría de este filme.
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Quien puede olvidarse de los ya míticos (sobre todo por las secuelas que han propiciado) Jay y Bob el silencioso que, sin salir más de cinco minutos en pantalla, logran dejar huella en el espectador con sus continuos insultos e improperios, con esos bailes tan bizarros y, como olvidarlo, con ese primo ruso de Bob: impagable.
La película está estructurada en pequeños fragmentos que van rellenando la dura jornada de trabajo de Dante y Randal. Así, en apenas un puñado de horas, hay sitio para hablar de un tío que se rompió el cuello mientras intentaba chupársela; de cómo la novia de Dante ha chupado a su vez 37 pollas; de ver a un comercial de chicles dar una charla a unos jóvenes en contra del tabaco; de presenciar un partido de hockey en el tejado del local que termina a los diez minutos cuando pierden la única bola que habían traído; la reflexión en torno al enorme número de autónomos que debieron morir en la destrucción de la Estrella de la Muerte por parte de los aliados (éste momento es especialmente friki y genial); la escena de sexo con un muerto; la del funeral; el pedido de pelis porno y la películas infantil, y un largo etcétera.
Pese a esta continua sucesión de situaciones, el filme no llega a hacerse pesado en ningún momento. Más bien al contrario, estamos esperando cuál será la próxima ocurrencia o el siguiente tarado que entrará al local. La culpa está sin duda en el excelente guión del propio Smith (especialmente en esos diálogos tan directos y ofensivos) y en la más que solvente dirección que logra que, pese a contar con unos decorados de lo más limitados, apenas lo percibamos.
Como pequeña curiosidad que no viene al caso pero resulta interesante, decir que fue más caro conseguir los derechos de las canciones que aparecen en el filme, que la propia película en sí.
En definitiva, un gran debut de Kevin Smith que logró triunfar en los cines (en EEUU recaudó más de 3 millones de dólares) y llegó con gran facilidad a un público ávido de escuchar las desternillantes situaciones que el bueno de Smith planteaba, por muy surrealistas y pintorescas que fueran.
La película está estructurada en pequeños fragmentos que van rellenando la dura jornada de trabajo de Dante y Randal. Así, en apenas un puñado de horas, hay sitio para hablar de un tío que se rompió el cuello mientras intentaba chupársela; de cómo la novia de Dante ha chupado a su vez 37 pollas; de ver a un comercial de chicles dar una charla a unos jóvenes en contra del tabaco; de presenciar un partido de hockey en el tejado del local que termina a los diez minutos cuando pierden la única bola que habían traído; la reflexión en torno al enorme número de autónomos que debieron morir en la destrucción de la Estrella de la Muerte por parte de los aliados (éste momento es especialmente friki y genial); la escena de sexo con un muerto; la del funeral; el pedido de pelis porno y la películas infantil, y un largo etcétera.
Pese a esta continua sucesión de situaciones, el filme no llega a hacerse pesado en ningún momento. Más bien al contrario, estamos esperando cuál será la próxima ocurrencia o el siguiente tarado que entrará al local. La culpa está sin duda en el excelente guión del propio Smith (especialmente en esos diálogos tan directos y ofensivos) y en la más que solvente dirección que logra que, pese a contar con unos decorados de lo más limitados, apenas lo percibamos.
Como pequeña curiosidad que no viene al caso pero resulta interesante, decir que fue más caro conseguir los derechos de las canciones que aparecen en el filme, que la propia película en sí.
En definitiva, un gran debut de Kevin Smith que logró triunfar en los cines (en EEUU recaudó más de 3 millones de dólares) y llegó con gran facilidad a un público ávido de escuchar las desternillantes situaciones que el bueno de Smith planteaba, por muy surrealistas y pintorescas que fueran.
20 de abril de 2010
20 de abril de 2010
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Divertida, cachonda, irreverente y un tanto obscena, al menos en cuanto a su lenguaje, película, primera dirigida por Kevin Smith.
Aquí consiguió que la crítica internacional y el público se rindieran a sus pies por la estupenda propuesta de sana jocosidad, gracias a una sencilla pero estudiada puesta en escena, y la chispeante galería de extraños y estrafalarios personajes que pueblan el microcosmos de la tienda.
Dividida en diversos capítulos, todos ellos están llenos de ingenio e imaginación en los largos diálogos, con una excelente dirección de intérpretes, muchos de ellos primerizos, que tienene la particularidad de echar sus largos discursos a cámara fija, con lo difícil que esto es.
El ritmo no baja nunca y las risas y sonrisas son continuas. Esto hace que "Clerks" sobreviva sobre muchos experimentos de jóvenes realizadores, deseosos de que su voz llegue al gran público.
Kevin Smith consiguió con esta película un merecido reconocimiento internacional que sólo a medias se ha mantenido por mor de su hasta ahora irregular filmografía.
Aquí consiguió que la crítica internacional y el público se rindieran a sus pies por la estupenda propuesta de sana jocosidad, gracias a una sencilla pero estudiada puesta en escena, y la chispeante galería de extraños y estrafalarios personajes que pueblan el microcosmos de la tienda.
Dividida en diversos capítulos, todos ellos están llenos de ingenio e imaginación en los largos diálogos, con una excelente dirección de intérpretes, muchos de ellos primerizos, que tienene la particularidad de echar sus largos discursos a cámara fija, con lo difícil que esto es.
El ritmo no baja nunca y las risas y sonrisas son continuas. Esto hace que "Clerks" sobreviva sobre muchos experimentos de jóvenes realizadores, deseosos de que su voz llegue al gran público.
Kevin Smith consiguió con esta película un merecido reconocimiento internacional que sólo a medias se ha mantenido por mor de su hasta ahora irregular filmografía.
3 de junio de 2010
3 de junio de 2010
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La historia de cómo Smith consiguió reunir el dinero para poder realizar Clerks podría dar para una película (tuvo que vender su colección de cómics, entre otras cosas), seguro que tan divertida como la que nos ocupa. Smith pone como protagonistas de la película a dos personajes antagonistas, por un lado tenemos a Dante (Brian O'Halloran), indeciso y algo acomplejado, mientras que por otro está Randall (Jeff Anderson), quien es mucho más descarado, incluso se podría decir que un poco engreído. Si a dicha pareja añadimos un grupo de estrafalarios clientes (los protagonistas trabajan como dependientes), la comedia está servida.
Lo primero que llama la atención de la ópera prima de Smith es su acabado feísta, la poca definición de su fotografía en blanco y negro, sus limitadas localizaciones y sus inexpertos actores (todo propio de su bajísimo presupuesto), actores que, por contra, ofrecen unas interpretaciones tremendamente frescas. Porque eso es lo que rezuma la película de Smith: frescura.
La dirección peca de simplista (pero eficaz, véase la escena en el coche), todo lo contrario que su guión, el cual termina por ser lo mejor de la función. Y es lo mejor porque Smith hace recitar a sus personajes toda suerte de irreverente diálogos, diálogos en los que predomina un divertido tono soez y diversos guiños cinematográficos. Además, aquí realizan su primera aparición los ya míticos Jay (Jason Mewes) y Bob el silencioso (Kevin Smith), dos personajes que no sólo han brillado en posteriores trabajos de Smith, sino que han sido vistos en otras películas y series, así como en toda suerte de merchandising…
Lo primero que llama la atención de la ópera prima de Smith es su acabado feísta, la poca definición de su fotografía en blanco y negro, sus limitadas localizaciones y sus inexpertos actores (todo propio de su bajísimo presupuesto), actores que, por contra, ofrecen unas interpretaciones tremendamente frescas. Porque eso es lo que rezuma la película de Smith: frescura.
La dirección peca de simplista (pero eficaz, véase la escena en el coche), todo lo contrario que su guión, el cual termina por ser lo mejor de la función. Y es lo mejor porque Smith hace recitar a sus personajes toda suerte de irreverente diálogos, diálogos en los que predomina un divertido tono soez y diversos guiños cinematográficos. Además, aquí realizan su primera aparición los ya míticos Jay (Jason Mewes) y Bob el silencioso (Kevin Smith), dos personajes que no sólo han brillado en posteriores trabajos de Smith, sino que han sido vistos en otras películas y series, así como en toda suerte de merchandising…
SPOILER: El resto de la crítica puede desvelar partes de la trama. Ver todo
spoiler:
Me gusta especialmente la conversación que mantienen Dante y su novia (Marilyn Ghigliotti), la cual deriva (de forma hilarante) en un recuento de las personas con las que han mantenido relaciones sexuales. Dicha escena sirve como buena muestra del talento como guionista de Smith.
10 de septiembre de 2010
10 de septiembre de 2010
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Para empezar a conocer a Kevin Smith (al que tanto se adora por sus primeras películas), he comenzado por su ópera prima, y no se si será por las expectativas que llevaba encima pero no me ha parecido tan brillante como me esperaba. Con esto no quiero decir que me parezca una mala película, ni mucho menos, es más, me he reído bastante en varias escenas pero creo que es el tipo de película que se puede disfrutar más si es vista en compañía de amigos porque lo que puede que a ti no te haga tanta gracia se la haga al que tienes al lado, y de oírle a él partirse la caja acabas riéndote tu también.
Algo que me gusta de Clerks es su simplicidad, y no me refiero a los medios usados para hacerla (blanco y negro, sonido...), sino a la capacidad de mezclar situaciones cotidianas como que a un cajero le toque trabajar en su día libre, con situaciones realmente extravagantes como el tipo de gente que puede entrar en la tienda, y que salga tan buen resultado como este, sencillo y sin complicaciones.
Pasa lo mismo con las relaciones entre los personajes y sus conversaciones, se consigue encajar, sin que desentone, todo tipo de frases soeces y la intención en un par de momentos de dejarle un mensaje al espectador sobre la amistad y el amor.
En resumen, una buena peli de humor que merece la pena ver.
Algo que me gusta de Clerks es su simplicidad, y no me refiero a los medios usados para hacerla (blanco y negro, sonido...), sino a la capacidad de mezclar situaciones cotidianas como que a un cajero le toque trabajar en su día libre, con situaciones realmente extravagantes como el tipo de gente que puede entrar en la tienda, y que salga tan buen resultado como este, sencillo y sin complicaciones.
Pasa lo mismo con las relaciones entre los personajes y sus conversaciones, se consigue encajar, sin que desentone, todo tipo de frases soeces y la intención en un par de momentos de dejarle un mensaje al espectador sobre la amistad y el amor.
En resumen, una buena peli de humor que merece la pena ver.
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